No es sólo un sueño (Aome x Hypnos)

Capitulo 13

Para ella era agradable estar en los Elíseos, aunque también sabía que tenía que reunir los fragmentos de la perla.
Había hablado con Hypnos, pero este se había negado a dejarla ir, no por no permitirle cumplir con reunir los fragmentos, sino por mantenerla a salvo a ella y a su hijo.

Aome: Thanatos...
Thanatos: No Aome, no le voy a decir que te deje ir.
Aome: Podrías venir conmigo y así Hypnos, el señor Hades y tú se quedan más tranquilos.
Thanatos: Tendría que convivir con los mortales y los odio - dijo y después se arrepintió pues Aome era mortal - pero tú eres la excepción cuñada, tu si me agradas.
Aome: Por favor!
Hypnos: Aunque convenzas a Thanatos la respuesta sigue siendo no. - dijo mientras entraba al comedor - es peligroso si ese sujeto se entera de tu embarazo. Deja que te cuidemos.

........

Las ninfas se encargaban de cuidar de ella y de su embarazo, y si sus cuentas no fallaban, estaba entrando en el primer mes de este.
Después de convencer a Hypnos de dejarla ir para por lo menos ver a Shippo, el dios del sueño accedió a llevarla con sus amigos.

Sango: Aome! (Abrazandola)
Miroku: Señorita Aome!
Shippo: Aomecita!
Aome: Hola chicos! (Emocionada)
Kykyo: Cómo estás Aome? (Acercandose)
Aome: Estoy bien. - dijo mientras alzaba a Shippo - gracias por preocuparte.

Estuvo un rato hablando con sus amigos y les dijo que era verdad que estaba embarazada, y qie Hypnos la cuidaba bastante bien, incluyendo a Thanatos, quien le hacía compañía cuando el dios del sueño se encontraba ocupado.

Kykyo: Inuyasha ha estado un poco decaído.
Sango: Y de mal humor.
Miroku: Él dice que no le importa que usted se haya ido, pero demuestra lo contrario.
Aome: En dónde está? (Curiosa)
Kykyo: En cuánto percibió tu olor aquí en la aldea, él se fue al árbol sagrado.
Aome: Podría ir a...
Sango: Primero vamos con la anciana Kaede para comer algo, recuerda que el señor Hypnos dijo que debías comer a tus horas.

La anciana Kaede la había revisado, la felicito y le dijo que todo estaba en orden.
Hypnos le había dicho que podía estar ahí todo el día y al atardecer iría por ella.

Cuando terminaron de comer, Aome salió sin llamar la atención y se dirigió al árbol sagrado, Inuyasha al verla ir hacia él, únicamente le dedicó una mirada, no sabía si era de enojo o decepción y luego se fue sin siquiera dirigirle la palabra.

Se sentó a los pies del árbol sagrado y no pudo evitar derramar algunas lágrimas, pues le lastimaba la actitud de Inuyasha con ella, eso y que el embarazo la estaba comenzando a poner sensible.

Naraku: Así que apareciste otra vez. - dijo mientras salía de la nada - y sóla!
Aome: Naraku! (Asustada)
Naraku: Pero que es ese olor? - preguntó de manera burlona acercandose a ella - a caso estás embarazada?

Intento acercarse a ella, y no supo si fue ella o el bebé.
Pero libero bastante reiki haciendo que Naraku se alejara bastante y resultará con quemaduras.

Naraku: Te mataré y así ni tu ni tu bastardo serán un estorbo para mí!

Estaba totalmente desarmada y lo único que podía hacer era liberar Reiki para alejar a Naraku y al mismo tiempo hacer un campo de energía para protegerse a ella y a su hijo.

Inuyasha y Kykyo se dieron cuenta de que el poder de Aome estaba empezando a descontrolarse, y de inmediato se dieron cuenta de que estaba acompañada de Naraku.
Inuyasha se estaba comenzando a lamentar por haberla ignorado, probablemente si hubiera hablado con ella, Naraku no habría llegado y no la habría atacado.

Aome: Ya basta Naraku! (Asustada)

No podía pelear, si salía de ese escudo que ella misma había creado era como dejarle más fácil las cosas a Naraku, y no podía hacerlo, por ella y por su hijo.

Sin embargo, un dolor agudo comenzó a clavarse en su vientre, sabía que si seguía forzando sus poderes, el resultado sería malo, muy malo.
Cuando deshizo la barrera, cayó de rodillas, justo en ese momento llegaron Inuyasha y sus amigos, pero Kykyo los tuvo que encerrar en un campo de energía, pues Aome libero bastante reiki, y este salió como si de una explosión se tratará.

Ahí estaba ella, desprotegida por breves segundos.
Inuyasha salió del campo de energía, se puso justo frente a Aome dispuesto a regresar el ataque de Naraku, pero algo paso, pues Hypnos había llegado justo para detener con sus propias manos ese ataque.

Hypnos: Que pretendes hacer? - pregunto con enojo - mejor dicho... Espero que mi mujer no tenga algún rasguño, de lo contrario estarás muerto.
Naraku: Muévete estorbo!
Hypnos: Estorbo?

Lo atacó sin más. Le dió un golpe que lo arrojo varios metros hacia adelante, y no, no estaba usando su cosmos, lo estaba golpeando pues necesitaba dejarle en claro que con Aome no debía meterse, hasta que escucho un quejido de dolor proveniente de la azabache, fue entonces que lanzo un hechizo sobre Naraku, lo atormentaria en sus sueños en el momento que el quisiera.

Inuyasha: A dónde la llevas? - pregunto con enojo al ver que se llevaba a Aome - no estás viendo que se siente mal?
Hypnos: La llevaré a qué la atiendan.

Sin más, se marchó de ahí y regresaron a los campos Elíseos.
Encontró a su hermano Thanatos bebiendo té en compañía del dios Hades, quienes al ver el estado de Aome, de inmediato mandaron llamar a Aclespios, el dios de la medicina y la curación.

2 horas después

Hypnos: Cómo está?
Aclespios: Ella y el bebé están bien. - hablo con un poco de seriedad - puedo preguntar qué hace una sacerdotisa aquí?
Hades: No puedes! - respondió con autoridad - no le afecta a nadie que ella esté aquí.
Aclespios: Quién es el padre?

Thanatos y el dios Hades miraron a Hypnos, dando a entender que él era el padre del bebé de Aome, Aclespios sólo suspiro y les dijo que no dejarán que Zeus o alguien más se enterara, pues el estado de Aome era delicado de momento.

Aclespios: No me lo están pidiendo, pero... Afrodita podría ayudarlos.
Hades: Lo sabemos, puedes retirarte.

Con Aome

Hypnos: Te sientes bien?
Aome: Tranquilo, estamos bien. (Sonriendo)
Hypnos: Por eso no quería que fueras.
Aome: Tranquilo, ya pasó. Llegaste justo a tiempo.
Hypnos: Thanatos fue a ajustar cuentas con él.
Aome: Thanatos? (Sorprendida)
Hypnos: Le pidió autorización al señor Hades y él accedió, está bastante molesto. Que fue lo que pasó?
Aome: Fui a caminar y él... Salió de la nada y me atacó pero antes dijo que nos mataría para que no fuéramos un estorbo.
Hypnos: Descansa. - dijo y beso si frente - duerme un poco y más tarde vendré a verte, tengo algo que hacer.

Salió de la habitación que compartía con ella y decidió seguir a su hermano, lo encontró justo antes de llegar con Naraku.
No lo matarían, sería como un premio para él, pero le dejarían claro que con un dios no se podía meter, menos con quiénes les importaban.

Thanatos: Tu debes ser Naraku. - hablo a sus espaldas - o me equivoco? (Sonriéndo)
Naraku: Que demonios...
Hypnos: Ajustaremos cuentas Naraku. - dijo mientras aparecía frente a él - comencemos por lo que le hiciste hoy a mi mujer.

Iba a publicar esto ayer pero... Me fui de shopping con mi ahijada y me compré dos libros, decidí comenzar a leer uno de ellos y... Ya mejor ni les cuento pues ya se imaginarán lo que pasó.