9. PROBLEMAS

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MARINETTE:

Mi transformación acaba justo cuando entro a un callejón, a pocos metros de mi casa. Antes de que Tikki diga algo le doy una galleta y la dejo en mi bolso. Camino hasta la entrada de mi casa, y cuando entro me dirijo directamente a mi habitación, pero me sorprendo al encontrar a mis padres en la misma.

-Marinette, me alegra tanto que estés bien, vimos las noticias y estábamos muy preocupados- habla mi madre abrazándome y yo correspondo su abrazo algo aturdida.

-Estoy bien mamá- le digo separándome de ella, aun me sentía con remordimiento y ahora cansada.

-Queremos hablar contigo Marinette- el tono de mi padre es serio, un tono que casi nunca ocupa conmigo.

Trago grueso al igual que mi cuerpo se tensa, sea lo que sea que tenga que decirme no será bueno.

-Tu madre encontró tu ropa tirada en el baño, olía a alcohol- empieza a hablar mi padre y yo siento que la sangre abandona mi cuerpo- lo que me deja pensando que ayer saliste sin autorización y además bebiste- dice mi padre molesto, esperando que me defienda o que lo niegue, y cuando no lo hago su enojo crece aún más.

-Te brindamos confianza, ¿y te escapas a fiestas o donde sea que hayas ido?- regaña mi padre- dime que hiciste en esa fiesta y con quien estuviste- exige y yo me quedo callada, sus palabras me dolieron, además de que no puedo contestarle.

-Tom- habla mi mamá, intentando bajar el enfado de mi padre, pero no lo logra.

-No Sabine, seguramente ni siquiera recuerda lo que hizo ayer o ya me hubiera contestado, pero eso es lo que ganamos por darle tantas libertades- mi padre avanza un paso y yo me encojo en mi lugar- eres menor de edad y consumiste alcohol, ¿acaso no te das cuenta de lo peligroso que es eso?- su rostro esta rojo por el enfado.

-Mira Marinette, pudo pasarte algo y lo peor de eso es que no estábamos aquí, si nos hubieras dicho que saldrías tal vez te hubiéramos dejado salir...

-No, aun es menor de edad y ella piensa que se manda sola- interrumpe mi padre- estas castigada una semana, saldrás solamente a la universidad y nada de visitas- sentencia mi padre, antes de salir de mi habitación sin mirarme.

Un vacío se instala en mi pecho ante la indiferencia de mi padre, si me habían castigado una que otra vez, pero por alguna razón esta vez era diferente.

Mi madre me dedica una mirada de decepción antes de seguir a mi padre, ni siquiera pude decir algo.

Bufo con frustración antes de sentarme. Miro a mi alrededor, además de que mi habitación es un desastre, no hay indicios que me ayuden a recordar o saber que paso. El compartimento que divide la terraza de mi habitación se abre, y de este entra Chat Noir, con sigilo y esta vez con una expresión seria, no me saluda ni nada parecido, solo me mira entre enojo y confusión.

-Mira Chat, ahora no tengo ánimos de hablar, ¿sí?- hablo yo cuando él no dice nada.

-Qué pena, porque yo tengo muchas cosas que aclarar contigo- su tono es serio y me da escalofríos.

-¿Sobre qué?- pregunto confundida.

-¿No te diste cuenta que por tu distracción casi perdemos una batalla?- exclama y mi alma cae a mis pies.

Dejo de respirar mirándolo entre el asombro y el miedo.

¿Cómo lo supo?

-¿D...de q...que ha...hablas?- tartamudeo con nerviosismo.

-Sabes que me refiero, Ladybug- remarca la última palabra y yo me siento desfallecer.

Esto no puede estar pasando, no, no, no.

DANGEROUS LOVE//FINALIZADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora