¡Maldita Muñeca! #Wattys2015

Un nuevo amanecer.

Los ojos de Arturo se abrieron lentamente, la luz del día penetró en ellos y el suelo frío le obligó a levantarse, no tenía idea de a que hora se había dormido pero todo aquello le pareció una horrible pesadilla, miró a Kelly en la cama y esta se veía dormir plácidamente, miró a todos y poco a poco cada uno iba despertando, todos se veían confundidos y Kelly finalmente abrió sus pequeños y brillantes ojos.

-¿Papi, que pasó?

-Mi niña, dijo Arturo y corrió a abrazarla, Peter la miraba dudando de que si aún era Kelly o el demonio quién aún habitaba en ella...

-Mi niña, ¿Estas bien?

-Si, creo que si.

-¿Recuerdas lo que sucedió anoche? Pregunto Peter.

-No, ¿Que pasó?

-Nada cariño, sólo un mal recuerdo.

-Quiero agua, tengo sed.

-Ya te la traeré mi cielo.

-¡No espere! Yo se la traeré, dijo el padre y trajo a Kelly un vaso con agua bendita, está la tomó sin poner resistencia y no parecía afectarle.

Volvieron a recostar a Kelly en la cama y rezaron un rosario completo, a Kelly parecía no afectarle las oraciones, al contrario, ella rezaba también.

-Padre, creo que Kelly ya esta mejor.

-Si, yo también lo creo, pero esperaremos unos días para ver como sigue, vendré a verlos todos los días.

-Es una buena idea padre.

-Hija, ¿Tienes hambre?

-Si mami.

-Vamos, haremos un rico desayuno, ¿Te gustaría un rico panque con frutas?

-Si mami y Tocino también.

Martha sonrió y Arturo le devolvió la sonrisa, respiraron tranquilos y todos salieron de la habitación, excepto Lupe, quién comenzó a buscar a la muñeca por todas partes, quería arrojarla a la basura y no la encontró, bajó a la cocina y recordó que Kelly llevaba el collar puesto.

-Mi señor, hay que quitarle el collar a la niña.

-Es verdad, dijo Arturo y se acercó a Kelly para quitarle el collar, todos quedaron impactados al no ver el collar.

-¿Kelly, tú te quitaste el collar?

-No papi.

-Mi señor la muñeca tampoco estaba.

-¿Que muñeca? Pregunto Kelly con mucha curiosidad.

-Tu muñeca Mary Anne.

-No recuerdo una muñeca llamada así.

Todos se miraron absortos de aquél comentario, ¿Cómo era posible que no recordará a la muñeca?

Después del desayuno el padre se fue y tan pronto como salió los vecinos curiosos lo vieron y se les hizo muy extraño que saliera de ahí, casualmente cuando ayer se habían escuchado esos aterradores gritos, algunos corrieron a su encuentro dispuestos a exigir una explicación.

-Padre, buenos días, ¿Que pasaba anoche en esa casa?

-Buenos días, pues no voy a mencionarlo, debo irme voy tarde a la misa.

-Pero padre, ¿La hija de los Hamilton esta poseída?

-Si padre, anoche parecía que si, además esa niña es muy rara.