El club de los corazones rotos.

15

─Deberías dejar de comer tanto. ─hablo Jeno al ver la bolsa de papas fritas que Mark traía en manos─. Engordaras.

─No pasara. ─le contesto de mala gana─. Además, no pedí tu opinión acerca de mi cuerpo, así que jodete.

─Veo que ser esclavo del diablo tiene sus ventajas...─susurro negando con la cabeza─. Después no vengas conmigo a llorar acerca de lo mucho que odias tu cuerpo.

En ese instante se escuchó un portazo en la entrada y Jaemin se adentró al club para después colocarse en medio del salón, llamando la atención de los cuatro.

─ ¿Por qué te ves tan desastroso? ─preguntó Mark. Jaemin traía su cabello desordenado y se estaba abotonando la camisa del uniforme.

─Estaba en lo mío. ─comento sin mucha importancia─. Veámonos el jueves en la noche.

─No puedo. ─susurro Renjun creyendo que nadie lo escucharía pero fue todo lo contrario.

─ ¿No puedes? ─pregunto Jaemin, burlándose de sus palabras─. Que insolente.

─Iré con Chenle a una fiesta por el estreno de una película...

─Iremos. ─le corrigió Mark con interés─. Habrá celebridades, yo quiero.

─Pe-ero, yo solo fui...

─Se cancelan los planes, iremos a la tal fiesta esa. ─sentencio Jaemin y Renjun quiso negar pero temió por lo peor.

─ ¿Pero nos dejaran entrar? Solo invito a Renjun, no a nosotros.

─No me importa, vamos a ir.

─ ¿Para qué? ─volvió a preguntar Jeno con una sonrisa incrédula─. ¿Para qué le arruines la carrera a otro artista?

─Si lo hago o no, no te tiene que interesar.

─Estoy de acuerdo con Jeno. ─apoyo Mark─. Solo decepcionaran a sus fans y a la compañía, han trabajado tan duro para debutar y es muy injusto que sabotees eso.

─ ¿Injusto? ¿Es mi culpa que ellos se acuesten conmigo? Los fans son los que viven en una burbuja, son humanos. Los idols tienen sexo, se drogan, beben y hasta son unos hijos de puta. A la que me cogí y su compañía me quería demandar, esa, era una bully. De todos modos, el chismoso de Dispatch la iba a exponer y toda su carrera se acabaría. Solo adelante todo.

Jeno y Mark intercambiaron miradas, sabían que no podían cambiarle el pensamiento. Solo se rindieron.

En cuanto termino de decir eso, la mirada de Jaemin fue directa hacia el menor, que en ningún momento hablo. Jisung estaba sentado en un pupitre, alejado de ellos mientras su mirada estaba baja y en la perdición. Rascaba su muñeca con tanta fuerza y desesperación que la herida en su brazo se estaba dejando ver y podría llegar a lastimársela con más profundidad.

─Jisung. ─lo llamo Jaemin al verlo tan desorientado─. Jisung, Jisung, Jisung, Jisung, Jisung.

Jaemin comenzó a llamar su nombre sin parar, solo para molestarlo. Pero el menor parecía hipnotizado, lo único que cambio fueron sus uñas encarnándose en su muñeca, causando que poca sangre saliera.

─ ¡Park Jisung! ─grito Jaemin con fuerza. Se acercó hasta el menor para después tomarlo del brazo lastimado y darle media vuelta, causando que el hueso tronara. El menor soltó un alarido de dolor y aumento cuando Jaemin tomo un lápiz del suelo y lo incrusto en el centro dorsal de su mano.

Jisung comenzó a llorar en silencio e implorando que se detuviera pero sus palabras solo hicieron lo contrario. Jaemin forzó y clavo con más profundidad hasta que llegara al hueso, quería tocar fondo.

El menor sintió todo su brazo doler, como si el fuego lo estuviera consumiendo. Renjun no pudo evitar seguir escuchando sus gritos. Se armó de valor y se acercó a Jaemin para alejarlo de un jalón.

