Capitulo Cuarenta Y Dos

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Ya había pasado un mes. Federico había vuelto a estar al mando de la empresa. Juan seguía viviendo en la casa y la convivencia estaba mejor. Él mostraba indiferencia hacia Flor para poder tener una mejor relación con su primo. Se llevaban relativamente bien.
Federico le permitió a Juan hacer los cambios que él considere necesarios, y esa fue la peor decisión que pudo haber tomado.

-"Buenos días!"- dijo Juan entrando a la oficina de Federico.
-"Buenos días Juan, nuevas noticias?"- pregunta Fede saludándolo.
-"Si, y buenas"- respondió guiñándole el ojo.
-"No entiendo"- dijo al ver esa reacción.
-"Adelante por favor..."
En ese momento, entra a la oficina una muchacha de unos veinticinco años, rubia, delgada, alta y con una presencia imponente.
-"Y esta señorita es?"- preguntó Federico sin entender.
-"Nuestra nueva asistente personal"- respondió Juan sonriendo.
-"Fede..."- interrumpe Matías entrando a la oficina topándose con la chica -"Perd..."- no pudo terminar de decir la frase que ya había quedado encandilado por la belleza de la mujer.
-"Discúlpame..."
-"Romina"- completó la chica diciendo su nombre.
-"Discúlpame, Romina pero necesito hablar con mi primo, podrías esperar afuera?"- dijo Fede haciendo que la chica salga.
-"Quién es ese camión?"- dijo Matías encantado.
-"Nuestra nueva asistente"- contestó Juan.
-"Wow"- acotó mientras que Federico los miraba sin entender como podían hablar así de una dama.
-"Cálmense, todavía no es nada la señorita así que no se alteren"- dijo haciendo que lo miren -"Qué me miran?"
-"Me estás cargando alemán, es un hembrón."
-"Eso no tiene nada que ver. Además no necesitamos asistente"- respondió acomodando papeles -"Así que decile que lo lamentamos mucho pero que no hay ningún puesto de trabajo"- le dijo a Juan.
-"Fede, primo, ey"- lo llama -"Por favor te lo pido. Me la recomendaron desde Alemania, dicen que es muy buena, siempre cumple con los horarios, es muy ordenada.... Además no nos vendría mal alguien que nos ayude."
-"Macho, tiene razón"- acotó Matías intentándolo convencer.
-"Esta bien"- accedió Federico para ver si de esa manera dejaban de molestarlo.
-"Pasa Romina"- dijo Juan.
-"Estás contratada"- acotó Matías mirando a Fede.
-"Si, estás contratada..."- dijo desganado.

Luego de una jornada larga de trabajo. Federico volvió a la mansión, en donde lo estaba esperando su princesa.
Tocan el timbre y Flor va a atender.
-"Hola?"- dice abriendo la puerta y encontrándose con un ramo de flores amarillas -"Y esto?"- pregunta riéndose.
-"Para mi princesa"- era Fede escondido detrás de las flores.
-"Ay mi principito, me lo como"- dijo agarrando las flores.
-"Y bueno..."- acotó él haciendo que ella lo bese con todas sus fuerzas.
-"Bueno bueno"- dijo Flor separándose con una sonrisa -"No sé me ponga tierno acá en la puerta."
-"Tenes razón"- entra, cierra la puerta y la toma entre sus brazos -"Esto tiene continuidad"- dijo llevándola hasta la habitación.

Ya era de noche, la cena estaba lista y tenían que bajar para comer. Luego de una tarde de mucho amor y pasión, Flor y Fede bajan las escaleras agarrados de la mano y muy sonrientes. En ese momento entra Juan.
-"Hola!"- dice viéndolos muy acaramelados en la escalera.
-"Hola"- lo saludan entre risas.
-"No van a saludar?"- pregunta acercándose a ellos.
-"Pero si..."- dijeron pero al darse vuelta.
-"Romina"- dijo Fede al verla.
-"Romina?"- Flor lo mira sin entender.
-"Ella es Romina por si no se habían dado cuenta"- se ríe -"es nuestra nueva asistente."
Cuando Flor escuchó eso su cara se transformó completamente.
-"Hola Fede"- se acerca y le da un beso en la mejilla haciendo que Flor trine de los celos -"Y vos sos?"
-"Florencia, la novia y futura mamá de su hijo, encantada"- respondió extendiendo su mano y largando una sonrisa forzada.
-"Ah... hola"- se saludaron.
-"Bueno, se queda a comer así que nos vamos a la mesa"- dijo Juan llevándola.
-"Chau Fede"- dijo Romina yéndose junto a Juan.
-"Chau Fede"- repitió Flor en tono de burla. Ve que Fede la sigue con la mirada sin entender lo que le pasaba, ni porqué estaba ella en su casa si solamente había estado menos de veinticuatro horas en la empresa. -"Qué miras?"- pregunta Flor corriéndole la cara.
-"Qué hace esta chica acá?"- no estaba muy contento con la visita.
-"No sé pero parece que a Romi"- dijo nuevamente burlándose -"Le gusta estar acá"- estaba furiosa.
-"Vamos a comer?"- pregunta Fede tomándola de la mano.
-"Si mejor vamos, no hagamos esperar a Romi"- dijo sarcásticamente yendo junto a Fede hacia el comedor.

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