024

419 68 0
                                    


Jungkook sacó la llave de la cerradura cuando la puerta fue abierta. Entró en silencio, colocando su espeso abrigo en el perchero para después desatar sus zapatos. Una vez que ingresó al salón, observó alrededor con melancolía.

Hacían al menos cinco días desde que no sabía nada de Yoongi. El híbrido no dio señales de vida, ni siquiera cuando intentó llamarlo para saber si estaba bien.

Encontrarse solo en su casa, después de tanto tiempo siendo acompañado por el chico, le parecía deprimente y familiar. Tuvo su presencia al volver a su hogar por al menos dos meses, con cada vez más frecuencia. Pero de pronto, se detuvo.

¿Había hecho algo malo? ¿Le había sucedido algo grave al híbrido?

Por un momento la idea de ir hasta la casa de éste le invadió la mente. Pero al momento de tomar las llaves del auto, paró. No quería verse como un extraño.

Quizá, el híbrido se cansó de aquella amistad y decidió desaparecer sin dejar rastro. Eso sería lo más probable.

Con un extraño sentimiento de decepción se dirigió a la cocina. Su cabeza sufría una migraña, por lo que no tardó en tomar una pastilla con la esperanza de alcanzar el alivio.

Sin ánimos de hacer mucho esa noche, encendió el televisor mientras mordía una manzana verde. Aquella sería su cena. Dado a su poco apetito, lo más agradable que encontró en su refrigerador fue una ligera fruta.

Se dedicó a hacer zapping sin interés hasta que una llamada lo alertó. Apenas se estiró sobre el sofá para alcanzar su teléfono y contestó, intrigado por el número desconocido.

—¿Diga?

¿Jeon Jungkook? —Una voz gruesa y apenas conocida se escuchó del otro lado de la línea. El aludido asintió dudoso, abandonando el control remoto sobre uno de los cojines.

—Sí, ¿Con quién tengo el placer de hablar?

Soy Namjoon, el hermano de Yoongi —ante esas palabras, los nervios incrementaron en el cuerpo de Jungkook.

¿En qué te puedo ayudar? —Hizo un esfuerzo por ocultar la preocupación presente en su voz.

No tenía idea de qué podía estar sucediendo, pero con sólo recibir la llamada del híbrido canino pudo intuir que algo no estaba bien.

Uhm, sí, lo siento por molestarlo a estas horas. Le pedí su número a Taehyung porque estoy bastante preocupado... —un suspiro cansado llamó más su atención—. ¿Yoongi está con usted?

Jungkook palideció por un momento.

—No, ¿Por qué?

No conozco su paradero desde hace varios días, yo... —la angustia del contrario contagió a Jungkook, quien de inmediato se levantó del sofá, encaminándose hacia la puerta—. Lo último que supe es que entró en celo, pero no es normal que tarde tanto en volver...

—Escucha, saldré a buscarlo —anunció tomando las llaves y ocupando su chaqueta gruesa—. Taehyung de seguro también podrá ayudarnos. ¿Te parece bien?

Sí... Le avisaré ahora mismo.

—Bien —Jungkook se mordió el labio nerviosamente, escuchando al contrario agradecer por lo bajo—. Lo encontraremos.

_________________________________________

498 palabras.

-CoffeeToffee

DON'T TOUCH ME! || KOOKGI/YOONKOOK 「ADAP」¡PAUSADA!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora