16.- Una grata visión

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Los agudos ojos de Varasloth observaban detenidamente a los cuatro candidatos

Sin esfuerzo, la bestia dio un paso hacia el vació y cayó desde lo alto de la cabeza de la serpiente, produciendo un gran estruendo. Su descenso había producido un cráter en el suelo, evidenciando su dominante fuerza.

—Empecemos— rugió Varasloth. Avanzando sin mayor preámbulo contra el equipo humano.

Brody, Damon y Rina se encontraban exhaustos ante el constante y repetitivo asedio que habían sufrido hace unos momentos por culpa de Elmoth, por lo que la espantosa velocidad con la que Varasloth ingresó a su rango de reacción los tomó desprevenidos.

Rápidamente la cola de Varasloth se dividió en tres filosa secciones como si de dagas se tratasen y girando en el aire a gran velocidad se convirtió en una tormenta de cuchillas profiriendo al equipo humano diferentes heridas en todos sus cuerpos.

Elmoth, pareció inicialmente intrigado ante el nuevo contrincante presentado, más al ver que este había optado por ignorarlo, enfurecido levantó su colosal espada e intentó cortarlo por la mitad.

Sin embargo, para su sorpresa, Varasloth con sus dos musculosos brazos, haciendo muestra de una fuerza titánica sostuvo inmediatamente la hoja de la enorme espada mientras las tres secciones de su cola finalmente salían ferozmente disparadas y se incrustaban en las costillas de los tres integrantes del equipo humano, levantándolos como si de brochetas se tratasen.

En sus ojos, solo odio y repudio contra Varasloth se podía presenciar. Más su precaria situación los obligaba a permanecer en silencio,no obstante, la única excepción a ello, era Rina cuya mente resquebrajada, le impedía pensar con total racionalidad, por lo que empezó a proferir insultos contra Varasloth y a gritar en un espiral de demencia abismal.

Elmoth impactado por la letalidad que su nuevo adversario presentaba, retiró su espada y saltó hacía atrás tomando espacio para abalanzarse cuando escuchó a Varasloth comentar calmadamente —Espera un momento, déjame encargarme de estos tres y podremos pelear sin interrupciones.—

El demonio real pareció confundido, más vio sinceridad en los ojos y palabras de Varasloth por lo que asintió, retirándose a unos metros a tomar descanso, optando por confiar en su promesa.

El curioso desenlace hizo tambalear los corazones de Damon y Brody, quienes en el fondo esperaban que la confrontación entre los dos demonios les permitiese crear una ventana en la situación para lograr escapar.

Varasloth colgó a la fuerza en un árbol a los tres humanos boca abajo, luego se arrodilló y con sus filosas garras arrancó del suelo un puñado de tierra sucia y la introdujo en la boca de Brody, y acercándose a su oído le susurró diabólicamente, —Si la escupes, te la volveré a meter, pero esta vez tendrás que tragártela.—

Los ojos del mago humano se entrecerraron de furia, más no escupió el contenido de su boca, debía soportar temporalmente la humillación en afán de sobrevivir.

Con Damon el proceso fue más sencillo, era evidente que el hombre se adaptaba mejor a las situaciones denigrantes.

Sin embargo, Rina era un caso diferente, la locura que emanaba, así como el aura de muerte que ahora poseía le imposibilitaba mantener la cordura suficiente para acatar la orden de Varasloth.

El cazador observó intrigado por un momento a Rina, luego volteó a interrogar a sus compañeros, —¿Ella no era humana hace unos días?— preguntó curiosamente.

Brody y Damon se miraron desconcertados y luego miraron a Varasloth sin decir nada. Era claro que esperaban su permiso para escupir la tierra y hablar.

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