Destinados

Capitulo Cincuenta Y Uno

Luego de casi dos horas desde que Federico se había ido, Flor duerme a Erick porque mañana tenía que levantarse temprano.
Se iba a dormir con una enorme sonrisa.
Estaba muy feliz.
-"Buenas noches príncipe"- le dijo dándole un beso en la mejilla.
-"Buenas noches mami."
Flor sale de la habitación de su hijo y se dirige hacia donde estaba el sillón. Se sentó largando un suspiro. Había sido un día un poco largo pero uno de los mejores sin duda.
Estaba pensando en Federico. Se sentía bien de tenerlo cerca. Luego de tantos años de soñarlo, volver a tenerlo cerca de ella era algo que no creía.
En eso se escucha que la puerta se abre. Era Juan.
Flor le lanzó una mirada fría. Estaba muy enojada y algo confundida. No había aparecido en todo el día. No la llamó. Ni siquiera para decirle si estaba bien.
-"Hola"- dijo el dejando sus saco y su maletín en la mesa.
-"Hola?"- pregunta parándose.
Él se acerca para querer besarla pero ella le corre la cara.
-"Qué pasa amor?"- le pregunta sin entender.
-"Amor? Vos me estás cargando Juan?"- comenzó a sacar toda esa furia que tenía acumulada -"Dónde estuviste todo este tiempo?"
-"Trabajando"- respondió el quitándole le vista.
-"Vos te pensas que soy estúpida?"- lo toma de la barbilla y lo obliga a mirarla a los ojos -"Dónde estuviste?"- le vuelve a preguntar.
-"Ya te dije, trabajando"- volvió a responder él.
-"No puedo creer cómo te la cara para venir y mentirme"- dijo separándose de él y yendo al cuarto.
-"Para Flor. Yo te puedo explicar"- la siguió.
-"Eso me suena muy familiar"- dijo largando una risa irónica.
-"Ayer después del trabajo fuimos a cenar con unos compañeros..."- comenzó a explicarse.
-"Ah si?"- preguntaba irónicamente.
-"Si"- la intento de abrazar pero ella se negó -"Y después nos volvimos a la oficina porque teníamos mucho trabajo."
-"Terminaste?"- le pregunta cruzándose de brazos.
-"Si."
-"Toma"- dice dándole unas almohadas y unas sábanas.
-"Qué es esto?"- pregunta sin entender.
-"Hoy vas a dormir en el sillón"- comenzó a empujarlo suavemente hacia el living.
-"Pero Flor...."
-"Buenas noches"- le cerró la puerta del cuarto en la cara.
Flor no le había creído nada de lo que le había dicho. "Otra vez?". Se preguntó. Pero esta vez era distinto. Cuando pasó con Fede le dolía escucharlo e imaginárselo con otra mujer pero esta vez, no se sentía para nada mal. Es más, sentía que se sacaba un peso de encima.

La mañana siguiente Flor se levantó y se encontró con el desayuno preparado. También Erick ya estaba listo.
-"Y esto?"- pregunta terminándose de abrochar la camisa.
-"Lo hice en forma de disculpas"- dijo Juan acercándose a ella -"Podemos hablar?"
Ella revoleó los ojos y entró al cuarto.
-"Tenes cinco minutos"- le dijo mirándolo.
-"Erick me dijo que ayer vino Federico."
Florencia se quedó sorprendida. Eso era lo que quería habla?. Ni se iba gastar en disculparse?.
-"Perdón?"- se cruza de brazos -"Es un reproche?"
-"Vos que pensas"- respondió él mirándola decepcionado.
-"No lo puedo creer"- dijo largando una carcajada -"Y yo pensando que te querías disculpar."
-"Yo ayer te aclaré todo. No sé qué más queres que te diga..."
Al escuchar ese comentario, una sensación de ganas de golpearlo le atravesó por todo el cuerpo.
-"Si, ayer estuvo Federico."
-"Y así me lo decís?"- Juan comenzó a levantar la voz.
-"Es el padre de mi hijo!"- dijo protestando -"Tenia todo el derecho de conocerlo a Erick."
-"Entonces aprovechaste que yo no estaba y lo trajiste"- dijo largando una carcajada.
-"Tene cuidado como me hablas."
-"Qué hicieron? Lo dejaron al nene en su cuarto y vos lo trajiste acá?"- ese comentario provoco que Flor le de vuelta la cara de un cachetazo.
Con lágrimas en los ojos, Flor salió de la habitación y agarró a Erick.
-"Vamos hijo, vas a llegar tarde al jardín."
Salieron del apartamento como un rayo.
-"Que idiota"- comenzó a lamentarse Juan en el dormitorio.

-"Chau mami"- se despidió de Flor.
-"Chau hijo, pásala lindo. Más tarde vengo a buscarte"- dijo saludándolo.
Comenzó a caminar hasta la parada de taxi pero antes de llegar se encontró con Federico que estaba saliendo de la mansión.
-"Flor"- dijo Fede al verla.
-"Hola"- le da un beso en la mejilla. -"Estaba yendo a la parada de taxi. Nos vemos en un rato"- dijo bajando la vista.
-"Estás bien?"- le preguntó al verla mal.
Ella levantó la vista y al verlo no pudo evitar abrazarlo, y comenzar a llorar en su hombro.
Fede la sentía tan débil. Ella estaba mal y lo necesitaba. Así que se aferró a ella con una fuerza y ternura.
-"Qué pasó?"- preguntó al verla tan mal.
-"Perdóname"- dijo mientras seguía llorando.
-"Pero por qué Flor?"
-"Por todo"- dijo separándose de él.
-"Yo no tengo nada que perdonarte"- dijo tocándole la mejilla -"Vos me tendrías que haber perdonado aquella noche, aunque yo no haya hecho nada."
-"Yo lo hice"- dijo bajando la vista -"Yo te perdoné pero ya era tarde."
En ese momento Federico sintió un frío por todo el cuerpo. Lo había perdonado.
-"Cuándo?"- le preguntó mientras la tomaba de las manos.
Fue ahí cuando Flor se dió cuenta que había sido un error haber dicho eso.
-"Olvídate de lo que te dije"- dijo intentando irse pero Fede la retuvo.
-"No te escapes"- le dijo tomándola del brazo.
-"Fede"- dijo mirándolo -"No tiene sentido."
-"Claro que tiene sentido. Todo este tiempo esperé volver a verte y saber que me habías perdonado"- dijo tomándole la cara.
-"Cada uno tiene su vida"- lo miró -"Yo estoy con Juan..."
-"Juan?"- preguntó. Sintió como si alguien le hubiese pegado una patada en el estomago.
-"Si"- respondió bajando la mirada.
-"Hace cuánto?"- preguntó soltándola.
-"Hace dos años"- al escuchar eso Federico se sintió vacío.
-"Dos años?"- preguntó sorprendido.
Flor asintió con la cabeza.
-"Y sos feliz?"
Flor encogió los hombros.
-"Es por él que estás así, verdad?"- le secó una lagrima que caía por su mejilla.
-"Estamos llegando tarde"- dijo mirando para otro lado y evitando responder -"No voy a poder conseguir un taxi a tiempo."
-"Te llevo"- le ofreció mientras abría la puerta del auto. Ella accedió y se subió.