La violinista: Una historia del Fantasma de la Ópera.

Ten cuidado con Nicolas...

Sentados en la acogedora sala del recibidor en el hotel, Galen relató toda la historia a las dos misteriosas mujeres. Ethel parecía la más fuerte y centrada de las dos, en silencio escuchaba con toda atención intentando meditar y atar cabos sueltos, por otro lado Antiope parecía ser la más sensible, mientras las palabras avanzaban la expresión en su cara reflejaba una profunda pena, se limitaba a negar con su cabeza una y otra vez sin saber que decir y aunque su vista era nula intentaba esconder su rostro dirigiéndolo hacia el piso.

—Lamentamos su dolor y crean, nos hubiese gustado llegar antes e impedir que se escaparan de nuevo, sinceramente pensamos que la luz del día detendría a Sebastián, es decir a Nicolas —dijo Ethel tras tomar un sorbo de café y sacar el móvil de su bolsillo —Haremos todo lo que este en nuestras manos.

—Lo que yo no entiendo es ¿Porque Sebastián cambiaría su nombre? ¿Y porque han terminado varias personas en el Velo por su culpa? ¿Porque es tan peligroso? —cuestionó Mirelle visiblemente consternada y confundida, no entendía como después de tanto tiempo conviviendo con fantasmas no se había dado cuenta de la naturaleza de su recién invitado.

—Tu sabes —comenzó Ethel con un tono y gesto demasiado sombrío —Que para algunas almas la muerte resulta ser algo traumático —Mirelle asintió y Ethel continuó —Para Sebastián lo fue, de alguna forma de la cual a no tenemos idea de como fue y como comprenderla, él desarrollo una especie de amnesia y la historia previa a su entrada a la dualidad del Velo, esta tan retorcida... tan... distorsionada que, de siglo en siglo teníamos que recordarle los hechos como en realidad pasaron y la verdad con respecto a que pasaría si llevaba a otra persona al Palacio Garnier, creímos que con ello y darle un lugar alejado más un violín él mejoraría, pero...— negó con pesar —Nos equivocamos como pueden ver.

—¿Qué es entonces o quién vive en el Palacio Garnier, en la ópera? —Galen se puso de pie, tenía que ir de hotel y empezar a buscar, Nicolas era un verdadero peligro y más si se enteraba que ella tenía la capacidad para destruirlo, el detalle del halo de la muerte fue algo que omitió en su relato pese a la insistencia de Ethel, quien aseguraba haber recibido el reporte de los "policías" que los persiguieron a bordo del tren.

—Digamos que, el Fantasma de ópera que actualmente vive allí no es el que Broadway, el cine y la literatura han romantizado para su deleite —concluyó la joven poniéndose en pie marcando un número en el móvil —Stephen, Sebastián volvió a escapar con la chica y no se sabe a donde se dirigen— comunicó Ethel —Los veremos allá— colgó de inmediato, volviéndose a los presentes —Muchas gracias Mirelle por toda tu atención y hospitalidad, debemos irnos —sacó de su abrigo unos lentes negros y una vez puestos, ayudó a Antiope a ponerse en pie —Los mantendré informados, trataremos de atrapar a Sebastián en una nueva redada, a los dioses rogamos sea la última—

—Quiero ir con ustedes —dijo Galen suplicante—Por favor, necesito asegurarme que Destiny esta bien, que va a estar a salvo, por favor.

—Solo tengo la moto y Antiope viaja conmigo, los fantasmas no pueden viajar a esa velocidad, solo aparecerse —asintió con bastante seriedad, pero en la mirada de aquel espíritu pudo notar un genuino sufrimiento, no sabía a ciencia cierta cuantos años llevaba en el Velo pero por su vestimenta no parecían ser muchos y aún así era de los pocos habitantes de ese lugar que había visto con una sensibilidad intacta —Pero... tal vez nos puedas ser de ayuda para contener y proteger a la chica mientras volvemos a capturar a Nicolas, hay un lugar en el centro de París, "Le palais des miroirs", si todo sale de acuerdo al plan emergente Nicolas y Destiny deberán llegar allí.

—¿Cómo estas tan segura?— cuestionó Galen desesperadamente.

—Porque Stefano les hizo una oferta muy tentadora al llegar a París ¿no es así? —dijo Ethel poniéndose en marcha rumbo a la puerta — Te vemos allá a media noche — seguido de esto realizó una breve reverencia y salieron rumbo a su nuevo destino.