Dudas, preguntas, confusiones (capitulo 13)

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Mel salió del lugar y vomitó en la esquina. Paró un taxi y temblando llegó al Escala. Ana le preparó un té mientras ella se duchaba. Bebió el té y se acostó a dormir ¡maldito seas! ¿Por qué no puedes dejarme en paz? dijo mentalmente. 

Christian llego al Escala sintiéndose solo y abandonado, de nuevo. Solo le había pedido un beso ¿Por qué ella salió huyendo de esa manera? ¿Acaso no le gustaba? ¿Acaso no dijo que él era el único que la hacía feliz? Se cubrió con la almohada los ojos y durmió. Hubiera querido tenerla a su lado.       

Rose no dejo de saltar ni gritar en cuanto lo vio ingresar a Grey's House. Lo acompaño a su despacho y le entregó, con cara de satisfacción una pila de papeles. Christian puso también el manuscrito y comenzó a leerlo. Llamó a Roach para decirle que estaba a su disposición por cualquier cosa. Y trató de olvidar a Mel. Ya no tenía sentido seguir jugando ese juego. Ella lo había rechazado y él sencillamente decidió que no la seguiría, ni la acosaría, ni averiguaría de su vida como alguna vez hizo con otra persona. El informe de Welch descansaba en el escritorio de su despacho del Escala y ahí se iba a quedar.

Trabajo durante todo el día y cuando llegó al Escala apenas toco la cena que Gail le había preparado. Se dio una ducha y se acostó. Mel estaba en la cama todavía. Había pasado todo el lunes acostada y sintiéndose pésimo. No por los vómitos y las arcadas sino porque seguramente después de lo que había pasado Christian no querría saber nada de ella y lo entendía. No había recibido ni un mensaje suyo y supuso que estaba enojado. Ella había querido mandarle varios pero no se animaba. Se sintió sola en Seattle. Abrazó su almohada y entre lágrimas y sollozos se quedó dormida.  

Cuando Christian llegó a Grey's Enterprise el martes le dijo a Andrea que suspendiera todo lo que había para después de las dos. Ella le informó que solo tenía una reunión pautada para la mañana. Iba a volver a lo de John, no estaba seguro de si era la decisión correcta, pero necesitaba de alguien que supiera todo de él y Elena ya no era una opción. Se despidió de Andrea, subió al auto y movió su cuello varias veces mientras esperaba ser atendido. La oficina de John estaba distinta, parecía más grande y estaba pintada de un color diferente. Ahora lo notó. Habían pasado dos años, todo cambia en ese tiempo

-¿Christian?- escuchó la voz de John llamándolo y lo miró. Entró y se sentó en una silla roja muy extraña

-Veo que has mejorado tu gusto en la decoración- le dijo

-Gracias por el cumplido. Dime ¿Qué ocurre?- Christian lo miró pensativo tratando de elegir las palabras correctas

-Anastasia y Elliot- diablos, quería hablar de todo menos de eso

-Cuando volví a mi casa, entré al cuarto rojo para ver que me producía volver allí

-¿Y qué paso?

-Creo que lo necesito de nuevo

-Solo que ahora ¿no es por tu madre verdad?

-No...

-¿Crees que sería sano volver a tus viejos hábitos?

-Mira a lo que me llevo tu "confía, abre tu corazón, confía en Ana, ella te ama"- dijo con ironía. John sabía que Christian tenía razón. Jamás pensó que Anastasia pudiera traicionarlo de esa manera

-Lo sé, tienes razón en eso, pero Anastasia no va a ser la única mujer que ames

-Ah no, a mí no me vengas con toda esa idiotez del amor... el amor lo único que hace es destruir. Mi madre biológica según tú, a su forma me amó, pero dejo que un hijo de puta me quemara con cigarrillos, Ana me amaba según tú, pero se revolcó con mi hermano. Mi madre me ama pero sigue recibiendo a esos dos en su casa ¿de qué mierda sirve el amor? Si quieres decirme que puedo pagar prostitutas para tener mi liberación sexual lo comprendo, pero no me vengas con esa mierda del amor... y ni se te ocurra nombrar a Elena, que para tu desgracia y la de Ana, cuando me advirtió que esto pasaría, no hacía más que tratar de que abriera los ojos y al final, el tiempo le dio la razón

-Guau

-Si, guau...

