-¿Cuándo lo celebra?- le preguntó Silvia.
-...Dentro de dos semanas...- Babi sonreía-...no lo puedo creer...-las lágrimas brotaban de sus ojos. Eran lágrimas de felicidad.
-Dejáme leer la invitación...- Silvia le arrebató la carta de las manos:"Querida Babi Pradali:
Estas cordialmente invitada a la boda de Ariadna Pradali y Germán Martín Tesina... que se realizará el dia 25 de noviembre en el Palacio del Conde Lombillo, La Habana, Cuba..."-¡¡¿Cuba!!?- dijo Silvia sorprendida- ¿Vas a tener que ir hasta Cuba? - le preguntó. ¿Vas a ir?
-Por supuesto que voy a ir... Aunque no sé... Cuba- le dijo confusa Babi.Tendría que ir hasta Cuba para asistir al casamiento de su hermana. ¿Porqué habrá elegido un lugar tan alejado? ¿No podía casarse en alguna iglesia cercana?.
-Ariadna siempre fue aventurera. Si quiere que vaya a Cuba. Iré- dijo Babi. La emoción de ir a un país desconocido la exaltaba.
Luego del mediodía, terminó su turno en el hospital y se dirigió a la universidad. Sólo tres semanas restaban para que Babi se graduara. Eso la hacía muy feliz. Pronto tendría un título y haría lo que ella más amaba.
A las seis salió de la universidad, se dirigió a su casa. Al llegar, vió a Nate esperándola en el sofá.
-Hola Nate- le dijo fríamente Babi.
-Hola hermosa. ¿Cómo estás?-le preguntó.
-Bien-
-Babi siéntate, quiero contarte algo- le dijo- mañana al mediodía partó del país. Tengo una gira que durará aproximadamente...tres o cuatro semanas. Voy a viajar por todo América.-
Nate se encontraba feliz. Babi aún más, pero no podía terminar su relación con el en ese momento, le arruinaría su gira y fracasaría en el mundo de la música. Por lo que no tocó el tema.-¡Es genial Nate! Felicidades, te lo mereces...- la felicidad de Babi creció, no sólo no lo vería por mucho tiempo, sino que podría pasar más tiempo con Harry.
-Mi amor hoy si puedo quedarme contigo...¿Quieres?- le preguntó Nate.
Babi no sabía que responder. No quería dormir con el. No quería estar con el. Ni siquiera quería tener su cuerpo cerca del suyo.
Extrañaba a Harry, con el quería dormir, con el quería estar, quería sentir sus labios y su manos acariciándole el cabello, quería sentir su cuerpo tibio al lado suyo. Eso era lo que quería.-¡Babi! Holaa...te quedastes en el espacio. ¿Quieres que me quede hoy?- Nate estaba insistente.
-Si...por supuesto- el desprecio de Babi hacia Nate era evidente. Evidente para cualquier persona que viera la relación desde un punto de vista lejano. Pero para Nate no era evidente, tenía la verdad que chocaba en sus narices y no lograba comprenderla o entenderla. ¿Acaso era tonto?
-Bien...iré a comprar comida china, ¿Quieres?- le dijo Nate.
-Si-
Nate se fue. Al instante en que la puerta se cerró, Babi tomó su teléfono y le mandó un mensaje a Harry.
"Mi amor, hoy no vengas, luego te explicó"
Segundos después el celular de Babi sonó.
"Tarde. Ya estoy en tu ventana"
Una sonrisa se marcó en su rostro. El era tan impredecible,
Luego de leer el mensaje corrió a su habitación. Y allí estaba, sonriendole.