22. Solo una...

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La chica solo rio un poco, en verdad se estaba burlando de Scaramouche, y este cómo no, no se lo tomaba de una manera muy buena que digamos.











—Supongo que aún no encuentras mi relación con el abismo ¿no? —preguntó ella algo divertida cruzándose de brazos

—Lo tienes bien escondido, incluso para una de las personas más ricas

—Sí, lo sé —sonrió orgullosa— Al parecer te gano en contactos Ballader

—Tampoco te sientas demasiado orgullosa de algo que pronto voy a acabar descubriendo —se cruzó de brazos

—Sé que lo vas a hacer —sonrió ella aún con aquel toque burlón— incluso si me das pena podría ayudarte a descifrar mi maravilloso secreto















Scaramouche solo negó, no pensaba ni de coña solicitar su ayuda, si algo era el chico, era cabezota.

A decir verdad, tampoco hablaban demasiado, solo estaban en silencio realizando sus tareas, los dos no eran demasiado charlatanes, además de que Scaramouche se conocía, y sabía que como abriese la boca tal vez la chica se iba y le dejaba con toda esa pila de papeles, aunque luego recordó que la condición para que le quitasen todo el ese trabajo era teniendo un amigo, papel que tomaría Lumine, y cuando ya consiguió dejar un poco su orgullo de lado, ya habían terminado y la chica salió de manera rápida y sin despedirse de él.











—... Será...






***





Lumine caminó por los pasillos hasta que se encontró con Venti divagando, caminando de un lugar a otro mientras mantenía sus ojos cerrados y pensativos, a decir verdad, parecía que estaba pensando en un tema bastante importante, lo cual era sinceramente preocupante, así que se acercó para comprobar que sucedía.












—¡Lumine! ¡Qué bien me vienes! —sonrió de par en par— ¿Qué te parece si vamos a beber al bar?

—¿A las 6? —preguntó alzando su ceja y cruzándose de brazos

—¡Nunca es mala hora! Además de que yo me la puedo pasar horas bebiendo

—Talentos de un borracho —se encogió de hombros— ¿Estabas pensando en eso?

—Ehe~... hace bastante que no bebo y sería complicado convencer a Aether para que me acompañe

—Por casualidad... ¿Aether no te querrá acompañar porque le hagas pagar lo que consumes?

—Ehe~

—Bingo —dijo al haber dado con la respuesta correcta— ¿De todos modos que haces con el dinero de la beca? Lo que ofrecen no es expresamente poco

—Soy un músico, y cómo comprenderás la reparación de los instrumentos o materiales como cuerdas y más son algo caras, además de que el malcriado gato de Margaret no me para de robar las cuerdas de la lira

—¿No te gusta los gatos? —preguntó Lumine frunciendo un poco su ceño

—Son horribles bolas de pelo que parecen adorables, pero te apuñalan por la espalda, pero la principal razón es porque soy alérgico, así que cada vez que ese pequeño bribón me roba mis cuerdas no puedo ir a por ellas, normalmente le suelo pedir a Aether que vaya por ellas, pero esa cosa tiene unas zarpas de bestia que a veces acaba por dejar mis cuerdas inservibles

Universidad de TeyvatDonde viven las historias. Descúbrelo ahora