Te extraño pero no puedo volverte a verte nunca.
¿Cuántas personas que queremos se han ido? ¿Cuántas veces hemos llorado por extrañarlas?¿Cuántas veces te has querido quitar la vida? ¿Cuántas veces la muerte ha hecho de las suyas?
Este libro son sol...
Nunca me habían dejado tener algún tipo de mascota, con 16 años no sabía la responsabilidad que era cuidar a otro ser aparte de mí.
Aquel lindo cachorro regordete de pelo café llegó a mis manos gracias a mi abuela, pues la pandemia nos había llevado a vivir en su casa en un pueblo donde pasaría que no pasaba la mano de dios, aquel lugar era completamente hermoso y mi casa enorme a comparación de la que estaba en la ciudad, tenía un patio enorme 3 jardines y un cuarto, si un cuarto para mí sola, eso era lo mejor.
La perra de mi abuela había tenido un cachorro, al que nombre Licenciado, la costumbre era de quién le ponía el nombre al perro se lo quedaba o bueno tenía la responsabilidad de cuidarlo, al final mi abuela me regaló el cachorro con la condición de que lo cuidara y durmiera afuera.
Aquel lindo perrito se convirtió en más que una mascota para mí ahora él era mi mejor amigo, y es que los momentos que pasaba no eran los mejores, emocionalmente cada día estaba peor lloraba todas las noches, salía y subía a la marquesina de mi casa a contemplar las estrellas por horas pidiendo fuerza para continuar y cada una de esas noches el se mantuvo a mi lado, incluso había días en los que se dormía en mi regazo.
Parecía que me abrazara cuando hacía eso, en ocasiones le contaba lo que sentía y el me lamía en forma de consuelo, suena tonto pero en esos momentos eso era lo que me mantenia feliz .
El vínculo que formamos parecía irrompible, parecía un perrito flojo que no le gustaba ir a ningún sitio pero a donde yo fuera el me acompañaba no importaba si hacía calor o no el iba conmigo y no se apartaba de mi lado, era a la única persona que obedecía.
Pero ¿Por qué se marchó tan de repente? No lo sé pero aquel 6 de mayo después de recibir tan horrible notica el fue el que me acompaño en mi noche de llanto, no contaba con que unos días después él enfermaría.
Pero parecías sano mi querido gordo, jugabas conmigo y me acompañabas a darle de comer a Milk y Poco, corríamos por la barranca sin parar ¿En qué momento enfermaste?¿Por qué no me di cuenta de que estabas mal? Solo se que el 11 de mayo dejaste este mundo.
Aquel momento en el que te tenía en mis brazos y gritaba desesperaba ayuda no sé me olvida, ni tus últimos suspiros en los que pensé que te estabas ahogando, te di RCP con la esperanza de que tu corazón volviera a latir pero no sucedió, no podía creerlo no quería hacerlo ese momento parecía una pesadilla. Me aferre a tu pequeño cuerpo bañada en llanto, mi hermano intento darme consuelo pero no podía, terminé de rodillas en el suelo llorando.
“Tienes la culpa no deberías ni llorar por el perro fue tu culpa que se muriera”
Las lindas palabras de consuelo de madre, ella no me ayudó cuando le pedí ayuda ni cuando le dije que te veías triste ahora me culpaba por tu muerte,pero solo tengo 16 años ¿Qué podía hacer? No soy veterinaria ni podía conducir una hora hasta Acatlán para buscar una, no pude hacer nada.
“ Perdóname licenciado por no a verte salvado, fue mi culpa, perdón por a ver sido una dueña tan mala, perdóname por no a ver sabido cuidarte”
Te pedí perdón de rodillas porque las palabras de mi madre me habían lastimado tanto que no podía dejar de pensar que era mi culpa, llore todo el día hasta que en la noche perdí la conciencia y me quedé dormida no comí por 3 días también me la pasaba encerrada en mi cuarto llorando porque me dolía tanto pero mi madre me obligó a salir y a comer porque si seguía así iba a terminar como el.
Hoy se cumplen 9 días de tu partida pero me sigue doliendo como en ese momento y es que no hay día en el que no llore pensando que fue mi culpa. Te extraño
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Siendo las 5:35 a.m escribí esto entre llantos y es que lo extraño mucho, no puedo dejar de llorar como aquel día y es que me duele aún, cada día me duele más, perdón mi Lic perdón.
•A mi nuevo angelito que me cuida desde el cielo a Mi Licenciado, mi gordo te amo y perdón.
