Desire; pjm

1O

Lo que acaba de haber dicho Jimin, me había dejado atónica. Esa sonrisa coqueta apareció en sus labios.

‒ ¿Esperas que tome la iniciativa?, muy bien ‒dice parándose del sillón, poniéndose enfrente mío.

‒ Ji-min ‒ tartamudee al sentir su mano tocar mi mejilla ‒ no lo hagas.

No le importo lo que dije, su mano bajo hasta mis hombros en donde le dio un apretón, nada brusco, la otra mano que estaba libre descendió hasta mi cintura en donde la acaricio con delicadeza. Podía alejarlo, lo podía hacer, pero mi cuerpo le gustaba el toque que estaba recibiendo, y a decir verdad pararlo no era lo que quería.

‒ Joder Heesook, tengo tantas ganas de hacerte mía en este momento ‒susurro en mi oído, haciendo que mi piel se erice ‒ follarte toda la maldita noche, hacerte gritar mi nombre, ver esa carita de satisfacción cuando te la estoy metiendo ‒dicho esto la mano que estaba en mi cintura fue directo a mi trasero, en donde también le dio un apretón, sonrío al ver que de mi boca salió un quejido de sorpresa ‒ me estoy poniendo duro de tan solo imaginarte en ese estado, dispuesta para mi ‒ se acerco aun mas, quedando su boca a centímetros de la mía, agarro mi mentón y deposito un beso en mi cuello, para luego sentir su lengua recorrer por esa zona, hice mi cabeza hacia atrás al sentirlo, luego de unos segundos se detuvo, para mirarme detalladamente, rápidamente hice a un lado mi rostro ‒ tan tierna te vez sonrojada, pero a la vez me calienta mucho.

Esto se estaba saliendo de control, apenas lo conocía, aun era un desconocido para mi, no conozco nada de el, no se nada de su vida, ni el de la mía. Salí de mis pensamientos al sentir sus manos bajar las tiras de mi polo, ahí caí en cuenta que si lo dejaba continuar, esto acabaría muy mal, de eso estaba segura.

‒ Jimin detente ‒ susurre, pero no me hizo caso ‒ Jimin por favor para ‒dije con mas fuerza, haciendo que el se detenga, sus ojos se clavaron en los míos, esa mirada gatuna tan coqueta y oscura, que me intimidaba, me miraba detalladamente.

‒ Se muy bien que no quieres que me detenga, lo puedo ver en tus ojos Heesook ‒ contesto muy seguro de lo que había dicho, y tenía toda la razón, yo no quería que parara ‒ ¿Quieres que pare acaso? ¿Eso es lo que quieres Hee?

Asentí.

‒ Muy bien Heesook, gracias por calentarme ‒ sonrió sarcásticamente ‒ te lo agradezco de ante mano.

‒ No fue mi intención ‒ no termine de hablar, al escuchar unos gritos desde afuera.

‒ ¡Hijo de puta, se que estas ahí, abre la maldita puerta! ‒ gritaron, quise acercarme a ver por la ventana, pero Jimin sostuvo mi brazo deteniéndome.

‒ Si tocan tu puerta no abras ‒ susurro ‒ me están buscando.

Ahí es donde comprendí que el estaba en problemas, las voces de aquellos hombres aun se escuchaban. Me solté de su agarre, yendo directo a ver por la ventana, afuera de la casa de Jimin habían tres hombres, uno de ellos se encontraba golpeado ,y los dos estaban intactos sin ningún golpe, al parecer habían venido a pegarle a Jimin, el hombre que estaba golpeado tenía cara de venganza, y si Jimin tenía razón, lo había dejado muy golpeado, no había mentido.

Luego de casi media hora, gritando, golpeando la puerta de mi vecino que en estos momentos lo tenía escondido en mi casa, aquellos hombres robustos se habían marchado, mire a Jimin, este se había parado del sillón, si se iba a ir, estaba segura que esos hombres volverían.

‒ ¿Te iras? ‒pregunte torpemente, obvio que se iría, se estaba poniendo su polo, este asintió ‒ ellos volverán, además tu estas golpeado.