MÍRAME
—Buenos días, Nish —la voz de Max resuena en alguna parte de la habitación. No puedo verlo porque aún tengo mis ojos cerrados, aún tengo un poco de sueño. —Vamos, despierta.
Me removí en la cama mientras ponía la almohada en mi cara.
—Recuerda que tenemos que salir —insistió. Me restregué los ojos y lo miré, estaba sentado en el borde de mi cama. Su cabello estaba despeinado dándole un aire súper tierno a Max, eso hizo que mi corazón diera un vuelco y ni siquiera sabía por qué.
Me senté en la cama, bostezando.
—Es muy temprano, Max —lo miré fijamente— Las ocho de la mañana.
—Por alguna razón no tengo sueño —se puso de pie, caminando de un lado a otro. Parecía inquieto—Estoy muy pensativo últimamente: ¿quién se llevó mi cuerpo, Nish? ¿Y quién me mató? No lo entiendo. Siento que no avanzamos nada.
—Max, no digas eso, ¿okay? Hemos avanzado bastante.
Salí de la cama y me puse de pie para consolar un poco a Max, la luz del sol se colaba por mi ventana.
—¿Lo averiguaremos? —me preguntó.
—Por supuesto que sí. Yo te lo prometo —lo abracé, dándole a entender de que yo estaba ahí para él y que no estaba solo. Quizás él se sentía perdido o algo así, pero yo jamás lo dejaré solo con todo esto. Max me abrazó también, si alguien me viera en esta posición estoy segura de que causaría mucho revuelo y que pensarían que definitivamente me había vuelto loca.
Cuando me separé lentamente de él, nos quedamos viendo un momento fijamente a los ojos. Fue un poco incómodo.
—Iré al baño —me separé, sintiéndome nerviosa ya.
—Claro, estaré abajo. Creo que tu madre se fue a trabajar.
Carraspeé.
—Está bien —hasta cuando me metí al baño pude soltar el aire que tenía contenido, lo que había pasado había resultado extraño y nuevo para mí. Me quité la ropa y me metí a bañar.
•
Cuando me vestí y estuve lista para desayunar algo, salí de mi habitación y bajé las escaleras. Max estaba sentado en el sofá viendo la televisión.
—¿Cómo la encendiste? —quise saber.
—Accidentalmente me senté en el control y se encendió sola —sonrió satisfecho.
—Iré a la cocina —anuncié, yéndome de allí. En la cocina ya estaba listo todo, así que tomé un plato, vertí algo de comida para después tomar una taza y servirme algo de café. Salí de la cocina y me dirigí a la sala, sentándome a la par de Max.
—Solo termino de comer y nos vamos —le hice saber.
—Está bien, igual no sé bien por qué vamos donde Wanda, ¿crees que nos sirva de algo?
—No lo sé —di un sorbo a mi café— Pero tengo un leve presentimiento de que ella nos puede ayudar.
—Wanda está loca, Nish, ¿cómo puede ayudarnos una loca? —casi rió.
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La misteriosa muerte de Max ✔️
Mystère / ThrillerNisha es una universitaria de diecinueve años fanática de las novelas románticas. Cuando su compañero de clases, Max Stuart, aparece muerto en una habitación sombría con una bala en su frente, todo empieza a empeorar. Había sido un suicidio ya que...