Heredera de las sombras

capitulo XXI

Sissi

Dos pasos dentro del palacio y sentí que se abalanzaban cinco personas, tratado de cubrirme los ojos y la boca, tomándome los brazos y las piernas. Trate de defenderme, rasguñe y patee a uno de ellos, mientras escuchaba como mis damas gritaban alrededor mío, tratando de salvarme.

Me dieron un fuerte golpe en la cabeza y lo ultimo que recuerdo es que me arrastraron hasta la celda donde me encuentro ahora.

No se cuánto tiempo ha pasado porque esta todo oscuro.

Idiotas.

¿Se supone que la heredera de las sombras debería estar asustada porque la dejan sin luz?

— Seguro fue idea de Ansgar — digo en voz alta.

Me lo he pasado pensando, meditando, recordando. Las cosas que han sucedido últimamente, repasando mentalmente todo lo que hemos hecho este ultimo tiempo.

Como contándome a mi misma la historia de mi vida.

Me siento cambiada. Se que estoy cambiada.

Se que el año pasado jamas me hubiera atrevido a despedirme de Vincent como lo hice hace un rato...

O acaso fue ayer? No importa.

— Vincent, Vincent, Vincent.

Me golpeo la cabeza en las barras de la celda donde me tienen atrapada.

No tengo idea como salir de aqui.

La oscuridad no me da miedo, pero tampoco tengo una habilidad especial para ver en ella.

Asi que realmente estoy atrapada.

Vincent me advirtió que no me desesperara por quedarme sola. Seguro que no se imagino que me encerrarían tan rápido.

Ambos sabíamos que algo así podía pasar pero, supongo que al callarnos esos pensamientos, pensamos que nos estábamos protegiendo de que se hicieran realidad.

Quizás debí decirle que lo quería.

Al repasar lo que ha pasado los últimos meses, solo podía recordar lo feliz que me había sentido cuando estaba bien con el. O lo desesperada que estuve cuando las cosas estuvieron mal, cuando él estuvo lejos.

No quiero estar aqui.

Porque mi ejercito podría estar en este momento enfrentado a Éon, mis soldados muriendo en batalla, bajo el poder de un rey inepto.

No quiero estar aquí porque quiero estar al lado del general. Se sentirá tan vacío como yo? Sentirá que falta una parte de él?

— Me voy a deprimir en esta celda estupida.

Pero no puedo evitar cuando se me caen las lagrimas al pensar en que Vincent podría estar luchando y yo no estoy a su lado.

Me pongo de pie y entrecierro los ojos tratando de ver algo.

No puedo.

De pronto siento un golpe fuerte, en algún lugar que parece estar cerca de mi.

— Mi señora?

— Anette? — respondo.

Distingo la luz de una antorcha, acercándose a mi, y suelto un grito agudo cuando veo a Anette corriendo a mi celda, con un manojo de llaves en la mano.

Estiro los brazos por las barras de la celda.

— Anette!

Me sonríe y me pasa la antorcha.