Volviendo a Seattle (capitulo 37)

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El miércoles su abuela le cocino la lasaña más rica que Christian había probado y salieron a camimar de nuevo con su abuelo. De cena solo hubo frutas porque todas estaban comiendo muy pesado y Jacinta no quería que se pusieran malos. El jueves fueron al mercado. Pasaron primero por la casa de Rubén donde dejaron casi todo. Los dos packs de gaseosas y las cosas para la picada. Dijeron que volverían todos juntos para las 20. Christian observaba a Jacinta cuando estaba preparando el bizcocho de chocolate y Grace no tardo en avisarle que a las 20.30 estarían golpeando la puerta de la casa de su tío. Y así fue. Miriam fue a abrir y casi toda la familia Grey apareció en el patio donde todos estaban degustando la picada. Christian se paro y abrazo a su madre de manera muy fuerte. Abrazo a su padre y también a Elliot que se sorprendió por aquello. Los fue presentado a todos, cuando llego el turno de Hugo, de Jacinta y de Gabriel hubo lágrimas en los ojos de todos. Christian entró un momento y tomo los albumes que tenía y se los mostró a su madre. Grace lloró al ver las fotos de Christian recién nacido.

-Hay por Dios hijo, mira que bonito y guapo que estabas aqui...- Christian sonrió mientras Carrick no dejaba de asombrarse con las fotos al igual que Grace. Todos hablaron de Ella, contaron su historia, lo mucho que la extrañaban...

-Supongo que ella no estaba lista para ser madre, por eso se fue, para dejarte a Christian- dijo Jacinta mirando a Grace

-Yo... sencillamente lo amé cuando lo vi por primera vez. Él no estaba bien, no les voy a mentir, estaba sucio, enfermo, desnutrido y lastimado. No me dejo ayudarlo a darse un baño y durante años evito el contacto físico. Pero siempre supe que él encontraría la forma de curarse, es un hombre muy fuerte, un gran hombre, un hombre maravilloso y yo no puede estar mas feliz de saber que es mi hijo... que quizás no lo lleve en mi vientre durante nueve meses pero estuve con él en su momento más triste y duro y solo tenía cuatro años... nunca perdí mi fe en él. Siento lo de Ella, siento que su vida haya terminado de esa manera. Me dejo el mejor regalo del mundo, uno que amo profundamente- dijo con la voz entrecortada por el llanto. Christian la abrazó y beso su cabello. Pasada la emoción todos comenzaron a comer la carne y a charlar de la vida

-¿Como es que siendo tan guapo primo no tienes novia?- preguntó uno de sus primos

-Es gay- respondió Elliot y Christian comenzó  a reirse sin parar

-En Seattle cuando eres tan guapo y no tienes novia hay dos opciones: o quieres ser cura o eres gay

-¡¡Elliot deja de hablar así de tu hermano, Christian no es gay!!- John se unió a Christian y a Elliot en la carcajada. Cuando todos se recompusieron Christian hablo

-Eso de que soy gay es una calumnia- dijo dándole un coscorrón a Elliot

-Lo que pasa es que a mi, a diferencia de muchos otros, no me gusta hacer alarde de mi vida sexual. Tuve una sola novia oficial, Anastasia, pero ya no estamos juntos

-Que pena- dijo Jacinta- ¿que ocurrio?- Elliot se tenso todo

-Cosas de la vida abuela, supongo que si no es para ti, a la larga se sabe.

-Pues no tardarás en encontrar a otra mujer que te ame hijo- dijo Hugo y Carrick lo miró

-Eso espero, necesito encontrar alguien a quien amar y que me ame también.

-No comas ansias, si estas soltero cuando cumplas los 40 ven y pregunta por Peggy

-¡¡¡Abuelo!!!- dijeron a coro sus primos y Gabriel estalló en una carcajada

-¿Quien es Peggy?- les pregunto Christian

-Su oveja

-Por dios- dijo Christian comenzando a reír. Todos estallaron en una carcajada. A las 12 se despidió de su primos y sus tíos y prometio volver pronto a verlos. Se llevo sus mails por las dudas también. Jacinta preparó café mientras Gabriel cargaba en la camioneta el equipaje de todos. a la una de la mañana llamaron a un taxi y Christian se acercó a Jacinta quien en la cocina trataba de limpiarse las lágrimas

Mi pasado... ¿mi futuro?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora