El club de los corazones rotos.

25

─ ¿Qué hacemos aquí? ─pregunto Renjun al encontrarse en un billar en medio de la noche. Mark había arrastrado a los dos hasta el lugar en cuanto terminaron las clases, sin razón alguna. Probablemente para llegar tarde a casa y así evitar los insultos de su padre.

─Venimos a jugar, ¿a qué más? ─respondió Mark acercándose a una mesa de billar.

─No creí que Jaemin nos había citado aqui...

─Porque no lo hizo, Jeno y yo venimos de vez en cuando ─dijo apuntando a su alrededor. Era necesario darse un descanso de él─. No te preocupes, Jaemin debe estar haciendo sus cosas.

─No pregunte...─susurro Renjun.

─Oh, ¡Wendy, Wendy! ─grito Mark para después alzar su mano al ver a una de las meseras cerca. Wendy lo miro ante esos gritos que podría identificar desde metros para después sonreír sorprendida y acercarse hasta ellos. Mark era amigo de Wendy, que trabajaba en el billar.

─Hace mucho que no los volvía a ver. ─comento Wendy emocionada─. ¿Cómo han estado?

─Bien, todo sigue igual. ─respondió Jeno encogiéndose de hombros y tomando el palo de billar.

Mientras Wendy y Mark seguían hablando como si no se hubieran visto en años, Renjun miro a su alrededor. El lugar parecía de esos a donde solo personas peligrosas frecuentaban y agradeció que hubiera poca gente a esa hora. Observo los posters de mujeres semidesnudas en la pared y el olor a alcohol impregno en sus fosas nasales. Sintió nauseas de ese lugar.

─Tráeme tres refresco. ─pidió Mark dándole un leve empujón coqueto─. Hoy siento que nos quedaremos jugando un rato.

─ ¿Se les ofrece algo más? ─pregunto Wendy.

─Dos refrescos y un soju. ─corrigió Jeno sin verla, teniendo la vista enfocada en su ya comenzado juego de billar. Se posiciono en la mesa y con el palo golpeo una de las bolas, chocando contra otras tres. Alzo la vista─. ¿Sabes jugar, Renjun?

─No...

─No me sorprende. ─soltó de manera grosera, pero ni le importo.

─En un momento se los traigo. ─dijo Wendy para después irse.

─ ¿Puedo preguntarles algo acerca de Jaemin?

Mark y Jeno voltearon a verlo al mismo tiempo por tal inicio de conversación. Mark asintió lentamente sin estar del todo seguro.

─ ¿Siempre fue asi de cruel?

─Es un idiota con suerte...─admitió Jeno golpeando la bola nueve.

─ ¿Con suerte? ─pregunto Mark recargándose en la mesa de billar─. ¿Estar al borde de la muerte te parece suerte?

─No murió. Sobrevivió, tiene suerte.

─ ¿De que están hablando? ─intervino Renjun.

─No lo sé, supongo que...no sé. ─susurro Jeno lo último pero no le creyó.

─Ustedes saben algo. ─les dijo de vuelta. Jeno negó─. Si lo saben, díganme.

─No nos corresponde hacerlo, no es una agradable historia que todo mundo quiera escuchar. ─opino Mark con sarcasmo mientras era su turno.

─Díganmelo. ─rogó Renjun. Jeno resoplo pasando su mano por su cabello de manera estresante. Dejo el palo a un lado y lo miro por unos instantes. Se supone que veían a distraerse, quiso golpear a Mark por ser quien lo había traído.

─Jaemin vivía en una pequeña mansión en medio del oscuro bosque desde que era pequeño, con sus padres. Su madre sufría de trastorno de personalidad múltiple, si no me equivoco tenia diez personalidades y su padre la encerraba en el sótano cuando cambiaba. ─comenzo a decirle─. Jaemin tuvo una infancia muy difícil al tener que cuidar de su madre, una de sus personalidades le gustaba la carne humana y en reacción siempre quiso asesinarlo para comérselo.

Renjun escucho con atención. El pobre de Jaemin a los trece años tenia que estar encerrado por horas hasta que la personalidad del caníbal desapareciera. Nunca podía dormir, comer, salir o hasta respirar con tranquilidad, siempre estaba alerta o terminaría muerto. Deseando en el fondo que su verdadera madre saliera a la luz para que terminara su pesadilla.

─Su madre no estaba mentalmente sana. Jaemin había escrito en su diario que una de las personalidades de su madre se creía la bella durmiente, se refería a ella de esa manera porque sufría de narcolepsia. Aunque siendo honesto, parecía toda una villana.

─ ¿Leíste su diario? ─pregunto Mark casi asustado. Jeno asintió sintiéndose orgulloso─. No quiero ni pensar todo lo que escribe ahí...

─ ¿Supiste de las demás personalidades? ─siguio Renjun.

─No tengo idea de cuáles eran las demás porque no quise seguir leyendo. Pero al final otra de las personalidades de su madre quemo la casa, sucedio en la noche mientras tenia a Jaemin en sus brazos al querer dormir. Pero Jaemin no quería abandonarla. ─siguió contando Jeno pero esta vez se detuvo para recordar lo que habia escrito─. Decidió escapar y abandono a su madre, con la casa quemándose. En consecuencia perdió a su madre y tuvo graves quemaduras de primer grado, todo su rostro y cuerpo quedaron arruinados por el fuego.

─ ¿Y su padre?

─Escapo de la casa cuando el incendio sucedió. Las autoridades creyeron que él fue quien inicio el fuego para matar a su esposa e hijo. Las dos verdades se contradicen, esta la versión de Jaemin y la de su padre. Pero supongo que al final le creyeron al padre por ser un hombre honesto y religioso. Pero supongo que solo ellos dos conocen la verdad.

─Ya sabes lo que dicen. ─hablo Mark sintiendo un escalofrío─. El lobo siempre va a ser el malo si solo escuchamos a caperucita.

─Hey. ─hablo Jeno con molestia─. Cállate si no sabes de lo que hablas.

─Solo decía...se me hizo raro que el padre de Jaemin no terminara en la cárcel o algo, los maltrato a los dos.

─ ¿Dónde esta su padre? ─cuestiono Renjun.

─No sabemos, solo escapo y dudo tanto que Jaemin quisiera haberse ido con él.

─También Jaemin hubiera terminado en la cárcel de menores. ─pensó Mark en voz alta, ya estaba comenzando a enojarse.

─ ¿Estas insinuando que Jaemin causo el incendio? ¿Él? ─pregunto Jeno aumentando su tono de voz y encarándolo.

─Es capaz de matar a cualquier ser vivo y su mente esta llena de maldad, no dudo que haya inventado una historia para verse como el bueno.

─Él no haría eso.

─ ¿Cómo estas tan seguro? Es un psicópata. ─dijo Mark irritado─. Es capaz de crearse una historia para que todos le creyeran.

─ ¡Que él no es asi! ¡Lo sé! ─grito Jeno con fuerza que su garganta ardio. Quedaron en silencio por unos instantes hasta que Renjun volvió hablar.

─ ¿Alguien mas estaba en el incendio?

─No se, podría haber estado alguien más. No me importa.

─O tal vez Jaemin también lo invento y quiso matar a sus padres en ese incendio. ─le soltó Mark en cara─. Sabes mucho de su pasado. No sabia eso.

─Soy cercano a él. ─presumió Jeno y volvió al juego─. Todos lo saben.