Los hermanos Minerva-Ratri

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James estaba tranquilamente en su cuarto haciendo su tarea.

Realmente no era tan difícil , al menos para él ; después de todo era solo compuestos químicos binarios, tablas de verdad y movimiento rectilíneo uniformemente variado.

Bastante fácil , y eso que él estaba acostumbrado a tareas más complejas.

Así que no le faltaba mucho para terminar , estaba sentando en el escritorio de su cuarto.

- James - el pequeño Peter asomó su cabeza por la puerta.

Su mamá estaba ocupada con asuntos de la empresa y tuvo que irse corriendo, su padre estaba trabajando; así que James y Peter estaban solos con mayordomos y sirvientas.

-¿ Pasa algo Peter ?- preguntó James desviando su cabeza de su tarea.

-¿ Puedo comer tus oreos ?- preguntó el menor tranquilamente - yo ya no tengo.....

- ¿ Sabes dónde están ?- James estaba bastante calmado, al verlo negar con la cabeza - sí puedes comerlas ,están en el cajón de abajo pegado a la puerta.

- siiiii - Peter estaba por irse a por las oreos.

Total le podría haber dicho que no , pero realmente no es como si darle galletas fuera algo tan malo.

¿ Por qué había dicho "tus oreo" y "yo ya no tengo" ?, Para evitar discusiones por dulces ; cada uno tiene un cajón con sus propias golosinas por separado.

Hay cosas en el cajón de Peter que a James no le gustas y viceversa, no hay nada de malo en eso realmente.

Enseña que no pueden agarrar lo del otro , al menos no sin permiso.

Claro seguramente es cosa de ricos, total la familia Ratri es millonaria.

El pequeño Peter fue hasta la cocina, no antes don perderse y un mayordomo lo tuvo que ayudar a encontrar la cocina por su cuenta.

Solo para agarrar la caja de oreo de su hermano y regresar a su cuarto.

Porque claro el camino de la cocina a su cuarto es más fácil , que al revés, al menos eso parece ser el razonamiento lógico de Peter.

- siiii oreo - Peter se sento en el piso para sacar de la caja , la bolsa y abrirla como un paquete de pañuelos para poder agarrar una.

Y en ese momento escuchó un pequeño ruidito proveniente de la jaula de su mascota.

Sí su ratóncita mascota quería oreo también , pero claro él no le iba a dar.

- no te voy a dar - le dijo para abrir la oreo y comer la crema primero - los ratones no pueden comer galletas.

Unos cuantos minutos después , James había acabado su tarea e iba a la cocina, para comer un bocadillo, osea que va por unas cuantas oreo.

Porque claro le había dicho a su hermano que podía comer oreo , no que podía comérselas todo; hay mucho diferencia en eso.

Fue a la cocina tranquilamente, y abrió su cajón para agarrar su paquete de galletas, donde estaba bastante pesado , solo confirmaba que Peter no se las había comido todas.

Así que procedió abrir su paquete tranquilamente y agarró una galleta sin ver , porque después de abrir el paquete se estaba sirviendo un vaso de leche.

Obvio para el mágico y ancestral ritual de meter la galleta.

El preadolescentes albino se encontraba metiendo la galleta en la leche para después morderla y darse cuenta que a la galleta le faltaba algo.