Kuroko No Básquet

|Capítulo 14|

Las practicas terminaron, por lo que todos volvían a sus hogares o a algún lugar para descansar. La chica azabache se había retirado unos minutos antes de que los chicos terminaran de entrenar por tener que ir a un lugar junto a sus amigas, aunque también por sentirse algo incómoda con la mirada de cierto peliceleste, quien no le había quitado la mirada desde que se presentó como Seina, la hermana de Shin.

Pero la razón del porque de ese comportamiento solo sabía el mismo chico, pues estaba muy seguro que aquella azabache no era Seina, si, tenía gastos parecidos a la chica pero eran diferentes, en especial porque cuando conoció a la hermana del chico, ella tenía algo en particular que la fémina no poseía: un lunar bajo su boca; y dudaba que tuviera maquillaje para ocultarlo, pues esta tenia también un lunar pero a lado de su ojo derecho.

Cuando todos se estaban yendo, decidió seguir a su menor para saber que era lo que estaba ocurriendo, pero en todo camino a su departamento, no vio ni escucho nada sospechoso, por lo que decidió irse a su casa.

Al llegar, se volvió a duchar para estar mas fresco y se acostó en su cama boca arriba. No sabía porque de repente estaba empezando a seguir a su kohai, tal vez solo quería descubrir sus habilidades pero él no era así, tal vez solo quería conocerlo mejor pero él no era así, tal vez solo quería saber la verdad detrás de ese partido pero él no era así, tal vez solo quería conocer a la chica pero él no era así, tal vez quería ser mas cercano que todos al chico pero...

Empezó a restregar sus manos por su rostro ante ese pensamiento que vino a su mente; era su kohai, ¿Qué estaba pensando y haciendo?, ahora gracias a su extraño comportamiento con el azabache, solo había logrado alejarlo de él y ese no era su plan, para nada; definitivamente debía disculparse con él para arreglar todo lo que provocó por meterse en la vida personal de mismo.

Alcanzó su teléfono para buscar el contacto del chico, no sabía si llamarlo, escribirle un mensaje o solamente esperar hasta verlo. Le pareció una mejor opción la tercera, quería hacerlo en persona, no a través de un dispositivo, por lo que volvió a poner su teléfono en su lugar para luego acomodarse y descansar. Esperaría el día indicado.

Los días pasaron pero ninguno de los dos hablaban y ya era el día en que tendrían un partido con Seihō, en el cual tendrían que enfrentar a uno de los Prodigios Letales, Yoshikawa Hikari, siendo la principal razón del porque tres de los chicos estaban nerviosos, pues habían visto la forma de jugar del chico y no era nada normal; algo bien sabido por el azabache.

Riko: escúchenme bien, no se deben de fiar mucho solo porque antes pudimos lograrlo, debemos esforzarnos y poner todo de nuestro esfuerzo...en especial por el nuevo del equipo...

Y allí estaba el pelirrojo, mirando hacia donde ellos estaban con una sonrisa juguetona, aunque su mirada iba mas por el azabache menor, quien lo ignoraba por completo, ni volteo a ver a los del equipo oponente, por lo que este decidió ir a saludar y desearles suerte.

Cuando llegó hasta el equipo contrario, apoyó su brazo alrededor de Hyūga, asustándolo pero se contuvo en golpearlo por estar a punto de jugar contra él, y por lo moral, también.

Hikari: -amistoso- buenas a todos, solo vine a desearles suerte y a presentarme...  

El grupo de tres amigos empezaron a temblar ante la emoción de conocer en persona a uno de los Prodigios Letales, una situación muy parecida de cuando conocieron al azabache.

Furihata: -emocionado- No lo puedo creer...

Hikari: mi nombre es Yoshikawa Hikari, un placer conocerlos y jugar con ustedes...-mira al azabache- gusto en volver a verte, Shin...

El chico lo miro fijamente por primera vez en todo lo que llevaba el calentamiento, sabía mas que bien como era y, en especial las indirectas que mandaba pero que siempre pasan desapercibidas por los demás, menos a él; porque siempre fue problema para todos.

Hikari: saben...-suelta a Hyūga- ustedes tienen una gran ventaja al tener a nuestro ex capitán con ustedes, es el que mas nos conoce, sabe hasta de lo que nosotros ni teníamos conciencia...

Shin: por lo que sabes mas que bien que entiendo tus insinuaciones...

Hikari: -ríe- pero solo digo la verdad_

Shin: disfrazada en mentira...

Hikari: -sonríe pícaro- ¿En serio?

Shin: un descarado lobo disfrazado de oveja...