[OBRA TERMINADA]
Una deidad atrapada en el cuerpo de un canino, se acerca con el propósito de liberar su alma a un ser demoníaco capaz de hacer que recupere su cuerpo. Pero para desgracia de Lan Wangji, ese cultivador demoníaco le teme con brutalida...
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Cacería
—Hanguang-jun, ¿qué hacen los dioses para divertirse? —, Wei Ying se encontraba en una de las ramas gruesas del árbol de hojas anchas en el que conoció a Lan Wangji, quien estaba leyendo en la sombra de este —, siempre lo veo meditar, leer y tocar instrumento... ¿esa es su diversión?
Los pétalos de las flores del aquel gran árbol llamaron la atención de Wei Ying, al tener una flor entera ensus manos, colgó su cuerpo del árbol y dejó caer pétalo por pétalo sobre la cabellera impecable de Lan Wangji.
—Basta —, le advirtió.
—Hanguang-jun, pronto me iré, ¿quieres que te traiga flores de loto el próxio año? —, preguntó inocentemente con un toque de burla y travesura escondida en su voz. Lan Wangji dejó de leer, pero no levantó la mirada ni cambió de posición.
Ya habían pasado los tres meses de estudio de Wei Ying, había recibido tantos castigos y hecho tantas travesura que le eran imposible contar las veces que se arrodilló frente a la pared de reglas. Había probado el amargo pero a la vez adictivo sabor de "la sonrisa del emperador". Y por supuesto, había pasado sus días junto a Lan Wangji, aveces luchando con él y otras solo compartiendo el silencio.
Esta era su última semana antes de irse de la profundidad de las nubes.
Lan Wangji —¿Te vas?
—Si, ¡pero no te preocupes! Volveré el próximo año —, se apresuró a decir.
Lan Wangji cerró brutalmente el libro budista que se encontraba leyendo y se levantó del temblado suelo. Dejando a un confundido Wei Ying con flores entre sus manos.
Como era tradición, el último día que pasarían en la profundidad de las nubes, los líderes de cada secta y sus hijos se reunieron para realizar una cacería, como despedida y para aplicar lo aprendido. Los jades Lan se encontraban en una especie de torre de vigilancia desde la que se podía ver todo lo que pasaba debajo, junto a los líderes de secta y la mujeres que no participarían en la cacería.
Debajo, en el campo de batalla, se encontraban los estudiantes organizados por sectas, Wei Ying entre ellos. En la primera prueba a la que se verían enfrentados, era la arquería. Cientos de cultivadores eligieron un lugar donde a menudo acechaban demonios y bestias. Debían luchar por la presa dentro de un período de tiempo asignado. De esto se trataba la caza: A lo largo de muchos kilómetros, había muchas presas. Éste era uno de los tres terrenos de caza más conocidos y había acogido muchas competencias de caza de gran importancia. Un acontecimiento tan significativo no era solo para que las sectas grandes y pequeñas mostraran sus habilidades y reclutaran talentos, sino también para presentar a los cultivadores más jóvenes, como era el caso.
Los aplausos y bullicio se desplomaron en cuanto los cultivadores de cada secta tomaron los arcos empezaron a prepararse para la prueba. La primera persona en tirar con el arco, fue un joven y apuesto de túnicas blancas como la nieve y sonrisa prepotente. Se trataba de Jin Zixuan. Había siete anillos en los blancos, acorde con las siete vías de acceso. Cuanto más cerca estuviera la flecha del centro, más ventajosa sería su respectiva vía de acceso. Sin bajar la velocidad, Jin Zixuan sacó una flecha y disparó. Dio justo en el centro. Los vítores vinieron de todas las torres de vigilancia.
