»Devil ✔️ +18 [ Lizkook ]

011

Banda, no sabía que Wattpadcacas había recortado el capítulo, tuve que anular la publicación de este capítulo y continuarlo, ya que hubo un error y no se guardo completo y yo creía que sí. Chalé.

Limpió sus lágrimas y se levantó, mirando con aburrimiento su habitación, no sabía porque se había vuelto tan legumbre y sin emociones aquella habitación en la cual había celebrado algunas victorias, compartido momentos con SeokJin en los cuáles, ninguno eran sexuales.

Bufó. Salió de su cuarto y bajó al primer piso, toda la sala y cocina estaba en total silencio, manteniendo una paz bastante falsa, porque dentro de Lisa, sabía que algo iba a pasar, porque el sentimiento de intranquilidad e inseguridad lo sentía traspasar las paredes y acecharla con cuidado, para después, caer de golpe, arruinandola más.

Sus pasos empezaron a dirigirse hacía la cocina, hacía un minibar, dónde podría tomar y tomar, para aligerar sus penas y malos recuerdos. Tomó la botella de whisky, uno que había comprado en su viaje a Canadá, era un Whisky bastante caro, al igual que bastante fuerte y si no se tomaba con delicadeza.

Tomó un vaso de cristal, se sirvió hasta llenarlo, le puso la tapa a la botella y se llevó el vaso a sus labios, sin importar atragantarse ni emborracharse de manera descuidada y para nada saludable.

Vaso, tras vaso, tras vaso. Lisa estaba completamente ebria, mirando hacía enfrente y dejando que sus lágrimas bajarán por sus mejillas, en una momento de distracción que agachó la cabeza, fue el suficiente tiempo para qué alguien se apareciera como por arte de magia, tomando la botella y retirándola un poco del alcancé de Lisa.

Ella alzó la cabeza y vió lo más hermoso que sus ojos hayan visto.

—¿Quién eres y qué haces en mi casa? — su voz salió rasposa y bastante pesada, tanto qué arrastraba las palabras al hablar.

Él le sonrió y se inclinó un poco hacía ella.

—Un amigo.

—No tengo amigos.

—Ahora los tienes.

—No quiero amigos — finalizó. Lisa tomó su vaso y se terminó el poco licor que esté tenía, con su mirada empezó a buscar la botella, pero no la halló, así qué miró al chico que tenía frente a ella. —¿Dónde está mi botella? ¿Acaso eres un ladrón y te estas llevando mis cosas, aprovechando lo ebria que estoy? — lo señaló.

—No soy ningún ladrón y mucho menos me aprovecharé de qué estás ebria — explicó. —¿Qué harías si te dijera que soy tu ángel guardián? — preguntó, teniendo una sonrisa de lado.

Lisa dejó su vaso en la mesa, lo miró con una mirada bastante profunda y habló.

—Te golpearía hasta hacerte regresar al cielo — aquello hizo que el arcángel frunciera su entrecejo.

—¿Por qué?

—Porque jamás me cuidaste, jamás supiste ayudar a tu humana, te necesite cómo no tienes idea, pero jamás respondiste a mis llamados, creí en tí, hasta que fui abandonada por tí, fue entonces que dejé de verte como mi salvador y empecé a verte como un demonio...uno bastante podrido por dentro.

El arcángel se quedó callado, mirándola sin saber que decir, hasta que alguien más hablo por él.

—Vamos, dile dónde estabas cuando todas esas cosas le pasaron — Yoongi miró con enojó al demonio que estaba a unos cuántos pasos detrás de una borracha Lisa.

—No te metas, demonio. Tú ni siquiera deberías de estar aquí — atacó. Lisa bufó, tomó dos vasos más de vidrios y tomó una nueva botella, sirviendo el licor hasta llenar ambos vasos e incluyendo el suyo.

—¡Cállense! Me dan dolor de cabeza — talló su cabeza, revolviendo su cabello y dejándolo algo desordenado. —Beban esto si realmente son unos verdaderos hombres — la lengua de Lisa estaba prácticamente dormida, pero eso no impidió que ambos se mirarán, tratando de desafiarse. Jungkook sonrió de lado y miró al arcángel con burla.

—¿Qué? ¿No me digas que tu papi Dios te va a castigar por beber licor? — Yoongi frunció su entrecejo, empezando a sentirse furioso. —¿Acaso eres una niña, pequeña hada? — el demonio tomó el vaso de cristal y sin pensarlo mucho, se lo tomó, tragando el whisky cómo si fuera agua. —¿Entonces? — retó nuevamente el demonio.

Yoongi miró el vaso y sintió un poco de asco, él no era alguien que desobedecia a su señor, pero qué un demonio lo este retando de dicha manera, lo ponía furioso y quería mostrarle a aquel ser de oscuridad que él podría hacerlo. Así qué, sin pensarlo mucho, tomó el vaso y se tomó el whisky, al instante hizo gestos y arcadas de asco. Pero logró soportarlos.

Ese y los demás vasos que se les fue servidos por Lisa, quién ya estaba lo suficiente borracha cómo para perderse completamente.

Una hora más tarde, con el arcángel cayéndose de borracho en el sofá, Lisa sentada y riéndose de quién sabe que cosa y un Jungkook mirándolos de pie con los brazos cruzados y una ceja arqueada, negaba lentamente con la cabeza, un poco molesto y divertido con la escena.

—¡Diooooooos! — gritó el arcángel, señalando hacia arriba. Jungkook rió. —E-El maldito d-demonio g-ganó — el nombrado alzó una ceja, ofendido.

—Oye idiota — le llamó, Yoongi lo miró y se levantó con dificultad. Tambaleándose, logró ponerse de pie y señalar al demonio. O eso pretendía.

—Estoy acá, idiota — hizo su dedo a un lado, logrando señalar bien.

—T-Tú... — levantó su mano en un puño, trató de pegarle un puñetazo al demonio, pero falló, se dió una vuelta completa y cayó nuevamente en el sofá. Ya no se levantó, sólo balbuceaba cosas sin sentido.

Jungkook chasqueo la lengua y dirigió su mirada a Lisa, quién al parecer, se había quedado dormida en el sofá, con su cuello hacia un costado. Soltó un suspiro y se acercó a ella, cargándola al estilo nupcial, empezó a subir las escaleras.

Al llegar a la habitación de ella, la acostó en su cama, tomó una sábana y la cubrió hasta su cintura, pero su mano fue tomada de imprevisto haciéndolo sobresaltar un poco, levantó la mirada hasta dirigirla a Lisa, quién le sonreía de lado.

—J-Jungkook — sonrió, se reincorporó, quedando rostro con rostro, a una distancia bastante corta. —Te deseó.

Y el demonio, perdió totalmente el control.

Mientras qué en la sala, se encontraba dormido aquel arcángel que había llegado a salvar de la oscuridad a su protegida.

Sin saber que estaba a punto de perderla por completo.

—LaOmmaChida💜💜✨✨✨