Me alegrarías la vida si no me hablas

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Debía aceptar que se dificultaba un poco patinar con tacos, así que más de una vez me tambaleé hasta que oí una bocina detrás de mi, paré y me di la vuelta, suspiré más que aliviada, eran Tim y Alexandra.

-Sube. -Dijo Tim, le hice caso y me subí detrás luego de saludar a ambos.

-¿Por qué volviste a usar tu patineta? -Preguntó Alex.

-Adivina.

-Andy. -Asentí con la cabeza. -Yo que tú lo mataría, no dejes que utilice tus cosas, o las cosas de tu familia. Ése auto era de tu madre _____.

-Lo sé, pero no quería hacerle de chofer, éso ya sería demasiado.

-Igualmente, hubieras corrido para irte sola.

-Mi padre lo hubiera defendido. -Suspiró.

-Tu padre es un idiota. -Reí.

-No me digas. -Contesté irónica. Seguimos el camino en silencio, oyendo la música hasta que llegamos a la escuela, Tim nos besó a ambas y nos deseó buena suerte, a lo que agradecimos y bajamos. Visualizamos a Danna y Travis sentados en la escalera, nuestro lugar, Paul estacionaba su motocicleta.

-¡Hey niñas! -Travis se paró y nos elevó a ambas abrazándonos con fuerza, Danna rió y nos abrazó.

-¿Qué tal ustedes dos? -Preguntó Alex.

-Bien, ¿ustedes? -Contestó Travis.

-También, _____ está con Paul. -Yo la miré sorprendida, pero Paul me tomó de la cintura, me volteé y me dio un fugaz beso. Los tres silbaron.

-Consígansen un cuarto. -Oí la voz de Janice detrás de mi, la fulminé con la mirada pero luego me enfurecí al ver que a su lado estaba Andy tomándola de la mano con las llaves del auto en la otra. Se las quité rápidamente.

-No quiero que subas a perras a mi auto. -Puse énfasis en el "mi".

-Pero... hoy no viniste en tu auto. -Contestó tranquilo, de pronto Paul se abalanzó sobre él estampándolo contra la pared.

-Aquí la única perra es tu noviecita, cierra la p*uta boca maldito idiota. -Trató de darle un puñetazo en la cara pero llegué a tiempo para sostener su mano, me observó sorprendido.

-Suéltame _____.

-Ya hablamos sobre ésto ayer Paul. -Me volvió a observar inseguro pero al fin soltó a Andy, que volvió a tomar la mano de Janice y ambos se dirigieron hacia adentro juntos. Paul se sentó en las escaleras y yo me senté en sus piernas abrazándolo con cariño.

-No dejaré que te llame perra, no lo eres.

-Tranquilo. -Acaricié su cara y lo besé despacio. Cuando oímos el sonido de la campana entramos y caminamos hacia nuestro salón. Al llegar me senté al lado de Paul, que estaba en la otra punta de mi banco, no quería presenciar los cariños del idiota y la perra. Cuando Andy posó su vista sobre mi sonrió asquerosamente, como si se riera de mi. Le mostré mi dedo del medio y miré al frente, al ver que el profesor había entrado. Como mi rutina diaria, me apoyé en mis brazos sobre el banco y cerré los ojos hasta que oí la voz del profesor.

-Wells, usted va entre la señorita Dixon y el señor Biersack, y usted Daniel, va aquí en frente. -Janice rodó los ojos y se volvió hacia su lugar.

-Profesor, estoy demasiado cansada como para caminar hacia allí.

-Wells, irá a dirección, vaya ahora a su lugar. -Contestó furioso, yo golpeé el banco con fuerza, tomé mi mochila y volví al lado del idiota y Alex.

Jamas cambiaras (Andy Biersack y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora