Sting Eucliffe, cansado de tener tantas decepciones amorosas, hace un juramento de no volverse a enamorar.
En su gremio nota que el estado emocional de su amiga Yukino baja por tristezas y perder un espíritu celestial. Desesperado, busca la solució...
Cuando desperté, Sting no estaba por ningún lado, no recuerdo muy bien que pasó anoche, pero bueno. Fui a la sala y había ropa nueva en el sofá, una cartita con un recado.
- Para que te des un baño y te lo pongas, hoy partimos, te espero en el gremio -
Era muy similar a los trajes que solita usar y bonito, aunque tenía una pizca de parecido al de el, ya que consistía en un chaleco corto de pelaje, unos guantes holgados con cierre y una camisa de cuello color caqui, falda negra e ¡incluso me a regalado un listón celeste!, que detalle tan lindo. Con entusiasmo me fui a dar una ducha, por suerte el tenía todo lo necesario ahí, incluso muchas cosas nuevas, como cepillos de dientes, pastas, etc.
No tarde mucho, hice todo lo más rápido que pude, me sentía emocionada, como si emprendiera alguna nueva aventura.
Y terminando, me vestí para por último colocarme mis largas botas cafés, abrochando de ellas.
__ Bien, ¡andando hacía el gremio!.
Saliendo de la casa de Sting, camine a prisa a Sabertooth. Había muchos pobladores a esta hora y el día estaba muy cálido con el sol bien puesto, un clima agradable. Niños por doquier corriendo y jugando.
Me gusta este pueblo, muy parecido a magnolia.
- H-Hola señorita, ¿tendrá unos jewels que me regale?
Un pequeño niño algo despeinado de cabello rubio largo y ojos azules me extendió su mano, estaba en muy mal estado, ya que estaba sucio y su ropa ya desgastada lo decía todo, incluso descalzo se encontraba.. Saque de mi bolsillo de la falda algunos jewels, bastantes por cierto.
__ Toma pequeño, espero y esto pueda ayudarte para la comida de hoy y la de tus próximos días. -Sonreí-
- G-Gracias señorita..
Y con una enorme sonrisa, corrió a la panadería, acto que me hizo sonreír nuevamente. Me gustaría ayudar a todos aquellos que no tienen mucha estabilidad económica.
Di un suspiro suave y continúe caminando.
Al llegar y abrir las puertas del gremio, Yukino me recibió con un enorme abrazo, lo cual yo acepte, después tomo mis manos y me observo con un brillo en su mirada.
- ¡Lucy!, ¡adivina qué!, ¡Rogue encontró el paradero de la persona que tiene a libra!, en unos días estará conmigo nuevamente, el me lo a prometido. -Sonrió alegremente derramando algunas lágrimas de felicidad- __ ¡Ara!, ¡que alegría Yukino!, ese tipo deberá darte a Libra por las buenas o por las malas, recuerda que los espíritus son amigos y no objetos de los cuales manipular.
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- ¡Si!, es por eso que pronto volvera conmigo...
Parecía una niña pequeña llena de felicidad, ella era muy linda y bueno, yo le quiero mucho, ojalá y ese hombre no se interponga con la petición de libra. Rogue se acercó a nosotros mientras leía unas hojas y las guardaba en un libro.
