Intruso en el amor [sakura shaoran]

cap 33 una voz desconocida

*en la casa kinomoto*

Al despertar de una pequeña siesta antes de ir a la escuela, veo que no hay nadie en casa, Luis había dicho que iba a preparar el desayuno pero no hay absolutamente nada, ni en la cocina, ni el baño, ni los diferentes cuartos, así que supuse que había salido.

- supongo que ya volverá- Dije subiendo a mí cuarto para ponerme el uniforme, cuan De repente se escucha un ruido en la entrada de la casa, yo estaba en mí habitación cambiándome, así que supuse que era Luis- ¿Luis ya volviste?- No hubo respuesta alguna pero lo tome como un si- ¿A donde fuiste? Tienes que prepárate, yo saldré para la escuela en un rato, ¿vendrás conmigo cierto?- Luis no contestaba pero se escuchaban pasos en las escaleras, por lo que me puse un poco nerviosa- Oye... Luis, ¿Estás bien? ¿Porque no contestas? .... ¿Luis?

- Luis esto, Luis el otro, me preguntó quién será ese tal Luis melonsito Al escuchar esa vos completamente desconcida que poco a poco se acercaba a mí cuarto, los pelos de mí espalda se erizaron Completamente y un impulso de esconderme se apoderó de mí, por lo que deje el pijama en el suelo y a medio vestirme me escondí debajo de la cama- estuve viendo que no hay nadie en casa, será que te abandonaron y se fueron sin ti?- se escucha el sonido de la puerta y desde abajo de la cama se ven unos sapatos marrones con una pinta de demacrados que iban entrando a la habitación- parece que llegue en buen momento verdad?- dijo agarrado la ropa que deje tirada- no tendré que molestarme por la ropa.... Ya veo, quieres jugar a las escondidas? Creí que serías más madura melonsito- dijo caminando por toda la aviación- veamos aquí- se dirigió a mi placar, cuando lo abrió se puso a revisar detalladamente, percha por percha- que mal, no estás aquí, pero eso solo me dice exactamente donde estas- se dirigió a la cama rápidamente y se sentó en ella- quieres salir por tu cuenta? No quiero hacerte mal, si te fuerzo de seguro te terminaré lastimando así que antes de que llegue a 3 tienes que salir de allí abajo, entendido?.... 1.

Aunque no me Trevi a hablar mi mente era un destellar de pensamientos.
está completamente loco, no saldría ni aunque me costará la vida.

- 2.

Pero si no salgo el se enojara verdad? Debería salir y buscar una manera de escapar. Aaah luiiiis donde te metiste. Maldita seaaaa .

- veo que no tienes intenciones de salir- dijo parándose de la cama y arrodillándose- 3- de un golpe al pestañear su cara apareció frente a mi, tenia un aspecto sucio, parecía aver estado trabajando con semento y tierra, se me hacía haberlo visto días atrás, pero no sé cuándo ni dónde- melonsito, porque tanto miedo, no somos desconocidos cierto?- agarró mi mano y empezó a hablarme sacándome de abajo de la cama.

- suelte me, aléjese no me toque- dije forcejeando para escaparme, pero era inútil, tenía tanta fuerza, el brazo del que me agarró ya estaba rojo de la fuerza con la que lo sostenía.

- quédate quieta, hazme las cosas fáciles cariño- dijo agarrando mi otro brazo y apoyándolo contra el suelo.

- que cre que hace!... Que le da el derecho de entrar en mi casa así y tratarme así, quién diablos es usted y que es lo que quiere.... Vallace a la mierda- aunque tenía una idea de que Es lo que quería mi intención no era más que querér distraerlo hasta el momento en el que alguien llegue.

- melonsito, no me recuerdas? Tan fácil soy de olvidar?

- yo no lo conozco, suelteme ahora mismo.

- ya veo, parece que aquello no fue nada para ti, parece que no fuera tu primera vez, tendré que refrescarte la memoria- dijo levantándome en un milecima y apoyándome contra una pared- sabes la primera vez que te vi estabas saliendo de la escuela, pasate por dónde estaba trabajando, yo te hablé y tú me miraste, compartimos miradas y luego te fuiste, desde ese día, desde eso momento, no e podido olvidar tu bello rostro, y tú has pasado una y otra vez por allí, aún así te atreves a olvidarme?- dijo pegando se a mi y comenzando a pasar su asquerosa mano por mi espalda, de repente siento como sus labios empiezan a besar mi cuello, era asqueroso, tan repugnante- sabes, en una ocasión hasta te toque, y aún así no dijiste nada.