You bring me home (Charles Gillespie)

Capítulo 84

La mañana después de Navidad, la casa estaba en completo silencio. Me desperté antes que Charlie, aún envuelta en la calidez de la noche anterior. Los recuerdos de la revelación sobre el bebé seguían frescos en mi mente, y una sonrisa automática se dibujó en mi rostro al recordar la expresión de asombro y alegría de Charlie.

Me giré en la cama para mirarlo, dormía profundamente, por lo que decidí dejarlo descansar un poco más mientras me deslizaba fuera de la cama con cuidado.

Bajé las escaleras en silencio, dirigiéndome a la cocina para poder preparar el desayuno. La Navidad había sido un día lleno de emociones, sin embargo aún nos quedaban más momentos especiales por delante, comenzando con el Año Nuevo y la oportunidad de compartir la noticia con todos. 

Mientras preparo todo, me pongo a pensar en distintas maneras de poder dar el anuncio y que sea una manera que demuestre lo importante que es esto para ambos.

Charlie apareció en la cocina poco después, todavía adormilado, pero con una sonrisa perezosa al verme. Se acercó a mí, envolviéndome en un abrazo desde atrás mientras dejaba un beso suave en mi cuello.

- Buenos días, futura mamá.- murmuró con una sonrisa que podía sentir en mi piel.

- Buenos días, futuro papá.- respondí riendo, girándome en sus brazos para besarlo.

Pasamos el desayuno hablando de pequeños detalles del día anterior, recordando la sorpresa, las emociones, y planificando los próximos días. Charlie, como siempre estaba entusiasmado con cada pequeña cosa, desde la decoración hasta cómo podríamos revelar la noticia a su familia y amigos.

- ¿Has pensado en cómo se lo diremos a Meghan, a mi mamá y a los chicos?.- preguntó Charlie mientras mordía su tostada.

Asentí, con una chispa traviesa en mis ojos.

- Pensaba en hacer algo especial, pero simple. Quizás algo que les dé una pequeña pista antes de decírselo directamente. ¿Qué te parece?.- le pregunto

- Me gusta la idea, podríamos envolver algo significativo, algo que simbolice que viene un bebé en camino.- sugirió, claramente trabajando en los detalles.

- Quizás una pequeña manta o unos zapatos como los que te di anoche.- dije, riendo suavemente.

- ¡Perfecto! Les daremos los regalos justo antes de la medianoche en Año Nuevo. Y así comenzaremos el nuevo año con la mejor noticia de todas.- exclamó Charlie.

No pude evitar sonreír, ver a Charlie tan entusiasmado por cada detalle hacía que mi corazón se hinchara de amor. Sabía que había elegido al mejor compañero para esta aventura.

- Hay algo más que quiero que veas.- dijo Charlie de repente, con un tono casual, pero su expresión de que algo había hecho lo delataba.

- ¿Algo más?.-pregunté, sintiendo que mi curiosidad despertaba nuevamente.

Charlie asintió, tomando mi mano y guiándome hacia el vestíbulo. Lo seguí, mientras que en mi mente habían miles de posibilidades. Cuando llegamos a la puerta principal, Charlie hizo una pausa, volviéndose hacia mí con una sonrisa que solo podía significar una cosa, había otra sorpresa en camino.

- Quédate aquí un momento.- me pidió suavemente, abriendo la puerta con cuidado.

- Charlie ya entregamos los regalos.- le digo.

- Aún es navidad princesa, y solo falta un regalo.- me responde.

- ¿Otro?.- le pregunto.

- El último.- me responde con una sonrisa.