×Siete×

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Tres semanas

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Tres semanas.

Exactamente eso llevaba desde la última vez que supo algo de Kim.

De hecho, le había preguntado a los demás y tampoco sabían responderle. ¿Dónde estaba TaeHyung?

Desde aquella llamada no había sabido nada sobre el Omega y eso sin duda lo mantenía inquieto, le guste o no, ambos, como había dicho NamJoon, estaban destinados a ser. Sinceramente recuerda a la perfección el regaño de SeokJin cuando le dijo que no se había dignado en buscar al chico de cabello azulado.

Bueno, quizás y solo quizás él había estado ocupado.

Tras aquella declaración que le había hecho a Kim su cabeza no dejaba de dar vueltas, su lobo le pedía más que solo simples palabras, pero Jeon solo decidió despejarse.

Le habían invitado a la inauguración de un bar bastante famoso, era de la alta alcurnia a pesar de parecer solo una caverna. Solo se servía lo mejor y debe admitir, que la decoración por dentro era exquisita.

Ahí había conocido a un simpático chico que, al igual que él estaba despechado. El Omega era lindo, pero le llevaba dos o tres años, aunque no lo aparente por su lindo rostro y su estatura. Si mal no recordaba su nombre era Ryeowook.

Ambos bebieron, no demasiado, se cayeron bastante bien y decidieron intentar algo aunque sea para tratar de llamar la atención de aquel alfa a quien el lindo Omega quería impresionar. Realmente a JungKook le pareció una idea tonta y tierna, porque estaba poniendo su reputación en juego solo para tratar de conquistar a alguien que parecía muy lejano.

Pero no fue así para el mayor que solo le había dado el primero beso. No sintió realmente nada, ni bueno, ni malo. Solo fue un beso, pero aún así lo siguió mientras miraba de reojo al hombre que se quedó en silencio ante la escena.

No pasó mucho cuando el mal humor del alfa se hizo notar, El Omega reía feliz de los resultados y el celular de JungKook había comenzado a sonar, por suerte, estaban en un área privada y no había mucho ruido.

-¿Hola?

Nunca había recibido una llamada de aquel contacto, y escuchó la primera parte donde dijo que era TaeHyung, pero luego no siguió prestando atención porque las tímidas manos del otro chico se envolvieron en su cuello pidiendo una disculpa y comenzando a dejar besos en sus mejillas y cuello.

No entendía aquel comportamiento del todo. O no hasta que notó aquel hombre los miró sin importar llamar la atención y tiró una copa contra la mesa levantándose enojado.

Ahi ambos rieron y el menor le recriminó al mayor por hacer enojar al otro alfa, pero este solo dijo que lo merecía por tonto.

Se llevaban bien a decir verdad, quizás podrían seguir siendo amigos.

Asi que cuando ambos intercambiaron números se sonrieron, pero olvidó que Tae seguía del otro lado de la línea y trató de excusarse. Pero luego de un "Nada" rotundo la llamada se cortó y se quedó pasmado en el lugar.

-¿Qué?

Eso lo llevaba hasta donde estaba actualmente, su parte lobuna estaba de un humor horrible, estaba experimentando cambios de humor igual de malos gracias a eso. Y no sabía porqué, lo peor del caso es que su época de celo estaba cerca, donde su lobo es más terco y Jeon solo puede encerrarse en su cuarto ya que le es imposible siquiera oler a un ser humano en esos días.

Maldecía una y otra vez ¿Había hecho algo malo? Nunca llegó a entender bien Porqué le cortó la llamada, bueno, hay posibilidad de que Kim haya escuchado cuando Wook le había besado, pero no tiene sentido, porque había música de fondo que impedía saber tan fácil y además, no estuvo ahí ni siquiera para ver si realmente había sido él. Pudo bien haber sido otra pareja.

Realmente estuvo feliz cuando aquel alfa, KyuHyun, fue por Wook para que resuelvan las cosas y este aceptó aunque haciéndose el difícil. Pero estaba levemente mal porque en si, los envidiaba de una forma enferma.

Él había besado a tantos, buscando un tipo de reacción de parte de Tae y lo único que conseguía era que esté lo tache de maldito fácil.

Pero joder, también había estado dando pena tras él todo el tiempo y en cada jodido momento. ¿Eso no contaba? No, era más fácil decir solamente que era un Fuck Boy al que solo me gustaba acostarse con todos.

A sinceridad, no sabía que hacer con Kim, si le demostraba cariño él reaccionaba a modo de defensa, si lo ignoraba también lo ignoraba, se buscaba una pareja para olvidarlo y no podía. Vaya jodida mierda.

Pero ver a Kyu y a Wook lo hizo sonreír. Eran una pareja problemática, hasta cierto punto, porque el alfa era torpe pero aún así quería a su Omega, y el Omega era demasiado bonito y amable por lo que su amabilidad constantemente hacia enojar al aparentemente muy posesivo alfa. Además nunca habían tenido nada serio, pero por lo poco que sabía, ahora estaban saliendo de manera oficial.

Soltó una risa llenando de pintura sus dedos y acarició con delicadeza el lienzo frente a él. Los colores anaranjado, rosa, rojo, blanco, amarillo, fucsia, aqua y malva fueron los protagonistas de aquel arte.

Movía sus dígitos de manera cursiva siempre, tan dinámico y a la vez intenso que de vez en cuando los trazos se hicieron grandes. Decidió por mero instinto no usar pinceles. No pondría madera de por medio entre el sentir y los pigmentos, esa vez no. Solo se dejó llevar de la manera más fascinante posible hasta que quedó satisfecho con el resultado. Aquello, sin dudas, le recordaba a la pareja, tan ferviente y tan cálido era verlos. Le gustaba, además, aquel cuadro se vería hermoso en primavera, así que decidió dejar que se seque para poder exhibirlo y ¿Quién sabe? Quizás los invite a verlo.

La nostalgia y melancolía volvió a su ser cuando comparó su último lienzo con el reciente. Aquel de colores mediadores con ese tan vivo y llamativo.

Amargura es lo que lo recorrió entonces pues la mitad de su sala estaba llena de colores invernales. Siempre lo habían catalogado como un ferviente amante de la estación navideña. Pero no tomaban en cuenta qué la razón por la que sus más hermosas pinturas eran frías como el hielo es porque su musa siempre llevaba esa gélida aura en la mirada que helaba su alma y hacia que solo sus manos sean capaces de retirar el frío y plasmarlo para alejarse de él y solo apreciarlo.

Era increíble cómo podía haber tanta diferencia cromática entre una relación y la otra, la primavera y la navidad parecían más distantes que nunca, solo necesitó dos lienzos para probar aquella hipótesis.

Fue a lavar sus manos y soltó aquella pequeña coleta que tenía sujeto su cabello para que no estorbe demasiado.

¿Cuánto más tendrá que esperar? ¿Cuántas noches sin dormir? Para estar juntos...

Caminó a su cuarto dejándose caer en la cama y pensando que quizás necesitaba hablar con JiMin. Él sabría que hacer además, también era mejor amigo de TaeHyung, seguro algún consejo bueno tendría.



















Entre Pinceles y Pigmentos [JJK+KTH]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora