Lucas Carrol

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Era de noche y Gertrudis dormía, Mike se levantó con la intención de ir a sacar la caja del sótano y tirar lejos a la muñeca, no le importaba si alguien la encontraba, lo único que quería era deshacerse de esa molestia. Bajó hasta el sótano y de noche era más aterrador, apenas entraba un poco de luz nocturna en la pequeña ventana, el olor a humedad y moho era desagradable, encendió la luz y se dispuso a buscar a la muñeca, quitaba las cajas y luego la puerta se cerró, asustado fue inmediatamente a tratar de abrir pero no pudo, no podía haber sido el viento, bajó de nuevo sin rendirse y se acercó a las cajas pero una oscuridad infernal comenzó a formarse, parecía una neblina de humo negra con tentáculos que se expandian por todo el sótano, Poly no iba a permitir que la desecharan, Mike comenzó a temblar y entonces una dulce voz le hizo alegrarse.

-¡Mike! Gritó Gertrudis quien había bajado a buscarlo.

-¡Aquí estoy!

Mike corrió antes de que la puerta se cerrara y los dejara a los tres encerrados con ese demonio, quién sabe que hubiera pasado.

-Mike no puedo creer que bajaras a ese sótano luego de lo que te conté.

-¡Lo se! Pero quería deshacerme de la muñeca.

-Ahora vez que ya no podemos Mike, no va a permitirlo, al menos esta encerrada y se que no nos hará daño.

-Ojalá tengas razón, vamos a dormir y olvidemos esto.

Fue imposible para ambos volver a reconciliar el sueño, Mike estaba tan preocupado de que esto le hiciera daño al bebé, Gertrudis por su parte lo estaba mucho más, ambos se abrazaron y cuando Gertrudis se durmió tuvo una horrible pesadilla.

"Estaba en la habitación del bebé y éste ya había nacido, era un niño y lo veía dormido en su cuna, luego regresaba a la cama con Mike y se dormía, escuchó el llanto del bebé y corrió a buscarlo, entonces vio algo que le aterro como nunca, un hombre mitad cabra mitad hombre, tenía esas patas de chivo inconfundibles y esos cuernos grandes, a su lado estaba Poly quién reía a carcajadas, el hombre cabra tenía en sus brazos al bebé y Gertrudis le gritaba que se lo devolviera, entonces Poly le decía que no porque ahora ese bebé era suyo, luego veía a los tres desaparecer en las tinieblas junto con su bebé"

Gertrudis despertó asustada y sudando intensamente, Mike finalmente dormía y no quiso despertarlo, no pudo volver a dormir y apretó la sábana, tenía tanto miedo y a la mañana siguiente decidió no contarle a Mike, podría preocuparlo aún más...

Gertrudis vivía con miedo en una paranoia total, su embarazo avanzaba y con el sus miedos y preocupaciones se alteraban, seguía teniendo estas extrañas pesadillas, Mike ya estaba tranquilo puesto que no había visto ni escuchado nada, Gertrudis no sabía si era su mente la que jugaba con ella o era Poly la que le hacía vivir este infierno.

Aveces veía a otras embarazadas en el hospital, se veían tan felices y ella era tan desdichada, cuando sentía una patada del bebé se alegraba mucho, aveces al despertar lo primero que hacía era tocar su vientre para sentir el latido del corazón del bebé, aveces tenía miedo de que Poly se lo llevara aún antes de nacer.

Con una gran barriga, ahora Mike pasaba en casa pendiente de su esposa y nada más lo asusto como el día en el que nació el bebé, Gertrudis cocinaba el almuerzo y sintió como si le hubiesen clavado un puñal en el estómago, luego vinieron otros dolores tan insoportables que no podía ni estar de pié, Mike se la llevó rápidamente al hospital y más tarde llegó Ruth, Thomas, Richard, Elena y demás familiares, incluyendo a la vieja y pobre Eva que apenas podía caminar. Luego de casi 10 horas de larga espera, Gertrudis trajo al mundo un hermoso niño tal y cómo lo veía en sus sueños, cuando lo vio por primera vez tuvo miedo, era exactamente al bebé de sus sueños, pelón, mejillas rosadas, piel trigueña y ojos grandes, era precioso y a pesar de sus miedos los hizo a un lado para disfrutar este hermoso momento, Mike estaba envuelto en lágrimas al ver a su pequeño niño, luego entró toda la familia con regalos para el pequeño.

-¿Y cómo se llamará? Preguntó Elena.

-Aún no hemos pensado en un nombre, me gusta Lucas, ¿Que dices?

-Es hermoso, Lucas Estefan Carrol, dijo Gertrudis dándole el segundo nombre al bebé.

-Es precioso hija, estoy tan feliz y que alegría que nació sano.

-¿Ya puedo jugar con él?

-No Richard, debes esperar unos meses más.

-¡Hay!

-Jajaja tranquilo campeón, ya verás como Lucas y tú serán inseparables.

-Eso espero.

Al día siguiente se fueron a casa, Gertrudis hubiera deseado quedarse en el hospital... llegaron y sintió tanto miedo de entrar, se quedó un rato en la puerta con el bebé en sus brazos y Mike la empujó suavemente, entraron y nada extraño paso, excepto por el frío tan extraño que sintió Gertrudis.

Ruth y Richard se decidieron quedar, Ruth sabía que su hija iba a necesitar de mucha ayuda tal y como su madre le había ayudado, además Gertrudis estaba débil y cansada luego de haber tenido al bebé.

Con tanta gente en la casa Gertrudis se sintió tranquila, Eva también se había quedado porque según ella nadie era más experta en bebés que ella, para Gertrudis esto era de mucha ayuda sobre todo porque en las noches el bebé dormía seguro a su lado.

El trabajo de ser madre era agotador, pero todos ayudaban incluso Richard que debes en cuando vigilaba al bebé cuando Gertrudis iba al baño, Ruth limpiaba la casa y lavaba los pañales, Eva hacía la comida y las mamilas del bebé, Mike se sentía afortunado de tenerlas en casa apoyandolos en esta difícil labor totalmente nueva para ellos.

Pasó un largo mes, Gertrudis ya no tenía pesadillas pero despertaba en las noches con ese horrible presentimiento de que algo estaba ahí vigilando al bebé, pero mientras estuviera ella para defenderlo sería capaz de atacar a quién fuera sin importarle dar hasta su propia vida en el intento...

Llegó entonces el día que Gertrudis no hubiera querido, así es, Ruth ya estaba muy cansada y debía regresar a casa, además Thomas la extrañaba y ella a él, debía regresar a casa y retomar su labor de esposa, madre y ama de casa, el desvelo y el desgaste físico que sentía era demasiado, ahora le corresponde a Gertrudis lidiar junto con Mike la responsabilidad del bebé, por suerte para Gertrudis, Eva se quedaría un tiempo más puesto que decía que quería disfrutar al máximo a su bisnieto.

Al cumplir 6 meses, el bebé ya estaba hermoso y decía de vez en cuando entre balbuceos ¡Mamá! Lo que para Gertrudis era como ganarse la lotería, Mike estaba loco por su hijo al que veía tan parecido a él, pero sucedió la desgracia, una mañana Eva no se había levantado, entonces Gertrudis fue a buscarla a su habitación y la encontró muerta en la cama, el doctor dedujo que fue una muerte natural debido a su avanzada edad, todos estaban devastados, principalmente Ruth quién estaba completamente destrozada, Gertrudis no se quitaba de la cabeza que Poly le había hecho esto a su abuela, pero Mike le afirmaba que eso era más que imposible.

-La muñeca ya no esta Gertrudis, tu abuela murió de vieja, ¡Entiende!

-Pero es que...

-Ya Gertrudis, deja atrás este asunto y seamos felices de una vez, se que lo de tu abuela te ha afectado mucho, pero ya no pienses en la muñeca, disfruta esta hermosa etapa de la vida, disfruta a nuestro pequeño Lucas que un día crecerá y desearas que eso nunca hubiera pasado.

-Tienes razón Mike, dijo Gertrudis con lágrimas en los ojos abrazando a su pequeño fuertemente.

Así es como Gertrudis decidió que esto ya no iba a afectarle, cuanta mas importancia le daba a Poly más ella podría finalmente volverla loca y hasta cometer una locura, entonces decidió que sería feliz cada día de su vida y que viviría y disfrutaría como nunca cada etapa de su pequeño y hermoso Lucas...

Nota.

Hola, quería pedirles un favor, una amiga muy querida tuvo un problema, resulta que se le borró su historia en Wattpad y se siente mal, ya tenía muchas lecturas, votos y comentarios, ella a decidido volverla a escribir y necesita más lectores, si se animan aquí esta su perfil escritora__MD la historia se llama Santa Diabla, es acerca de una chica vengativa que desea hacer pagar a todos los que le han hecho daño en el pasado, OJO, esta historia es para mayores de 16 años, gracias :)

¡Maldita Muñeca! #Wattys2015Donde viven las historias. Descúbrelo ahora