capítulo 16: fuera de peligro

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Esa mañana cuando me desperté, sentí un gran cansancio, me dolía la cabeza era obvio que mi cuerpo aun no se había recuperado totalmente de la enfermedad. Me senté en la cama, no tenia ganas de pararme y menos de salir de ahí. Al mirar a mi alrededor no vi a max; pensé: seguro se había ido al baño.

Minutos después, alguien toco a la puerta, mientras decía:

—¿Puedo pasar? 

—¡Si !, pasa —respondí.

Cecilia entro con una bandeja de comida.

—Te traje la comida alimenticia ella.

—Gracias.

Tenia tanta hambre, que no me importo comer como un oso hambriento en frente de cecilia. Ella permaneció sentada a mi lado, esperando a que terminara de comer, para poder coger las cosas e irse.

Cuando termine ella recogió las cosas y se dispuso a irse. 

—!! Cecilia !! —Le dije, quería decírselo, tenia la necesidad de decirle cuanto la amaba cuanto antes, ya que no sabia lo que me pasaría.

—Gracias...por la comida —fue lo único que salió de mi boca, mierda, ¿por que no se lo decía ?.

—De nada - me respondí con un tono apagado— avísanos si necesitas algo.

—Si, lo haré.

Después de eso ella salió de la habitación; yo me quede en cama, tiempo después llego max.

—Oh, ya despertaste —me dijo sorprendido —¿ya te sienes bien ?.

—Un poco, aun siento un poco de fiebre y mareos —le dije— ¿Dónde estabas?.

—Estuve hablando con melany, para posponer la búsqueda hasta que te mejores. Además, mientras estuviste dormido me hice mas cercano a ella, hablamos mucho, y resulta que tenemos gustos parecidos.

—¡Valla !, bien por ti.

—Y que tal tu, cuando planeas hacerlo.

—¿Hacer que? —Dije, fingiendo desconocer el significado de la pregunta.

—No te hagas, cuando le dirás a cecilia que te gusta —me dijo increpándome.

—No lo se, es complicado.

—!Tienes que hacerlo pronto !, nos toco vidas inseguras, no sabemos lo que pasara mañana, no tenemos la certeza de que al despertar vivamos ese día completo, no puedes esperar "El momento perfecto".

—! Valla¡, casi me haces llorar —le dije con un tono un poco burlesco.

—Es enserio santiago, debes hacerlo. 

—OK, mira lo hare cuando estemos a salvo, cuando salgamos de aquí y vayamos donde los militares, ya no falta mucho.

—Bueno...te dejare descansar, iré a ver como esta melany, cecilia esta con ella —dijo max.

Me acosté en la cama y, antes de darme cuenta ya me había quedado dormido. Desperté muy tarde, ya estaba oscureciendo, me levante de la cama y salí de la habitación.







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