-Estás cerrado como siempre, es como si hubiésemos retrocedido mil años Christian

-Me siento frustrado, dolido, enojado... quisiera que desaparecieran de mi vida, de mi mundo. Ella vino a casa una noche a decirme que todavía me ama. Vino a decirme que extraña hacer el amor conmigo. ¿Qué es lo que tengo que hacer o sentir después de eso? Ella esta con Elliot ¿quiere que yo lo traicione como lo hicieron conmigo? Esta ahí John, esa electricidad que sentía cuando la tenía cerca. Me muero de ganas de tocarla, de besarla, de tenerla conmigo, en mi cama, de hacerle una y mil veces el amor. Y luego... recuerdo a Kate entrando al Escala con ese video, a ella tratando de explicar... quisiera morirme ahora mismo

-He! ¿Qué dices? No vuelvas a repetir semejante locura o haré que te internen Christian y no bromeo

-Lo siento, pero es así lo que me pasa ahora

-¿Volvieron las pesadillas?

-No

-Eso es algo bueno

-Supongo

-Christian... dime la verdad... ¿todavía la amas?

-Yo... cuando creo que podría perdonarla, recuerdo y siento que quiero que desaparezca del mundo

-Tú tienes sentimientos por ella todavía

-No lo sé

-Ok, decir no lo sé es mejor que decir que no o negarlo directamente

-Además hay otro asunto

-¿Otro asunto?

-Melanie Preston

-¿Quién es ella?- Christian le cuenta acerca de Mel.

-¿No leíste el informe de Welch?

-No

-¿No la llamaste o te acercaste a ver porque actuó de esa manera?

-No

-Christian

-No voy a cometer los mismos errores que antes

-Comprendo... pero tienes que acercarte de alguna forma a ella y ver que le sucede. 

-No fui yo quien salió huyendo 

-Es joven Christian... quizás no esperaba eso de ti

-Yo se lo había pedido antes

-Quizás lo olvido

-Quizás, quizás, quizás...

-Ok termino nuestra hora... ¿quieres repetir?

-Te llamo

-De acuerdo- John se levanta y le estrecha la mano. Christian le sostiene la mirada

-Vamos a avanzar, vamos a hacer que dejes atrás este dolor y que vuelvas a tu vida de la forma en que tú deseas, aunque esa forma sea un poco demasiado controlada- Christian sonríe

-Nos vemos- se siente raro pero fue bueno hablar con él.

-¿A dónde vamos Sr Grey?- pregunta Taylor

-The Crumpet Shop y después al Escala- cuando bajo en el negocio compró unos scones que su madre siempre le recomendó. Volvió con Taylor al Escala y cuando está llegando al piso 29 detuvo el ascensor 

-En un rato subo- le dijo a Taylor antes de bajarse del elevador. Cuando llega hasta la puerta no está seguro de golpear o irse. Pero decide averiguar qué fue lo que pasó con ella. Una mujer mayor lo recibe

-Buenos días...

-Buenos días Sra. ¿se encuentra Mel?

-Si, joven, pase- el departamento es igual al suyo pero es mucho más cálido. La paleta de colores es verde oscuro, azul, blanco y negro y está todo en armonía

-Ella no se sintió bien desde ayer a la mañana y está acostada. Su cuarto está arriba

-Gracias- subió las escaleras y golpeó

-Ana, no quiero comer... no insistas- la voz de Mel suena rara por lo que Christian abre la puerta y la ve. Pálida. Despeinada y ojerosa

-¿Christian?

-¿Qué diablos te ha ocurrido?-


Mi pasado... ¿mi futuro?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora