Little Boy | Male Reader |

Capitulo 28: Destino

Soul—Entonces, ¿Piensas quedarte en casa de mi padre?.—Pregunto antes de beber de su vaso.

Seung—No, solo será mientras encuentro un departamento.—Dejo salir el humo mientras seguía la figura de una chica.

Nam—¿Departamento?, Deberías buscar algún casa.—El más alto rio negando.

Seung—No, prefiero un lugar en las alturas.—Termino su cigarrillo.

Soul—Entonces deberías quedarte a dormir en la oficina, maldito psicópata.—los tres estallaron en risa ante las maldiciones de la menor.

Seung—No tendré sexo en esa oficina, siquiera la tocarte, es incluso más sucia que un motel barato en Las Vegas.—Volvieron a reír juntos.

Nam—Después de las tres de la tarde las noticias estallaron con tu regreso a corea, eres como un ídolo o algo así.—bebió lo que quedaba de su copa y rio.

Soul—Tampoco dejaron de sonar cuando se fue, no es algo nuevo Joon.—Tomo de un trago su copa mientras se ponía de pie.

Soul—¡A mover el culo que no estamos aquí para ser la madre Teresa!.—Grito antes de alejarse entre los cuerpos de la pista.

Nam—vayamos a buscar más tragos.—El mayor asintió sin perder de vista la cabellera castaña.

Caminaron entre los cuerpos sudados y en movimiento, todos se movían al ritmo de la música, era una canción algo sexy, una de esas canciones que te hace mover el culo sin dudarlo.

Seung—Le ví esta tarde cuando iba de camino a casa.—comento mientras tomaban asiento en la barra.

Nam—¿En serio?, La ciudad sigue siendo un pañuelo entonces.—rio antes de tomar lo que le ofrecía el chico del otro lado de la barra.

Seung—Lo es, ahora su estilo ah cambiado completamente, apuesto a que su actitud también.—Tomo un trago de su bebida tranquilamente.

Nam—Hermano, tú también has cambiado demaciado, ahora eres más maduro, ¿Sigues amando a el chico?, Pues intenta de nuevo, antes no podías hacer nada contra tu padre, ahora sí.—Tomo lo que quedaba se su trago para pedir otro.

Seung—El destino acomoda las cartas.—hablo mientras miraba hacia el otro lado de la barra.

Justo ahí, en un lugar algo obscuro su cabello azabache y piel algo pálida se hacían notar, llevaba la misma ropa que por la tarde mientras bebía un trago.

Nam—Acercate, iré a vigilar a Soul.—Se puso de pie sin dejar decir nada a el mayor.

Este suspiro y le siguió mirando, no paso mucho tiempo para que el menor empezase a buscar aquella pesada mirada que no se iba de el. Al mirar hacia su derecha se encontró con la verdad.

El mayor daba una calada a su cigarrillo mientras le miraba, se sintió paralizado, ¿Cuándo había vuelto?, ¿Por qué tenía que estar en ese justo momento en el mismo lugar que el?.

Lo peor llegó cuando noto que el mayor había empezado a acercarse a el, aunque su preocupación se fue cuando el más alto solo se sentó a su lado.

Seung—todo este tiempo e tratado de comunicarme contigo, ¿Por qué no respondes mis mensajes?.—pregunto mientras miraba hacia el frente.

Kook—¿Por qué abría de responderlos?, Solo eres un viejo conocido del que no me interesa saber más nada.—El más pálido rio levemente mientras asentía.

Seung—Sabes, el último mensaje que viste, hace cuatro años, era verdad, no eh podido dejar de pensar en ti todos estos años.—Mostró una pequeña sonrisa para mirarle a los ojos.