El menor con su otra mano temblorosa trato de quitarse el lápiz pero Renjun lo detuvo a media acción.

─Deja que lo haga. ─intervino Jaemin echándole más leña al fuego─. Tendremos un lago de sangre que él tendrá que lamer.

Los ojos de Jaemin se mostraron juguetones, ansiaba ver esa escena. Ansiaba ver la sangre de Jisung salir de su débil cuerpo.

─Basta. ─advirtió Renjun.

─No es la primera vez que probara su sangre, lobo debió obligarlo a cosas peores. No seas tímido. ¡Arráncate el lápiz de tu asqueroso cuerpo y trágate tu maldita sangre!

El menor comenzaba a sentirse mareado y sus llantos querían salir en alto a medida que escuchaba los gritos de Jaemin tronarle los oidos. Todo su cuerpo dolía.

─Cobarde. ─susurro Jaemin soltando una pequeña risa sarcástica.

Renjun ayudo a Jisung a incorporarse, coloco el brazo alrededor de su hombro mientras que con sus manos lo tomo de la cintura para que mínimo pudiera caminar y así llevarlo a la enfermería.

Jeno y Mark se quedaron viendo la puerta al momento en que se fueron, sin creer que Renjun se haya enfrentado a Jaemin.

Cosa que ninguno de los dos se atrevió en toda su vida.

(...)

Después de todo el caos, la enfermera había llamado a emergencias y terminaron en un hospital. El doctor aplico puntos de sutura en la parte dorsal de la mano de Jisung ya que era una herida abierta, después lo ingreso en una habitación de hospital para que se recuperase. En cuanto una de las enfermeras le brindo el número de habitación, Renjun no dudo en ir para ver la situación del menor.

Se encontró a Jisung acostado en la camilla mientras el suero se encontraba conectado en su brazo sano y con la vista en la ventana. Observo su mano y estaba cubierta con una venda. Lo bueno es que estaba a salvo.

─Me hubieras dejado. ─susurro Jisung en cuanto lo observo tomar asiento frente a la camilla─. Quería morir ahí mismo. No quería llamar la atención de esta manera. Si-i alguien se entera de lo que hice-e...

─Jisung, nadie lo hará.

─ Yo lo mate-e, todo fue mi culpa...van a descubrir que fui yo, lo sé, lo sé. Si se enteran de que no es la primera vez que mato a alguien. Van a hacerme sufri-ir, merezco morir, merezco morir. ─repitió miles de veces mientras se cubría el rostro y las ganas de llorar volvieron. La culpa lo consumía.

Renjun miro a su alrededor y noto en la mesada de al lado un pequeño jugo con una manzana que había dejado la enfermera minutos atrás.

Tomo el jugo de cartón para después colocarle el popote. Aparto las manos de su cara con delicadeza para darle el jugo. Jisung volteo temeroso, esperando que no le hiciera daño por estar solos, como siempre sucedía cuando era castigado. Pero fue todo lo contrario, Renjun al no ver ninguna reacción, guió sus manos hasta llevarle el jugo a sus labios para que bebiera.

─No dejes que tus pensamientos te abrumen.

Jisung se sintió más calmado cuando el líquido entro a su cuerpo y Renjun le regalo una pequeña sonrisa para calmarlo.

─ ¿Qué te dijo el doctor? ¿Cuándo te darán de alta?

─Cuando lleguen mis padres a firmar unos papeles. ─respondió en cuanto bebió la mitad─. Si te preguntan algo diles que no me conoces, que solo estabas ahí cuando paso.

─ ¿Pasar qué?

─Que me autolesione.

Sintió su corazón dolerle al escucharlo. Debía tener unos padres amorosos para sentirse tan culpable, probablemente esta no era la primera vez que terminaba en un hospital.

─Estaré afuera, cuando tus padres vengan entonces me iré.

─Gracias.

Renjun asintió para después salirse de la habitación. En cuanto cerró la puerta tras de él, como si fuera un instinto, sus ojos se posaron en la cámara de seguridad.