Repercusiones

🌸Cap 13🌸

Martes/05/Septiembre/2017

2:50 PM

No se cuántos días han pasado desde la repentina muerte de aquella nefasta mujer, solo tengo presente que estar bajo la custodia de mi padre, es un eterno suplicio.

Estoy harto de tener que hacerme cargo de mis hermanos, sobre todo por los insoportables meses en donde tuve que soportar los horribles berrinches de mi vanidosa hermana.

Limpio con notable enfado, la costra de brillantina que portan las suaves cortinas de mi habitación.

Quería gritarle a Lola que dejara de joderme, pero últimamente Lincoln pasa más tiempo en casa, y aquello me imposibilita poder realizar mi descontrol usual.

Estoy conciente de que si ese enano blanco llega a ver el demonio que vive en mi interior, voy a terminar preso en un manicomio como la loca de mi hermana Luan.

Detengo mi labor con el cepillo cuando escucho perfectamente el taconeo impecable de aquel pequeño mounstro.

Tomó aire, preparándome mentalmente para la idiotez que tengo que tolerar, si no deseo terminar en una celda acolchada.

Lo:- Hola Leni~.

Aprieto la tela con fuerza cuando escuchó su irritante voz, pero al instante decidido simplemente fingir que no estoy conciente de su estúpida presencia.

Sigo en mi labor de fregar con fuerza bruta, la maldita mancha que tenía pegada en mis jodidas cortinas, pero la muy ingrata venía con ganas de un puñetazo.

Retengo una queja de dolor, cuando siento perfectamente como un pequeño alfiler es incrustado en la parte posterior de mi camiseta, traspasando inevitablemente el trozo de piel que la suave tela cubre de su mordaz mirada.

Conté hasta tres, recordé las muertes que había provocado con mi pérdida de control, pensé en Luan y lo mal que la pasaba estando encerrada en ese horrible lugar.

Ln:- ¿Porque no te vas a joder a otra parte, estúpida?.

Le dije un poco fuera de mi, ocasionando que ella me dirija una mirada de advertencia que en vez de asustarme, provoca en mi unas ganas horribles de estrangular su pequeño cuello.

Lo:- No te conviene meterte conmigo.

Una sonrisa burlona se plantó en mi rostro al escuchar tal afirmación salir de sus rojizos labios.

Deje de lado las cortinas sobré el lavadero, y me aproxime hacia la mocosa con una sonrisa resplandeciente.

La muy ingrata tuvo el descaro de dirigirme una mirada atemorizada, cuando percibió que me acerco a ella con la mano cerrada en un puño.

Sin importar nada más, me dedicó a impactar mi puño contra su cara, hasta ocasionar que varios hilos rojizos rueden por sus blandas mejillas.

L:- ¡LENI PARA!.

La voz de mi hermano se siente como un eco lejano, entre los constantes sollozos que provienen de mi desamparada víctima.

Estaba molesto por tener que soportar los berrinches de esta mocosa, pues me recuerda al sombrío tiempo en donde tenía que tolerar esa clase de comportamiento en cualquier persona.

L:- ¡¿QUE CARAJOS TE SUCEDE?!.

Repentinamente sentí un puñetazo en mi mejilla, ocasionando que al instante detenga mi placentera actividad y le dirija una mirada sorprendida a la persona que tengo al frente.