Hablando con mamá (capitulo 36)

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Christian cerró sus ojos pero al rato los volvió a abrir al sentir un aroma muy delicioso. Fue hasta el baño y se lavó la cara y los dientes. Su estómago grunía y cuando bajo se encontró a Jacinta trayendo una fuente enorme con carne. Puchero. Hacia años que no comia puchero. Hugo le sonrio y Jacinta también. Se sento al lado de ella y comenzó a comer en silencio. Todo estaba delicioso, la carne, las papas, las batatas, el choclo, la calabaza. Repitó el plato que era bastante abundante y su abuelo sonrió feliz. Luego de que Hugo ayudara a levantar las fuentes, Jacinta trajo a la mesa una olla con sopa de verduras y arroz. Cortó queso fresco en el plato de Christian y le sirvió una buena porción. Christian estaba encantando cuando los hilos de queso inundaban su cuchara.

-Tienes la misma cara que ponía tu madre cuando hacía esta comida- le solto su abuela

-¿Puedes culparla? esta delicioso...

-Es eso o como te saltaste el desayuno comerías cualquier cosa- dijo Gabriel

-Ahi te quedas sin postre por malo- dijo su abuela y todos rieron. Comieron fresas con crema de postre, Gabriel incluído. Esta vez fue Jason quien ayudo a levantar la mesa. Todos fueron a la sala

-Quiero quedarme con las fotos Hugo

-Claro que si hijo, son tuyas... no lo dudes

-Gracias

-Puedes quedarte con las de tu madre también.- le dijo su abuelo- cuando Gabriel mande a hacer las copias para él yo también lo hare

-¿Estas seguro?

-Claro que si, quiero que vuelvas a tu empresa con las fotos de tu madre

Christian paso del café ofrecido y se fue un momento para afuera a darle unas indicaciones a Welch

-Es muy vago lo que me esta diciendo Señor Grey, con esos datos no se que pueda obtener

.Barney escucha... necesito que me consigas la dirección de la familia Collier en Seattle, ellos me tuvieron dos meses cuando mis padres hacían los papeles para mi adopción, habla con mi padre, quizás ellos recuerden el lugar o la dirección

-De acuerdo..

-Y después quiero que lo busques

-Tengo que tener más datos que solo su nombre...

-Averigua por antecedentes, un hijo de puta como ese debe tenerlos... prostitución y drogas... Yo recuerdo una de las pocas veces que mi madre salió conmigo de la casa donde vivíamos estábamos en las calles... St Prospect y la 4ta Avenida, seguro que hay informe policial sobre la muerte de mi madre, averigua y cuando lo encuentres me avisas

-Ahora si estamos hablando Señor Grey- Christian escuchó los dedos de Welch tecleando sin parar- entonces confirmo que el nombre del sujeto es Luca Vocca

-Si, no se como se escribirá pero fijate

-Lo mantengo al tanto sobre eso y sobre la policía que lo entregó a la Sra Grey

-Gracias Welch

-Señor...

-Dime...

-¿Esta bien usted?

-Pasando un gran momento Barney, uno que nunca pensé que pasaría pero que lo soñe siempre

-Me pone feliz escuchar eso-

Christian sonríe cuando cuelga el teléfono. Todavía recordaba cuando llego en la ambulancia al Seattle Children's Research Institute, cuando vio a su madre por primera vez. Tan alta, tan hermosa, tan elegante y tan dulce y suave con él. Cuando le dio aquella barra de dulce que Christian devoro porque hacia días que no comía. Recordó como comprendió enseguida que no quería que lo tocara. Como le consiguió ropa limpia y lavo su mantita antes de llevarlo a comer hamburguesas. Esas deliciosas  y calientes hamburguesas. Sonrió porque recordó que ya ni se acordaba cuantas había comido. Recordó el olor a papas fritas recién hechas y lo refrescante de la gaseosa. La cama que le dieron para dormir. A Grace prometiendo que pronto lo iría a buscar para irse con su marido y con su otro hijo. Los cuentos para dormir de la Sra Collier. Estaba sentado en la escalera de la casa de su abuela, ya serían las tres de la tarde pero aún cuando el sol picaba, la brisa lo hacía más soportable. Llamó a su madre

Mi pasado... ¿mi futuro?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora