4. <<Pasado>>

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Lynette :

¡Primer día de clases!

Vaya que eso suena emocionante, al menos para mí si lo es, puesto que hoy conoceré mucha gente nueva, personas que formarán parte de mi vida y no por un corto tiempo; lo único que espero es que lleguen muy pronto porque al parecer no hay nadie en este colegio.

—Tía ¿estás segura que hoy comienzan las clases?— pregunto algo más que obvio.

La tía Juleka sonríe y me toma de los hombros en un apretón —tranquila Lyn, al ser el primer día siempre hay poca afluencia de estudiantes, pero no te preocupes muy pronto llegaran— mira hacia las gradas y luego a mi —tengo que acomodar algunos papeles antes de iniciar la apertura del año escolar, en cuanto eso,puedes ir a tu salón; lo ubicarás al fondo—

Asiento comenzando a caminar a mi destino, mamá dice que este colegio formo parte de su adolescencia al igual que la de mi tía, incluso todos dicen que jamás imaginaron ver una faceta tan autoritaria de ella, la tía Juleka siempre fue muy tímida, muy diferente a lo que es ahora, una directora auténtica y estricta.

Subo las gradas que guían a mi salón, este colegio es muy diferente al que asistía en Italia, pero me gusta. Al llegar allí, puedo ver que tampoco hay estudiantes, no es por ser presumida, pero se supone que a las 7: 00 de la mañana ya debería haber alumnos, aunque sea uno por lo menos.

—Parece que soy la única que llegó temprano— hablo para mi misma mientras dejo mi mochila en uno de los tantos pupitres.

Los minutos pasan en completo silencio, saco mi celular y miro por un corto tiempo mis redes sociales hasta que un extraño grito llama mi atención, mi sistema nervioso inmediatamente manda una señal de alerta, ese grito se repite y al parecer es varonil, un fuerte escalofrío recorre mi cuerpo al pensar que estoy completamente sola en este segundo piso y aún son horas tempranas; inhalo y exhalo con lentitud para luego tomar mi mochila y salir a pasos apresurados.

—¡¿A dónde vas?!— gritonea alguien pero no hay nadie a mi costado, aquella demandante voz proviene del salón 07.

—¡Ni creas que podrás escapar de mi!— esas palabras me asustan, pero no lo suficiente como para huir.

Giro sobre mis zapatillas y camino lentamente hacia ese salón, al ver el cuadro inmenso que lleva en la frente puedo deducir que es una biblioteca, abro la puerta con delicadeza, procurando no llamar la atención de quien sea que esta gritando mil ordenes al aire. Sin embargo; al entrar no hay nadie presente, sólo un montón de estantes llenos de libros, me acerco más al fondo hasta encontrar a un sujeto, que se encuentra sentado en el sofá mientras sus manos manejan una consola de videojuegos, la pantalla luminosa me obliga a entre cerrar los ojos.

Por más que sea de día, el salón es oscuro y la única luz que puede reflejarse con claridad es el televisor.

—¡Partida ganada!— exclama levantándose en un segundo del sofá —toma esa videojuego de quinta—

¡Vaya! Sólo es un chico loco por los videojuegos, y algo exagerado también. Quizás debería ignorarlo e irme.

Muy tarde.

Él ya se dio cuenta que no está sólo.

Espera...

Huellas Del PasadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora