NARRADOR OMNISCIENTE:
Ambos jóvenes se encontraban callados, nerviosos y sin saber cómo iniciar una conversación. La chica se seguía sintiendo culpable por lo que hizo ayer, se sentía preocupada de que algo que ella no haya querido hubiera ocurrido y que eso tuviera consecuencias, además del nerviosismo que sentía al estar junto al rubio.
Por su parte el chico estaba embalsamado por estar tan cerca de la que considera el amor de su vida y frustrado por no poder decir nada al respecto.
La joven miraba por la ventana con la vista perdida en las calles, las dudad atormentando su mente y sin poder evitarlo un sollozo broto de sus labios, alertando al chico.
MARINETTE:
Limpio la lagrima que escurre por mi mejilla al tiempo que Adrien coloca una de sus manos sobre la mía.
-¿Estas bien?- me pregunta con preocupación y yo asiento con la cabeza, sintiendo que si hablo me soltare a llorar.
-¿Segura?, sabes que puedes confiar en mi- me dice con una sonrisa y mi ánimo decae un poco más.
Confiar, confianza.
De nuevo mis ojos se cristalizan y desvío la vista para que Adrien no me vea en ese estado. Tapo mi rostro con mis manos mientras las lágrimas resbalan por mis mejillas sin poder detenerlas.
-Hice algo malo- murmuro, abstraída en mis pensamientos.
Siento las manos de Adrien quitar las mías mientras me ofrece un pañuelo. Lo acepto entre el asombro y la vergüenza y limpio mi rostro.
-No creo que haya sido tan malo, tú no harías algo así- murmura con una sonrisa pero no me hace sentir mejor.
-Lo hice Adrien, traicione la confianza de mis padres y creo que perdí algo valioso para mí con un chico y no lo recuer...- me quedo callada cuando veo que hable de más, bajo la vista a mis manos avergonzada y solo quiero arrojarme del auto.
El rubio hace algo que me sorprende, rodea mi cuerpo con sus brazos en forma de consuelo y mi corazón se acelera al igual que vuelvo a llorar. Escondo mi rostro en su pecho, disfrutando de su compañía y consuelo al igual que mis manos se aferran a su playera.
-L...lo siento- tartamudeo, separándome de él con el rostro completamente rojo.
-No te disculpes Marinette, siempre estaré ahí para apoyarte- me dice con ternura, acariciando mi mejilla suavemente y ese gesto me recuerda a Chat Noir, pero alejo esa idea de mi mente rápidamente.
Le devuelvo la sonrisa y me doy cuenta que hemos llegado a mi destino. Adrien baja del auto y me ofrece su mano para ayudarme a bajar, y en ese momento me doy cuenta que tenemos público. Me sonrojo hasta el cuello antes de girarme para ver a Adrien.
-Gracias, por todo- le digo pasando un mechón de mi cabello detrás de mí oreja.
-No hay de que- responde con una sonrisa.
-Marinette- la voz de Alya me saca del trance en el que había entrado al verlo sonreír.
Me despido de Adrien y me giro hacia mi amiga, la cual avanzo unos metros separándose de Rose y Juleka.
-¿Por qué Adrien te trajo?, ¿no se suponía que estabas molesta con él?- pregunta mi amiga confundida, entrelazando su brazo con el mío.
-Antes de venir fue a buscarme, se disculpó y ofreció a traerme- contesto y no pude evitar el tono soñador al decirlo.
Alya niega con la cabeza antes de llegar con Juleka y Rose. Nos saludamos y entramos a la casa, donde todo es un verdadero desastre, sin contar a las dos chicas que se encuentran durmiendo en el suelo.
ESTÁS LEYENDO
DANGEROUS LOVE//FINALIZADA
Fanfiction-¿Chat Noir?- las orbes azules de la chica se abren en sorpresa, limpiando sus ojos rápidamente en un intento en vano de limpiar sus lágrimas. -Lo siento, no quería asustarte-de nuevo, pensó. -¿Qué haces aquí?- pregunto la azabache, aclarando su gar...