V.IV

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En cuanto llegó al club escuchó gritos y pasos, no lo comprendió hasta que estuvo en la puerta y pudo ver a Vernon, Seungcheol y Mingyu alrededor de algo que ocultaban con sus cuerpos. Ah, Soonyoung también estaba ahí, viéndose tan pálido que sus ojeras se marcaban oscuras, pero tenía una expresión de asco en el rostro que lo hacía verse más vivo que los días anteriores.

Soonyoung se había ido una semana y aunque sabían que regresaba ese día no esperaban verlo en el club, menos de esa manera.

—¡Es asqueroso! —Gritó Vernon mientras daba brincos lejos del centro. —¡Seungcheol pisaló, pisaló!

Seungcheol no lo pisó, tan solo se alejó de la misma manera que Vernon. Se acercó con curiosidad y todos se apartaron para que pudiera ver.

—Es una babosa. —Explicó Mingyu antes de que pudiera verlo.

WonWoo miró a la pequeña babosa que se mantenía quieta en el suelo, tenía un color extraño y más parecía una larva asquerosa a que un animal ya formado. Levantó su rostro para encarar a los demás y estos solo hicieron una mueca desagradable. Después miró a Soonyoung.

—Vómito eso. —Explicó Seungcheol. —No se dónde mierda se lo tragó, pero tan pronto entró lo escupió como si fuera vomito... Esa cosa estaba adentro.

—Es asqueroso. —Dijo Mingyu acercándose con curiosidad. —Soonyoung ¿Seguro que estás bien?

—Estoy bien... —Balbuceó Soonyoung. —Dios, tenía eso en la garganta desde el avión... Ni siquiera sé cómo llego ahí...

—¡Te dije que no comieras nada raro en tu viaje! —Gritó Vernon.

—No comí nada... —Soonyoung se sentó, viéndose terriblemente mal, pero por fin parecía una persona de nuevo. —Estos días han sido tan raros...  Esa chica me besó, después me sentí como una basura y después... Era como si mi cuerpo se moviera solo, solo era capaz de ver lo que sucedía, pero no podía hacer nada... ¡Incluso casi me ahogo en el mar gracias a eso! Creo que tomé demasiada agua del mar... Por suerte estoy vivo.

La babosa comenzó a moverse y Seungcheol soltó un grito tan fuerte que sonó en toda la habitación, Vernon lo tomó y lo jaló lejos para que el animal dejará de acercarse. Mingyu también saltó, lo hizo de forma recta para quedar de lado de WonWoo y apartarlo de ahí. Nadie quería ser tocado por esa cosa, ni siquiera Soonyoung quien levantó los pies.

Cuando el animal dejó de moverse todo quedó en silencio. Y casi de la nada este se puso de otro color y se encogió, como si estuviera secándose.

—¿Qué demonios? —Preguntó Mingyu  apartándose un poco para  mirarlo de cerca. —Creo que está muerto...

—¿Soonyoung lo mató? —Preguntó Seungcheol inclinándose. —Se lo tragó y escupió después de todo...

—Creo que esa cosa estaba matando a Soonyoung. —Murmuró WonWoo apartándose de la supuesta babosa. —No creo que sea el único.

PARÁSITO -Meanie-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora