Little Boy | Male Reader |

Capitulo 29: Mierda

Seung—Kook, despierta y dime el número de tu habitación, Jeon.—Le dió una palmada en el muslo haciendo que este se queje.

Después de burlar la "seguridad" que impartía algún profesor medio dormido con una rosquilla en la boca, estaba en los pasillos, si buscaba habitación por habitación era seguro que amanecería antes de que el se pudiera largar de ahí.

Kook—Segundo piso... 278.—Hablo medio dormido de nueva cuenta.

Después de el dato el chico empezó a caminar hacia las escaleras, sus brazos empezaban a cansarse de sostener de tal manera al más joven.

Seung—Maldita sea Jeon, deja de obtener masa muscular.—Subió los últimos escalones y afianzó el agarre en el menor.

Después de observar el largo pasillo por unos segundos comenzó a caminar, leía los números volteando de un lado a otro, ¿Quien mierda le hacía caso a una persona borracha?.

Cuando encontró la habitación se percató de que esta estaba medio cerrada, el interior estaba algo obscuro y podía saber que no había nadie más ahí dentro.

Entro encendiendo la luz y cerró la puerta detrás de ellos, solo había una cama individual con algunas cosas regadas y libros por aquí y por haya, no tenía compañero de cuarto.

Se sentó en la cama para dejar caer a el chico con delicadeza, sus cabellos azabaches se tiraron hacia atrás ante la gravedad dejando su cara descubierta.

Sabía que había que hacer, quitarle la chaqueta, las botas y el cinturón para después largarse y lo hubiera hecho, de no ser por qué cuando intentaba quitar su cinturón el chico movió su mano para ponerla en su entrepierna.

Kook—Hyung, ahora que has regresado, hagámoslo.—la sorpresa fue inminente.

El chico se movió rápidamente sentándose en el regazo del mayor y pasar sus brazos por enzima de sus hombros.

Empezó a mover poco a poco sus caderas mientras el más alto seguía tan sorprendido como para reaccionar, más lo hizo cuando los labios del chico comenzaron a dejar suaves besos en su cuello.

Seung—Kook, sal de enzima y ve a dormir.—El chico nego y llevo una de sus manos a el pantalón ajeno.

Kook—Dices que no, pero, se que me deseas también.—Su mano se volvió un tanto torpe más consiguió quitar el botón del pantalón del más alto.

Quería detenerle, sabía que estaba mal, no por el hecho de que estuviese borracho, si no, por qué seguro el chico se sentiría mal por la mañana y saber que se acostó con el seguro no le hacía ninguna gracia.

Seung—Hey, no importa si lo deseo, está mal.—Golpeo su frente mientras se lo quitaba de enzima.

Kook—¡Hyung!.—Hizo un berrinche mientras quedaba recostado en la cama.

Seung—Me voy, si en unos horas recuerdas algo de esto probablemente estarás agradecido de que na hayamos hecho nada.—Acomodo su ropa para salir de la habitación...

[...]

La cabeza le pesaba, mientras había un leve dolor en ella, la luz de la habitación era poca y sentía algo de frío, al abrir los ojos completamente se llevó con la sorpresa de que estaba desnudo, ¿Qué?.

Lo último que recordaba era haber estado en el callejón con alguien, no recordaba su cara, pero su voz le parecía conocida, tal vez alguien había intentado venderle droga de nuevo.

Suspiro cuando un recuerdo llego a su mente, estaba siendo cargado por alguien, preguntaba por su habitación, ¡Santa mierda!.

Kook—No... No, no, no, no, ¡No!, Mierda.—Golpeo la cama y se puso de pie.

No había ningún tipo de dolor, se alivio se inmediato, no quería contraer ninguna enfermedad relacionada con el sexo.

Tomo su celular para encontrarse con algunos mensajes de sus amigos, su madre y padre, antes de que pudiese abrir cualquiera de ellos una llamada entrante le interrumpió.

En la llamada

Jung—Espero tengas una maldita explicación para el hecho de que no llegaste a dormir anoche.—Se escuchaba agitado y preocupado.

Kook—Solo, bebi un poco de soju y me quedé dormido en casa de Eun Woo.—Una mentira de las que siempre era víctima su Hyung.

Jung—Estuve llamándote, alrededor de 30 veces, supongo que acabas de despertar... escucha, Kook, debes buscar otro trabajo, el restaurante no es suficiente si quieres seguir estudiando.—El menor suspiró mientras asentía.

Kook—Lo se, lleve mi currículum a una empresa de contrataciones, seré chófer de algún empresario los fines de semana y ganaré bien.—El mayor soltó una risita ante la positividad de su hermano.

Jung—Me tengo que ir empieza mi turno.

Fin de la llamada

Suspiró nuevamente dejando salir toda la frustración que le había traído esa llamada.

Después de contestar los mensajes de sus padres y amigos entro a el baño dispuesto a darse una ducha.

Su vida como universitario era un tanto aburrida, sus calificaciones eran buenas pero no perfectas, solo podía tener un par de vagos como amigos, Eun Woo y Jae Hyun, chicos que había conocido en preparatoria y fue difícil alejarlos de el.

Al final, terminaron en la misma universidad, los idiotas compartían habitación mientras el dormía solo, un privilegio, no le gustaba compartir un espacio privado con nadie, más cuando solía beber tanto en la habitación.

Tiro algunas botellas de cerveza vacías a la basura y salió de su habitación para escuchar los gritos de un chico.

Eun—¡Eh!, ¡Jung Kook!, Vayamos a jugar videojuegos a casa de Jae.—los dos chicos se acercaban desde el pasillo de la derecha.

Kook—¿Habrá comida?, Acabo de despertar y no eh desayunado.—Anuncio mientras esquivaba el abrazo de Eun Woo.

Jae—¡Claro!, Pediré hamburguesas.

Por otro lado...

Seung—Esto está hecho mierda.—Suspiro mientras pasaba sus manos por su cabello.

Seung—Jeong, ven aquí.—Le llamo mientras seguía revisando los documentos.

Ha Neul—¿Si?.—Pregunto amablemente.

Seung—coloca anuncios sobre contratación para el haría de diseño, solo necesitamos que tengan buenas ideas y disponibilidad de horario.—la chica asintió para salir casi corriendo de la oficina.

Su celular timbró haciendo que detuviera todo movimiento para contestar.

En la llamada

Xx—Escuche por las noticias que regresaste, ¿Quieres venir a tomar algo?.—La voz calmada del chico era notablemente reconocible.

Seung—¿Cambiaste de número?, Creo que estaré ocupado por esta semana, puedo ir al siguiente fin de semana.—el chico del otro lado rio.

Xx—No vivo más en el barrio, han pasado muchas cosas, me reencontré con mi madre.—La sorpresa fue inminente en el menor.

Xx—ahora vivimos juntos y soy vicepresidente en la empresa de su esposo.—La felicidad se notaba en sus palabras.

Seung—¿Cómo mierda paso eso Ki Hyun?...

.

.

.

.

.

¿HoSeok o JiMin?