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—Jungkook hyung, ¡Está aquí de nuevo! —Chilló sin disimulo entrando al consultorio del mencionado. Jungkook miró a Taehyung con una ceja alzada al notarlo tan emocionado, sintiéndose repentinamente invadido por la energía natural del estudiante.

—¿Quién?

—¡El chico guapo! —Anunció como si se tratase de una obviedad. Jungkook sólo asintió con indiferencia, asumiendo que el híbrido felino buscaba una nueva revisión—. Está en la caja con su amigo, ya van a venir a verte.

Jungkook fijó la vista nuevamente en su celular, revisando las citas que tenía para ese día—: Ah, bien.

Taehyung abrió la boca, ofendido por su actitud desinteresada. Jungkook no notó cuando el menor cruzó los brazos sobre la camisa de su uniforme azul, demostrando su descontento.

—¿Qué es ese "ah, bien"? ¡Estarás en consulta con el hombre más guapo del mundo!

El mayor suspiró, ignorando las quejas del menor y su repentino monólogo sobre lo mucho que le gustaría tener la oportunidad que él tenía—: Taehyung, ¿Me traes un café?

—Le pediré su número cuando la consulta termine. —El estudiante caminó hacia la puerta, totalmente soñador, acatando la orden con una sonrisa por inercia.

—Sin azúcar, por favor.

Jungkook lo vio desaparecer por la puerta, quedando un par de minutos en completo silencio, cuando después apareció el par de híbridos. El veterinario los recibió con una sonrisa y un saludo cortés. Intentó acercarse al híbrido felino cuando el más alto le comentó sus mejoras y lo que aún faltaba por curar, pero como la última vez, Yoongi no tenía intenciones de dejar que lo tocase.

En silencio, buscó la misma medida de la última vez mientras el híbrido canino reprochaba al otro con visible molestia. Jungkook volteó con la jeringa preparada cuando el sonido de la puerta abriéndose con fuerza llamó la atención de los tres presentes, interrumpiendo el momento tenso.

—¡¿Quién demonios toma el café sin azú-

Taehyung detuvo su exclamación cuando notó la presencia de los dos híbridos.

Se quedó congelado por la sorpresa cuando notó que uno de ellos era el mismo chico que le tenía disparando corazones desde que lo vio días antes. Y de inmediato sus mejillas se pusieron rojas cuando le sonrió, procesando lo tonto que había sonado al ingresar al consultorio de forma tan estrepitosa.

—Gracias, Taehyung. Puedes dejarlo en el escritorio —interrumpió Jungkook reprimiendo una carcajada por su expresión perpleja. Podía jurar que lo había visto temblar mientras caminaba a dejar el café sobre el sitio indicado, intentando ocultar su rostro colorado de la vergüenza.

Definitivamente así aprendería a tocar la puerta un par de veces antes de entrar.

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439 palabras.

-CoffeeToffee

DON'T TOUCH ME! || KOOKGI/YOONKOOK 「ADAP」¡PAUSADA!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora