Quedarse dormida al lado de un extraño, no estaba en los planes de Babi. Cuando aquél muchacho que se hacía llamar su novio se durmió, ella abandonó el departamento.
No sabía adonde iba, pero se sentía más segura allí, que en la habitación con Nate.
La gente la saludaba, le sonreía, todas esas persona conocían a Babi, pero ella no reconoció a ninguna.
Siguió caminando por un cendero de hermosos árboles, y llegó a un hospital. Aquél hospital de tamaño pequeño se le hacía familiar. Entró, y vió todo normal. Había pacientes sentados, esperando la llamada del doctor. Médicos hablando, enfermeras riendose de quien sabe qué. Hasta que una muchacha rubia, de una bella figura se le acerca corriendo. La abrazó lo más fuerte posible, la besó en toda la cara, y le dijo varias veces cuanto la extraño.
-¡Babi! No tienes idea cuanto te extrañe. ¡Nunca llamastes! ¡No tengo ni mensajes tuyos! - le dijo la muchacha.
Babi la miraba sorprendida, aquélla voz chillona la conocía, pero no se acordaba de la muchacha que tenía adelante suyo.
-¿Qué te pasó Babi? ¿Porqué tenes un moretón en la cara? No me digas que... ¿Harry te golpeó?- le preguntó.
-¿Harry?- pregunto Babi.
¿Acaso no se llamaba Nate? ¿Quién es Harry?
Las preguntas fluyeron lentamente, como un murmuró por los labios de Babi, estaba confundida. ¿Quién era Harry?
-Emm... tuve un accidente, y... los doctores dicen que... perdí la memoria, pero que la voy a recuperar. ¿Quién eres?-
-¡Babi! Soy Silvia, ayudante y compañera tuya. La mejor por cierto.- Ambas rieron.
-¿Y cómo está Harry? ¿El estaba en el accidente contigo?- La inépta de Silvia, no entendió el hecho de que su memoria se había perdido. Que se había quedado momentáneamente dormida.
-¿Harry? No, nosé. Nosé quien es Harry. ¿No querrás decir Nate?- le contestó Babi.
Silvia lo entendió todo.
-¿No te acuerdas de Harry? El muchacho por el cual dejastes a Nate, y te fuistes con el. ¡Harry, el chico guapo que te venía a buscar! ¿No te acuerdas?-
La ineptitud de Silvia y lo atolondrada que era, hicieron que Babi se cuestione aún más preguntas acerca de su vida pasada.
¿Quién era Harry? ¿Quién era Nate en realidad? ¿Dejar a Nate? ¿Huir con Harry?
La infinidad de preguntas que rebotaban en la cabeza de Babi eran muchas como para responderlas de inmediato. Estaba agotada, su mente estaba agotada. Trataba e intentaba de recordar a Harry, a Nate, que es lo que había pasado. Pero nada. Su memoria aún dormitaba en el más profundo de los sueños.
-¿Babi estás bien?- le preguntó Silvia que la vió un poco decaida.
-No. Si, si estoy bien. Estoy un poco cansada, pero... Silvia, sabes donde está ahora este chico Harry.-
-Sisi, creo que está en el gimnasio. Como siempre. ¿Queres verlo no? ¡Que ternura!-
-Si, quiero verlo. ¿Dónde quedá el gimnasio?- le preguntó Babi fingiendo una sonrisa de enamorada.
-Emm... caminá todo derecho, y cuando veas una plaza enorme y colorida, al frente de un banco está el gimnasio. Nos vemos amiga.- le dijo Silvia. Luego se fue a la cafetería.
Babi al saber la dirección, se dirigió de inmediato a aquél gimasio. No porque quisiera conocerlo, sino por la intriga que tenía acerca de aquél muchacho. Si de verdad ella había dejado a Nate por ese muchacho, porque es que no estuvo con ella en el hospital. Porque no se quedó esperando que despertara.