Guerrero Sangheili Parte 2, La Guerra De Los Imperios.

Confrontación, parte 1.

Tanto los humanos como el Covenant no saben dónde termina el territorio del otro bando, apenas gracias a las patrullas que ordenó el capitán Jarrus es como pudieron encontrar pequeñas rutas de transporte enemigos, siendo justos tiene sentido, Jarrus es el almirante de naves más efectivo y de confianza que el Inquisidor posee.

Jarrus: -recibe a los tres asesinos en el Shadow of Intent y habla con los tres- no esperaba recibirlos a ustedes tres.

Uriar: que pena pero ya estamos aquí, Jorhum dice que puedes ayudarnos con un ligero inconveniente.

Jarrus: suministros para la amenaza que trajiste Ugald.

Uriar: ahórrate las quejas y dime, ¿Qué tienes para darnos un objetivo?.

Jarrus: -uno de los élites al servicio de su nave enciende una holomesa que muestra a un planeta gaseoso- mis exploradores de reconocimiento encontraron este planeta, no contiene nada pero lo importante es la luna, los humanos tienen un par de puestos de avanzada por toda la superficie, no dudo en que encontrarán lo que buscan.

Uriar: excelente, hay que lanzar un ataque a gran escala...

Jarrus: ¡Jajaja! -su risa se burla de las palabras del cacique-.

Uriar: ¿Qué te da tanta risa?.

Jarrus: Jorhum dijo nada de ataques de gran escala para no mostrarle al enemigo nuestra fuerza de ataque pero tú diminuto cerebro no capta bien las órdenes...

Uriar: -gruñe furioso e intenta golpear al media mandíbula pero Seiran lo detiene- continúa así y terminarás con el cráneo aplastado.

Jarrus: en fin, para no llamar la atención te proporcionaré una corbeta de asalto DAV por si necesitas ayuda.

Uriar: ¿Y qué harás tú?.

Jarrus: seguiré con mi rol, mantendré contacto y sí la situación lo requiere intervendré, solo asegúrate de que no sea necesario.

Uriar: bien, vámonos de aquí. -se dirige de nuevo al hangar con Nirork y Seiran mientras el media mandíbula solo los ve-.

Jarrus: hum, patético -camina hacia el puente de mando de la nave-.

Del Shadow of Intent una diminuta corbeta de reconocimiento es desplegada y una vez lista se aleja del resto de naves, en el interior un zealot de armadura estándar pero de un color dorado brillante hablar con el cacique sangheili.

Maestro de nave: coordenadas listas para el salto general, tardaremos varias en llegar.

Uriar: como sea, hazlo ya.

La corbeta despliega el portal y lo atraviesa, Jarrus solo observó como el transporte se iba.

Jarrus: idiotas, ¿Cómo se les ocurrió traer una humana hasta el corazón del ejército?.

De todos los líderes Covenant principales, Jarrus es quien más le desagrada la movida de Uriar, no es preocupación lo que siente siente desagrado, enojo, no puede creer que Jorhum haya aceptado algo como esto, está disgustado y quisiera discutirlo fuertemente con su hermano.

Uriar: -mira el mapa de una de las múltiples instalaciones de la luna- podemos hacer esto sencillamente, una diminuta operación sigilosa y salimos con esos equipos primitivos y un par de víctimas.

Seiran: como en los viejos tiempos, hay que mostrar más nuestra habilidad.

Uriar: no seremos suficiente los tres, necesitamos a un diminuto batallón, Seiran reúne a los mejores guerreros que hay en esta corbeta.