Me tocas y mueres

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Apenas entré al baño Alex me tomó de los hombros.

-¡El nuevo te habló!

-Oh, que placer. -Contesté sarcástica rodando los ojos.

-Es sexy. -Dijo Danna algo avergonzada.

-Es un hijo de puta.

-¿Por qué? -Preguntaron ambas.

-Me llamó perra, pero acabo de hacerle saber quién soy, nadie se mete conmigo.

-Lo supuse, ¿en verdad te dijo eso?

-Si Alex, en verdad.

-¿Que le hiciste?

-Lo amenacé un poco, no mucho. -Reí.

-Pero debes admitir que es sexy.

-Para nada, prefiero miles de veces a Paul.

-Wow, no sabíamos éso.

-Chicas, me gusta desde que nos conocimos, pero yo no le gusto, está a punto de salir con la perra de Amy, ¿pueden creerlo?

-¿No has visto como te mira?

-Me ve como una amiga, punto final. -Saqué mi cajilla de cigarrillos del bolsillo y encendí uno, abriendo la diminuta y alta ventana para que el humo saliera por allí y no sospecharan de mi.

-Algún día te descubrirán y te van a expulsar.

-Vamos Danna, ¿crees que me importa? Solamente vengo para no estar en mi asquerosa casa todo el maldito día y convivir con la perra de mi madrastra. Tienes razón, tal vez algún día me descubran, pero no ahora. -Luego de un minuto acabé el cigarrillo y tiré la colilla por la ventana, tomé un chicle y comencé a masticarlo. - Ya, salgamos de aquí de una vez por todas. -Salimos y comencé a caminar hacia la puerta que daba hacia el patio pero unas manos volvieron a tomar mis hombros y me pegaron contra la pared, abrí los ojos y era el nuevo otra vez.

-¿Sabes? No te tengo miedo, simplemente aléjate de mi. -Me zafé de sus fuertes brazos y ésta vez el estaba contra la pared.

-Me tocas y mueres, así es la cosa aquí cariño, además nadie se acercó hacia ti idiota, eres tan dramático. -Rodé los ojos.

-Suéltame.

-Claro, pero si vuelvo a tener un percance como éste date por muerto, ¿bien? -Lo solté y caminé hacia afuera cuando me encontré con Paul.

-Hola otra vez.

-Hola. -Contestamos a coro, él mostró una media sonrisa.

-¿Qué te sucede? -Le pregunté.

-Vi a Amy... besarse con el futbolista hueco.

-No puede ser, sabía que era una perra.

-Tenías razón. -Abrió sus brazos y me lancé hacia él abrazándolo fuertemente. Observé las chicas detrás de mi y me miraban haciendo gestos divertidos, negué con la cabeza sonriendo. -Te vi peleando con el nuevo, ¿el primer día y ya tienes problemas? -Preguntó cuando nos soltamos.

-Es un idiota, y repito, nadie se mete conmigo.

-¿Qué le dijiste? -Preguntó Alex.

-Que si me tocaba iba a morir.

-Ésa política por supuesto no se aplica a mi. -Dijo Paul elevándome por la cintura haciendo que gritara y riera.

-¡Ya, suéltame! -Grité riendo sin parar hasta que por fin me bajó y besó mi mejilla, logrando que sintiera un escalofrío.

-Te quiero.

-Yo también. -Dije algo nerviosa y observando furiosa a las chicas detrás de nosotros que reían silenciosamente, las fulminé con la mirada sin que Paul se diera cuenta. El timbre sonó, nos dirigimos otra vez hacia el salón y la nueva clase comenzó, dios, otra maldita y aburrida clase con éste fastidioso chico a mi lado. Me senté desganada y el profesor entró, como era común en mi me recosté sobre el banco y cerré mis ojos de nuevo.

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Holaa!! Espero que os guste y siento que los capitulos sean cortos xD BUeno les digo, lo mas probable es que suba uno o dos capitulos cada dia espero que les guste, siganme les sigo de vuelta, voten mis capitulos y comenten :D

Jamas cambiaras (Andy Biersack y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora