30. DE NUEVO

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MARINETTE:

No sé dónde estoy, pero si soy consciente de la luminosidad del lugar y que nunca había estado en el antes.

Al parecer estoy sola, pero no recuerdo nada antes de llegar aquí. Sin embargo no estoy asustada o frustrada por no tener respuestas, al contrario, me siento en paz conmigo misma.

No tenía idea del tiempo que transcurría en el cual me dedicaba a caminar al frente sin rumbo fijo por alguna razón que desconocía.

De vez en cuando llegaban a mí algunos recuerdos de forma simultánea.

Uno de ellos fue la primer vez que papá me enseño a hornear, mientras las galletas salían del horno nos pusimos a jugar con la harina para después recibir una reprenda de mamá.

Recuerdo cuando el maestro Fu me dio mi miraculous, bueno, literalmente lo dejo en mi habitación.

Recuerdo mi primer encuentro con Adrien, que no fue tan grato y bueno para ninguno de los dos.

También recuerdo cuando me rechazo, y esa misma noche Chat Noir me beso.

Nunca podré entender porque lo hizo, digo, acababa de rechazarme en la escuela y en su alter ego fue y me beso.

Paso de la paz a la confusión por todo lo que estoy recordando, comenzarme cuestionarme que está pasando conmigo.

Comenzando a preocuparme por no ver alguna salida y por no obtener respuestas de nada y esa preocupación pasa a desesperación.

Necesito salir de aquí, y rápido.

Vuelvo a caminar pero ahora en sentido contrario, pero el panorama no cambia y tengo la sensación de que no estoy avanzando a ningún lado, o que si lo hago regreso al mismo punto.

Así que decido parar y buscar alguna otra salida.

Me quedo estática de nueva cuenta, regulando mi respiración y cerrando los ojos, dejando mi mente en blanco.

Escucho sonidos que no logro identificar a mí alrededor y decido volver a abrir los ojos.

Pero cuando lo hago, ya no estoy en ese lugar tan blanco y luminoso, sino que no puedo moverme por más que lo intento, mi cuerpo pesa.

Un dolor agudo recorre todo mi cuerpo, instalándose en algunos partes pero con más fuerza en mi cabeza.

Y la luz en el techo no ayudaba en nada.

Logro mover una de mis manos, pero solo logro subirla a mi regazo con pesar.

-¿Marinette?- la voz tan familiar de mi madre reina en mis oídos y casi me hace llorar de alivio. No poder hacer nada me frustraba de sobremanera- no puedo creerlo, despertaste- dice con lágrimas en los ojos.

Estoy tan confundida, primero no entiendo como cambie de lugar tan rápido, el dolor en mi cuerpo me confunde más al igual que la conmoción en el rostro de mi madre.

-¿Qué...?- mi garganta raspa cuando intento hablar, por lo que guardo silencio al igual que mamá me hace una seña.

-Tranquila cariño, iré por el doctor- afirma, seguido de desparecer de la habitación.

Cierro los ojos unos instantes, y con un poco más de fuerza que al principio logro incorporarme un poco en la cama con uno solo de mis brazos, el otro estaba enyesado por alguna razón.

El brazo sano se encuentra conectado por varias intravenosas a maquinas que hacen un ruido extraño y tengo una sonda rodeando mi rostro.

¿Qué diablos me paso?

DANGEROUS LOVE//FINALIZADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora