El Inicio De Todo

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Narra Atenea

Bueno mi vida nunca fue color de rosa y tampoco ha sido la mas normal debo admitirlo pero lo que me ha estado pasando últimamente esta sobrepasando lo que creí que era peor.

Mis padres nunca fueron las personas más ejemplares ni tampoco eran cariños al menos conmigo nunca lo fueron, realmente jamás entendí cual era la razón de su odio hacia mi y aquello será un misterio pues nunca podré preguntarles.

¿Por qué? muy simple hace unos seis días mis padres, mi hermana, hermano y yo tuvimos un accidente donde solo yo sobreviví.

Eso fue un golpe duro, pues a pesar de que nunca me sentí tan incluida eran mi familia, sobre todo mi hermano la persona a quien más admiración le tenía era tan solo 2 años mayor que yo siempre compartíamos las cosas.

Ahora mismo no se que será de mi, soy menor de edad y no tengo ningún familiar pues en la familia siempre han fallecido a temprana edad todos.

Mis sueños, esos estúpidos sueños me han estado atormentando durante toda mi vida pero estos fueron aumentando luego del estúpido accidente.

Escuche algunos pasos y voces un dato interesante, por alguna razón extraña soy capaz de escuchar los ruidos a mi alrededor, tomé dos tijeras que usaba cuando diseñaba mi ropa y me acerque a la puerta de mi habitación abriéndola lentamente sin hacer ningún ruido, baje las escaleras y pude ver a una chica y a un señor lance una de las tijeras cerca de la cabeza del señor, eso llamó su atención y fue entonces cuando me di cuenta que llevaba una ballesta, ¿Qué era esto? ¿Acaso tenía que sacar mis mejores armas?

Nea. Creanme la próxima vez no fallare- dije en un tono serio

-Aún te cabe duda de que no sea ella- pregunto la chica el hombre ladeo su cabeza con una mueca.

-Si bueno tiene el temperamento- comentó, al ver que me ignoraron decidi volver a hablar.

Nea. ¿Quiénes son ustedes y como entraron? - pregunte esta vez sin bajar la otra tijera.

-Mi nombre es Alaric Saltzman y soy el director de la escuela Salvatore- dijo como si fuera lo más obvio del mundo.

Nea. Pues yo nunca he oído hablar de esa escuela- y eso era real nunca había escuchado hablar sobre esa escuela tal vez se debía a que siempre fui al mismo colegio religioso.

Alaric. Escucha lo que te ha pasado últimamente, el accidente de tu familia no se te hace extraño- el tono que uso no me gusto mucho.

Nea. No es de tu incumbencia el accidente de mi familia a no ser que seas un investigador lo cual dudo porque entraron a mi casa allanadola.

Alaric. Lo que pase contigo es de mi incumbencia- yo me reí.

Nea. Si claro- dije irónicamente.

Alaric. Que tal tus sueños- en cuanto dijo aquello me tenes, la chica a su lado tocó su frente-¿tienes sueños extraños cierto?- no conteste- sueños donde las personas mueren...o más bien vampiros mueren.

Nea. ¿Cómo sabes eso? - pregunte si bien no sabía quién eran esas personas me perturbaba el hecho de que supieran sobre mis sueños.

Alaric. Tal vez esto suena raro pero todo los seres sobrenaturales existen- parpadé varias veces ¿Qué fue lo que dijo?

Nea. Eso es imposible - apenas pude articular.

Alaric. Nada es imposible la escuela Salvatore es un lugar donde hay chicos como tu, nosotros te podemos ayudar con lo que te pasa, con tus sueños- muy bien demasiada información

Nea. No quiero su ayuda- conteste.

-Realmente quieres ser una Cazadora y una asesina de brujas- mire a la chica, vaya que tiene hagallas y vaya que es linda.

Nea. Suponiendo que aceptó su ayuda que pasara con las personas de trabajo social, pensaran que huí.

Alaric. No debes preocuparte yo me puedo encargar de ello- mire a la chica durante unos segundos, ella no había hablado mucho pero parecía ser más sincera, sin encontrar un rastro que me dijera que mentian me di la vuelta.

Nea. Iré por mis cosas- dije comenzando a subir por las escaleras.

Sin más Alaric y la chica la cual no se su nombre salieron comenze a guardar mis cosas esa chica se me hacia muy familiar, estoy segura de que la he visto en algún lugar. Cuando termine de empacar lo esencial cerré mi maleta y tomé mi mochila salí y vi a Alaric y a la chica ya arriba del auto así que me subí.

Alaric. ¿Todo listo? -yo asentí-muy bien vámonos- subio mi maleta en la cajuela y me subía al auto, como la chica que venía a mi lado parecía callada decidí preguntarle su nombre.

Nea. Y tu... ¿Cómo te llamas? - ella me miró con una pequeña sonrisa.

-Me llamo Hope- comtesto

Nea. Supongo que tu también eres un ser sobrenatural-hope asiente con la cabeza-entonces que eres

Hope:Bueno soy una trihibrida-yo abro los hijos de par en par sorprendida nunca había escuchado sobre algo así- soy una combinación de mi lobo, bruja y la otra es un vampiro inactivo.

Nea. Wow bueno Hope me has sorprendido.

Hope sonríe y yo le devuelvo el gesto después todo callo en un silencio derepente comienzo a cerrar mis ojos y caigo en un sueño profundo.

Abrí los ojos y me encontré en un bosque con muchísimos pinos, esta nublado y no había nadie más que yo, eso hasta  que escuche una voz.

Hola mami - me sobresalte.

¿Quien eres? - pregunte

Tranquila no tienes nada de que preocuparte ¿De donde vienes ahora?-Yo la mire se parecía a mi aunque tenía uno que otro rasgo muy hermoso que no era mío.

Vengo de mi casa- conteste

Oh no apenas sucedió el accidente donde estabas verdad-yo asentí-bueno supongo que tendré que esperar más adiós mami te amo cuidate.

Oye oye espera-ya era demasiado tarde había desaparecido

Hope. Atenea despierta ya llegamos - Abrí los ojos encontrándome con los de Hope ella era muy linda me emderece y pude observar que nos encontramos llegando a un hermoso lugar como una mansión.

Alaric. Bienvenida a la Escuela Salvatore-me dijo con una sonrisa. Bueno esta aventura será interesante supongo.

Una Salvatore Y Una Mikaelson Donde viven las historias. Descúbrelo ahora