Lucky Charm | 𝘥𝘳𝘦𝘢𝘮𝘯𝘰𝘵𝘧𝘰𝘶𝘯𝘥 [ TRADUCCIÓN ]

Capítulo 7

La oscuridad presiona a George como un vicio.

Un dolor parecido a una conmoción brota de su esternón y se extiende hacia abajo. Se siente como si tuviera espinas perforando sus pulmones, enviando temblores a sus costados.

Intenta estirar la cabeza para mirar a su alrededor, pero su cabeza está firmemente atascada mirando hacia adelante. Él baja sus ojos para ver

Una repentina y horrible oleada de náuseas se apodera de él.

La corona está frente a él, colocada sobre un pedestal dorado ornamentado.

Un rayo de luz brilla, iluminando la corona en su fría y horrible gloria.

Brillantes y horribles hojas de luz atraviesan su visión, pero ni siquiera entrecerra los ojos.

Es como si ni siquiera pudiera moverse o reaccionar.

Empieza a avanzar.

El dolor punzante estalla en sus pies. Duele moverse, y sin embargo...

No puede parar.

No por falta de intentar.

Intenta clavar los talones en el suelo, detener su movimiento por completo. Pero su cuerpo no escucha.

Es como si estuviera siendo manipulado por una mano invisible, moviéndose al ritmo de un conductor invisible.

Se detiene frente al pedestal, estirando sus manos para agarrar la corona firmemente entre sus dedos.

Detener.

No puede.

Sus brazos se elevan.

Alguien, por favor.

Deténme.

Ayúdame.

Alguien—

George quiere llorar.

Pero su cuerpo ni siquiera lo deja.

Su rostro es inexpresivo, su cuerpo se mueve suave y deliberadamente mientras la corona se coloca sobre su cabeza en un solo movimiento.

Y luego el dolor casi hace que George colapse.

El horrible y abrumador dolor opresivo en la frente y las sienes. Como espinas de brezo clavándose en su rostro, perforando su piel.

Puede controlar sus manos de nuevo, de alguna manera, y George levanta las manos para apartar la corona de su cabeza, evitar que se le clave en la carne, pero...

No se mueve. De repente, la corona se ha convertido en un aro de espinas que se aprieta firmemente en su cabeza y se contrae.

Incluso cuando George comienza a tirar de él en un débil intento de apartarlo de su rostro, el aro se vuelve cada vez más apretado.

Las espinas le pinchan los dedos y las palmas, cuando retira las manos del aro, él...

Su mano se pone roja.

Se lleva las manos al cabello, intentando por última vez quitarse la corona de la cabeza. Para su horror, su cabello se siente húmedo.

Cuando vuelve a mirar sus manos, las encuentra cubiertas de sangre. Gotea de sus dedos al suelo, gota a gota.

George cae de rodillas y grita.

Sus ojos se abren de golpe y se siente presa del pánico.

Su corazón late en su pecho, late en sus oídos.