My Boys. [+18]

F O U R T E E N

No recuerdo con exactitud la última vez que duré tan poco tiempo molesta.

Quiero decir. Quizás fue cuando tenía alrededor de unos once años, luego de que mis padres no quisieran comprarme la máquina para hacer helado, pero que después todos fuimos por una paleta de dos sabores, por lo que me dio igual.

Bueno, esta vez fue mucho más corto que eso.

No había tenido tiempo para procesar lo de ambos chicos, a los cuales llamaba mejores amigos, cuando Punzie y Elena llegaron a mi con la perfecta idea de ir a conocer a su novio y a algunos amigos suyos luego de clases. Yo por supuesto dije que sí, pues de paso conocería a aquel chico estando sobria, o al menos hasta que alguna sacara una botella de alcohol y todo se fuera a la mierda.

Las tres habíamos quedado de acuerdo en que fuésemos luego de clases a reunirnos a uno de nuestros puntos especiales para esas ocasiones, el cual era un pequeño y algo abandonado parque a mitad de camino de donde quedaba el barrio de los "niños ricos" de la ciudad.

Al principio íbamos allí de pequeñas para fingir que estábamos en una historia de terror, y que los chicos eran los asesinos que debían cazarnos. Pero después, con la edad y El Paso de la madurez, comenzamos a usar ese lugar como un refugio del resto, pues nunca nadie iba allí, y quienes iban allí lo hacían luego de las dos de la mañana para vender drogas a chicos de nuestra edad o un tanto mayores.

Así que sí. Estuve molesta con los chicos, también me sentí completamente traicionada y sentí que todo mi cuerpo era una mierda por haberme dejado engañar de tal forma con ellos. Pero luego, cuando noté todas las demás oportunidades para hacer algo bueno con mi vida, dejé la pena de lado y usé mi furia para enfocarla en otro sitio. Y ese sitio era socializar, beber y divertirme.

Tengo diecisiete años al fin y al cabo. Tengo una vida entera para sufrir desamores, y esta "relación" que los tres teníamos, no iba a ser mi primer desamor. No iba a permitirme eso.

-... Entonces, Tadashi nos irá a dejar a casa de Elsa. De allí cogeremos el auto de su padre, nos arreglaremos un poco, compraremos unas botellas de alcohol e iremos a ver a Gabe.

Ambas asentimos ante lo que Elena nos comentaba, mientras que no muy lejos de mí, ambos chicos estaban sentado junto a nosotras, ya que Punzie los amenazó, obligándolos a sentarse aquí y actuar normales.

-. Mis padres no tuvieron problema con prestarme el auto, solo me pidieron que estuviese en casa a las diez, y que no lo rayara, por lo que Rapunzel no conducirá hoy.

-. ¡Oye! ¡Yo conduzco de maravilla!.- comenzó quejándose mi amiga, haciéndonos reír a ambas, antes de que la morocha le recordara la vez que hizo que el auto de una de sus tantas conquistas acabara en un estanque, y que luego todos huyéramos para que no nos culpara a nosotros.

Nunca volvimos a saber de él, y por lo que oí de las escuelas de ricos, fue suspendido por haber "conducido ebrio".

-. No puedo creer que sigan tirándome eso en cara. ¡Se lo merecía por intentar tocarme de más!.- La rubia se cruzó de brazos, viéndonos con fastidio.

-. Lo sabemos. Pero aún así, estabas ebria, y eso no borra la cantidades de rayones que haz hecho en el auto de Tadashi, o de Jack, o el de tu madre.- la molestó Jack, quién con ambas chicas parecía estar actuando muy bien.

-. Como sea. Solo no tarden al salir.- Se despidió de todos con un movimiento de dedos, antes de desaparecer por la puerta de la cafetería e irse a su siguiente clase.

No hice demasiado el resto de las clases. Copiaba lo que los profesores decían, luego hacía actividades que nos dejaban, y también me pasé todo un receso buscando libros en la biblioteca. Un día aburrido, pero productivo para mi educación.