Hospital de Wilson. Carolina del Norte.
22 de Enero de 2018...
— Hola princesita. — Murmure entre lágrimas dejando un beso en su frente, ella se removió en los brazos de Líam y siguió durmiendo plácidamente. La luz del sol de colaba por la ventana y en la habitación, un aura de amor y tranquilidad impregnaba hasta el alma más rota.
— ¿Cuál es su nombre? — Preguntó una enfermera mientras veía como Líam le cantaba una canción de cuna. Sus padres sonrieron.
Pero aquí está, la reconstrucción de la cuál he oído hablar a mi mejor amiga.
Mis ojos se posaron en la recién nacida, tan pequeña, tan frágil, era una niña preciosa, tenía el cabello castaño, nariz respingada, mejillas regordetas y rosadas, su piel era tan blanca como una nube y sus ojos eran de un color avellana clarito. Sus manos eran tan pequeñas y a pesar de tener solo unas horas de nacida, ya nos había regalado pequeñas sonrisitas. Tenía un conjunto rosado tan pequeño y adorable.
La única razón por la que volví a este lugar, se encuentra ahora durmiendo plácidamente en los brazos del chico de mis sueños ante la atenta mirada de sus padres Sarah y Sebastián, y de Evans, a través de una videollamada.
— Su nombre es Abigail... Abigail Lawrence...
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Cuando deje de extrañarte
Short StoryAlice Rose es hermosa con sus vestidos de colores y su manera risueña de ver la vida. Lleva la marca de un acontecimiento traumático que aún no sana del todo y esta tontamente enamorada de un Baker. Va a la Universidad junto con su mejor amiga y cr...
