You bring me home (Charles Gillespie)

Capítulo 41

Me despierto antes de que suene mi alarma y lo primero que hago es mirar mi celular en donde se muestra el día en que estamos "Lunes". Comienza una nueva semana y también estoy más cerca de darle la sorpresa a Charlie, nadie sabe lo que nos espera en esta nueva aventura que emprenderemos. Me levanto y comienzo el día al igual que siempre y cuando ya estoy lista bajo a desayunar.

-Hola hermanita.- le digo a mi hermana.

-Hola tesoro ¿Cómo dormiste?.- me pregunta.

-Bien ¿y tu?.- le pregunto.

-Bien.- me dice.

-Estoy nerviosa.- le digo.

-¿Quien no lo estaría en tu lugar?.- me pregunta.

-Eso no me ayuda.- le digo.

-Tranquila, no pasará a nada, no nos tendrás a nosotras y estarás a miles de kilómetros si algo sale mal.- me dice.

-OYE, eso empeora las cosas.- le digo.

-Lo siento, tenía que hacerlo.- me dice riendo.

-Eres bien mala.- le digo.

-Lo se querida, lo se, pero si algo sale mal tendrás a Owen.- me dice mi hermana.

-Ese maldito solo se reirá de mi.- le digo.

-Se reirá de ti por mi.- me dice mi hermana.

-Eres una mía malvada.- le digo.

-Puede ser, bueno querida es tarde y si seguimos conversando llegaremos tarde.- me dice.

-Fue un gusto compartir contigo esta mañana, nos vemos.- le digo.

-Te quiero.- me dice saliendo.

-Te quiero más y cuídate por favor.- le digo.

-Tu también.- me dice.

Cuando llego a la universidad recuerdo que hoy tengo solo clase de pintura por lo que voy a buscar mis implementos a mi casillero, cuando estoy llegando de vuelta al salón me encuentro con Valentina.

-Hola amiga..- me dice cuando me ve.

-Holaa, ¿Cómo estas?.- le pregunto.

-Muy bien ¿Y tu? ¿Qué tal estuvo tu fin de semana?.- me pregunta.

-Estuvo bien, realmente se me pasó muy rápido.- le digo sonriendo.

-¿Que hiciste de interesante?.- me pregunta.

-Tuve una cita.- le digo.

-¿TUVISTE UNA CITA?.- grita.

-Shhh, no quiero que todos acá se enteren de mi privacidad.- le digo riendo.

-Lo lamento, la emoción.- me dice riendo.

-No te preocupes, pero si tuve una cita.- le digo.

-¿Y quién es el afortunado?.- me pregunta.

-Es un amigo.- le digo.

-Un amigo especial, porque cuando lo dices tus ojos brillan.- me dice sonriendo.

-Si, puede ser.- le digo.

-Bueno, no te retraso más, debes llegar a clases.- me dice.

-Si, tu también debes llegar a las tuyas.- le digo.

-Pero está conversación la debemos terminar.- me dice.

-Si claro, después hablamos.- le digo.

-Hasta nunca baby.- me dice.

-Adiós.- le digo sonriéndole.

Y así es como llegue unos minutos atrasada a clases, pero rápidamente agarre el ritmo de la clase y pude comenzar con mi trabajo. Terminada la clase me dirijo a mi casa para poder preparar todo para mis clases de mañana.