TENEBRIS || STEAN

17. Cinco ensaladas.

Sin despedirse Stiles y Dean se fueron, a donde Sam y el Sheriff, el único consternado era Derek, por dos razones, la primera el hecho de que Stiles se había ido muy campante con el cazador, y la segunda que a nadie mas parecía molestarle la primera.

-Te lo diré de la mejor forma en la que puedo hacerlo.- Comenzó a hablar Scott, semi llamando la atención de los demás.- Perdiste tu oportunidad con Stiles, así que déjalo en paz.

-No sé de que hablas.- Gruñó Derek, escapando para tomar sus cosas y tratar de alcanzar a Stiles.

-Cualquiera con un poco de sentido común se da cuenta de lo que sucede, Stiles no porque es un idiota en estas cosas...

-Tu siempre eres un idiota.- Celebró Peter con una sonrisa.

-Eso no importa.- Respondió el moreno, rodando los ojos.- Ya te lo dije Derek, déjalo en paz.

-Como sea.- Derek soltó un último gruñido antes de subir a su auto y comenzar a conducir a la casa de Stiles, tenía que hablar con él a la de ya.

***

-¿Qué haces aquí?- Inquirió el Sheriff nada mas ver a su retoño entrar en su oficina, acompañado de Dean.- Tu no debes meterte en estos problemas, ya tienes suficientes con tus amigos.

-Vamos papá, puedo ser útil y lo sabes.- Stiles guiñó un ojo y se sentó en la primer silla que vio vacía.- ¿Y bien, que sucede?

-Un fantasma.- Respondió Sam, pasándole a Stiles un expediente.

-¿Para eso me sacaste de la clase?- Gruñó Dean, echando un vistazo sobrevuela hombro de Stiles para leer el manifiesto.

-¿De que rayos hablas?

-Le estaba dando clases a Stiles de defensa personal.- Simplificó el rubio.- Bien, vamos entonces.

-¿Todos?- Se quejó el Sheriff, no dudaba de las capacidades de su hijo, mucho menos de los cazadores, pero si de su seguridad.

-No se preocupe por nosotros, hemos hecho esto desde hace mucho tiempo, y Stiles se queda.- Sentenció el rubio tomando el expediente y saliendo con su hermano. Por extraño que pareciera Stiles ni se quejó y tampoco se molestó, confiaba en que Dean regresaría antes de que así diera cuenta.

-Hablemos un poco.- Dijo el Sheriff y el adolescente no pudo evitar tensarse, su padre casi nunca iniciaba una platica.- Debemos hablar de tu pretendiente.

-Creí que Dean te agradaba.

-Oh lo hace. Él está bien, me gusta para ti.- Aseguró el mayor Stilinski, el castaño sólo pudo quedar mas confundido.- Yo quiero hablar de Derek.

-¿Ehh, que tiene que ver Hale aquí?- Preguntó Stiles, sorprendido de que Derek fuera otra vez tema de conversación entre ellos, la primera vez había sido cuando Stiles había llorado una noches entera y solo una después de que Derek se fuera, el adolescente le había dicho a su padre que lo quería, este lo escucho atento y lo consoló, al día siguiente fue como si nada hubiera pasado.

-Bueno, cuando estuviste fuera, Derek vino a mi y me contó ciertas cosas.- Suspiró cansado.- Él dijo algo sobre estar equivocado y luchar para ser digno de ti. En lo personal, creo que es un chico incomprendido, dañado, no es muy diferente de Dean, tienes un tipo muy extraño para hombres.

-Lo sé.- Se rió Stiles.- Pero, Derek no me interesa, no lo hace desde hace mucho tiempo, te lo puedo asegurar.

-¿Y entonces?- Inquirió Noah, a lo que Stiles se encogió de hombros.- Hijo estoy hablando en serio, no quiero una pelea de hombres super rudos en el patio, Derek dijo algo y estoy seguro que es tan terco que no se va a rendir fácilmente.

-No habrá tal pelea y Derek puede decir lo que quiera, mi mente está en asuntos mas importantes.- Simplificó el castaño pero su padre aún lo miraba serio.- Hablaré con él, ¿de acuerdo? Le dejaré las cosas en claro.

-Bien.- Sabiendo que seria todo lo que obtendría de su hijo, Noah continuó revisando expedientes, con ayuda del adolescente, para encontrar mas casos sobrenaturales.

Un par de horas mas tarde, los hermanos Winchester volvieron, con la victoria estampada en el rostro.

-Fue alucinante.- Celebró Dean sentándose en la silla continua a la de Stiles, este le preguntó detalles que el rubio muy contento le compartió.

-¿Qué quieren de comer?- Preguntó el Sheriff cuando Dean había terminado su relato.- Se me antoja una hamburguesa con doble carne y...

-¡Si!- Exclamó Dean.

-¡No!- Regañaron Stiles y Sam.

-Pero...

-Nada de hamburguesas en  mi guardia, Winchester.- Puntuó Stiles, tomando el teléfono para ordenar la comida.- Serían cinco ordenes de pechuga asada, ensalada y un pay de frambuesa.

Nadie sabía a donde había llamado, seguro a una fonda o restaurante casero cercano.

-¿Porqué cinco?- Preguntó Noah.

-Parrish, duh.- Respondió Stiles en tono obvio y el Sheriff no pudo evitar avergonzarse por olvidar a su compañero.

-Eso es comida de conejos Stiles... Yo necesito proteína para vivir...- Lloriqueo Dean, Sam rió al verle así, esa actitud pocas veces salía de su hermano.- Moriré de hambre.

-Mejor de hambre y no de un infarto, con tanta grasa no me sorprendería si un día te explotara una arteria.- Respondió Stiles, sin siquiera inmutarse por los ruegos de Dean de una hamburguesa doble, con queso y tocino, era inmune a eso gracias a su padre.

-Al fin alguien esta conmigo.- Celebró Sam, chocando los cinco con Stiles.

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