¡Ayuda!

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-¿Dónde esta mi muñeca? Fue lo primero que dijo Kelly cuando el sol salió, Arturo despertó a un lado de su cama adolorido por la mala noche que había tenido, sabrá Dios como es que habían logrado dormirse.

-Iré a buscarla cariño, dijo Martha quién salió corriendo al sótano.

-Mi niña, ¿Ya te sientes bien?

-Si Lupe...

-Kelly, por favor perdón hija, perdón por haberte pegado yo...

-Aquí esta la muñeca mi cielo.

-Gracias mamá, déjenme sola.

-Pero hija...

Martha jaló el brazo de Arturo y lo llevó a él fuera de la habitación, Lupe apenas podía caminar y Martha le ayudó a ponerse de pie, la puerta de la habitación se cerró dejando a Kelly a solas como ella había querido.

Kelly no sabía que le había pasado, jaló la cuerda de la muñeca para que le dijera algo acerca de lo que había pasado ayer.

-Te quiero, eres la mejor amiga.

-Mary Anne, háblame.

-Seremos amigas hasta el fín.

-¡Mary Anne! ¿Que me pasó ayer? ¡Contéstame!

-Te quiero, eres la mejor amiga.

Furiosa, Kelly arrojó a la muñeca y se puso a llorar, no recordaba nada sólo recordó a su padre golpearla una y otra vez, estaba aterrorizada algo no estaba bien, nisiquiera sabía porque le había pegado, pero mientras lo hacía su padre le había dicho cosas horribles y eso la hacía llorar...

Mientras tanto Martha hacía el café, Lupe estaba recostada en su habitación aún adolorida por la caída de ayer, Arturo estaba sentado con la mirada perdida, sus ojeras eran profundas y se sentía más que culpable, tal vez su irá había desencadenado este horrible comportamiento en Kelly.

-Toma el café cariño, te hará sentir mejor, yo le haré el desayuno a Kelly y se lo llevaré a su habitación.

-Gracias Martha, la verdad quiero recostarme, estoy muy cansado y me siento muy mal por lo de aye.

-Cariño ya no pienses en eso, ojalá hoy Kelly se sienta mejor.

-Ojalá...

Martha subió con los deliciosos panques que le llevaba a Kelly, Arturo tomaba despacio su café y su cabeza le comenzaba a dolor, de pronto un sonido perturbador lo alteró por completo, era el sonido de los platos callendose seguido de un grito de su esposa, subió hasta la habitación de Kelly en fracción de segundos y encontró a Kelly atacando a Martha sin piedad, había vidrios en el suelo y Martha estaba sobre ellos tratando de quitarse a Kelly de encima, Arturo tomó en sus brazos a Kelly y esta gritaba y gritaba diciendo cosas sin sentido, hablaba en un idioma que ellos no podían entender, Lupe ignoró el dolor en su cuerpo y corrió a ver que pasaba, llevaba consigo un poco de agua bendita y se la lanzó a Kelly, esta gritó y se quedó totalmente indefensa dándole la oportunidad a Arturo de ponerla en la cama y socorrer a Martha, Kelly se retorcia como si algo le doliera y Lupe se sentía impotente sin saber que hacer, encerraron a Kelly y Arturo se llevó a su esposa.

-¿Te encuentras bien?

-Si yo, estoy bien.

-¿No tienes vidrios en tu cuerpo?

-No, sólo algunos rasguños de Kelly.

-¿Que fue lo que paso?

-Es que entré a la habitación y ella estaba en un rincón de la habitación y estaba rascando el suelo con sus uñas, me le acerqué para ver que le pasaba y fue cuando arrojó la charola con los platos y comenzó a atacarme, esa no era mi hija Arturo, algo malo le pasa a mi niña y debemos buscar ayuda.

¡Maldita Muñeca! #Wattys2015Donde viven las historias. Descúbrelo ahora