Las Flipantes aventuras de papá pollito y sus extraños hijos rango S

Capítulo 1-Regresión parte 1

–Hyung ¿estás bien? –Dijo ese tipo.

Su costado estaba desgarrado, sus tripas se derramaban, y me preguntaba si estaba bien.

A pesar de estar al borde de la muerte, su rostro solo estaba un poco pálido. Su mirada tranquila me molestó. Me senté en el suelo y miré a mi hermano sin decir nada. Siempre estaba interfiriendo con mi trabajo. Él era mejor que el sucio yo, así que la gente siempre me había dicho que me quedara quieto y me portara bien, que no me agarrara de su muslo. No se equivocaron al decir eso, porque eventualmente rompí ese muslo grande y confiable, sin embargo.

–¿Por qué estás aquí?

Una voz contundente salió de mi boca sobre este viejo tema. ¿Por qué viniste a un lugar de mierda con alguien al que ya ni le hablas?

Éramos todo, menos cercanos. Si alguna vez nos encontráramos, solo habría entre nosotros una brisa fría. Cuando me destrozaron los huesos de la pierna, no vino al hospital a verme ni una sola vez. Cuando fui a pedirle ayuda para arreglar mi pierna rota, me rechazó fríamente y me sacó a rastras.

Ese día, después de que me echaran, me vi obligado a tomar el dinero que me dio. No he vuelto a hablar con él desde entonces.

Se rio amargamente de mi pregunta.

–¿Por qué estás aquí, carajo?

Aunque pensé que él era el tipo de persona, que mordería la mano que lo alimenta, una maldición emergió de mi boca. Tenía muchas expectativas sobre sus hombros, pero aun así dio su vida para salvar a un familiar inútil. Loco, hijo de puta.

¿Desde cuándo éramos tan amistosos? Si estás muerto y sales en las noticias, maldita sea, solo maldeciré un par de veces y luego lo olvidaré.

Pero que hiciste.

Yo estaba enojado. Estaba enojado e irritado por ser tan patético, no por él.

Sí, siempre he sido un hermano mayor desagradable. Incluso en esta situación, sigo siendo una persona con un cerebro de basura lleno de quejas y un complejo de inferioridad. ¡Así que déjame morir en un rincón de una mazmorra! ¡¿Por qué viniste?!

–Escúchame, Hyung. –dijo evitando mi pregunta.

–Lauchitas se duerme en ciclos de cinco horas. Si te escondes durante una hora, eventualmente se dormirá. Entonces solo tienes que salir por la entrada, me he ocupado de todos los monstruos menores, así que mientras no toques a Lauchitas, estarás a salvo.

Luego me tendió una pequeña piedra azul. Era un gate stone que proporcionaba la salida de una mazmorra cerrada. Solo se puede usar cerca de la entrada y es un artículo muy valioso que únicamente puede ser usado una vez por una persona.

No tomé la gatestone y fingí ser indiferente.

–Bien por ti, ahora úsalo.

Se rio de mis palabras.

–Yo tengo el mío. No usaré esto.

... Ahora que eres uno de los mejores cazadores de Corea, llevas varios de esos. Acepté a regañadientes la gatestone.

Fue entonces cuando me quitó los ojos de encima y miró sus heridas. Sin la fuerza de sus habilidades, habría colapsado y muerto durante mucho tiempo.

–Tienes getestones ¿también tienes algo como elixirs?

–No. Tengo una poción pequeña, pero no creo que vaya a funcionar. Lauchitas tiene una poderosa maldición en sus garras.