Adara Salvatore [tvd & to]

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Capítulo 22: paz

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-necesito que cierres los ojos y que no te enojes conmigo por la sorpresa que te preparé- rogo Ady mientras lo miraba fijamente a los ojos, se encontraba sentada a horcajadas sobre niklaus.

El poso sus manos en las caderas de ella y la miró con una sonrisa burlona- sabes que no puedo enojarme contigo- dijo simplemente.

-prométeme que no te enojarás y que no harás preguntas raras- ella aún seguía seria, lo cual hizo que nik la mirara de igual manera y asintiera.

-te prometo que no me enojare y no haré preguntas raras- ella suspiro aliviada y le dio un corto beso en los labios.

Nik lo siguió con gusto, y cuando se separaron de aquel tierno beso, él volvió a juntar sus labios con los de ella , volviendo aquello que comenzó como una demostración de amor y ternura, en algo apasionado, necesitado.

La intensidad del beso subía cada vez más, su lengua se abrió paso entre sus labios y ella lo aceptó gustosa. Posó sus delicadas manos sobre su pecho, acariciándolo, y descendiendo lentamente hasta el borde de su camisa, notando sobre la tela aquel firme abdomen, sin estar demasiado marcado, para Adara era la definición de perfección, aunque cualquier cosa mientras sea con nik sería perfecto para ella .

Él rápidamente captó su indirecta y con pesar, deshizo el beso para poder retirarse la prenda que cubría su torso. Ella pasó sus dedos sobre su delicada piel que ahora podía apreciar mejor, y una sonrisa se dibujó en su rostro al notar la manera en la que se estremecía bajo su tacto, el tacto de aquella mujer a la que amo durante un siglo entero y probablemente amaría hasta el final de sus días.

-quítamela- Ordenó señalando su remera negra gigante, cortesía del híbrido , y él obedeció, quitando lentamente la prenda, haciendo que Adara se desesperara cada vez más, quería sentirlo.

Rápidamente al no tener más la prenda que separaba sus pieles, ella volvió a besarlo de manera desesperada, mientras nik con una mano presionaba su trasero y con la otra la acercaba por la cintura, haciendo que ambos sintieran la calidez de niklaus y la piel fría de la Salvatore, contrastando de una manera en la que parecían complementarse el uno al otro.

Las manos del híbrido recorrieron su cuerpo, hasta llegar a los pantalones de su chica; se deshizo de ellos con un brusco tirón- eran nuevos imbecil- gruñó la menor, mientras él llenaba su cuello de húmedos besos , haciéndola por un segundo olvidar la ruptura de sus pantalones .

-te lo compensaré, lo prometo- susurro en su oído, haciéndola estremecer ante la sensación, ella en respuesta solo junto con desesperación sus labios y lo recostó sobre la cama, tirando con brusquedad los pantalones de el híbrido, sacando un gruñido de su garganta, mientras Adara sonreía triunfal- estamos a mano supongo- dijo entre dientes, sabía que era imposible discutir con ella.